He aquí uno de los muchos combates que se desarrollaron en el Mediterráneo bajo el mismo objetivo de los contendientes, los británicos para reforzar la resistencia de la isla de Malta y los italianos para impedirlo, atacando a los convoyes de suministros. En esta ocasión, la magnitud de las fuerzas de protección inglesas y de ataque italianas,que hacían preveer unos resultados de destrucción determinantes, cristalizó en un combate de poco más de 1/2 hora de duración y el resultado final fué un crucero británico y un destructor italianos dañados de cierta consideración. Las órdenes de almirante Campioni, por parte italiana, de no entrar en combate sin ventaja apreciable de fuego, la falta de control de los medios aéreos, la desventaja inicial del almirante inglés Somerville, respecto a las fuerzas italianas, hasta que no se unió la fuerza D del almirante Holland, las diferencias de calibres y alcance de los cañones de ambas flotas, acentuadas por la disposición de las fuerzas inglesas y la descoordinación aérea, conformoran este pobre resultado final.

El 17.11.1940, dos escuadras italianas, una al mando del almirante Iñigo Campioni, con el "Vittorio Veneto" y el "Giulio Cesare" y siete destructores y otra al mando de almirante Angelo Iachino, con los cruceros pesados "Bolzano", "Fiume", "Gorizia", "Pola", "Trieste" y "Trento" y otros siete destructores, se dirigen hacia el Cabo Bon al encuento de un convoy británico salido de Gibraltar, con suministros y aviones para Malta. El convoy estaba escoltado por la Fuerza H al mando del almirante Somerville, con el portaviones "Ark Royal", el acorazado "Ramillies" y el crucero de batalla "Renown" y once destructores. Como escolta de los mercantes de suministros iban el crucero a/a "Coventry", el crucero ligero "Despatxch" y tres destructores y cuatro corbetas; se unió a esta escuadra, la fuerza D, procedente de Alejandría al mando del Almirante Holland y compuesta por el crucero pesado "Berwicks" y los cruceros ligeros "Manchester", "Newcastle", "Sheffield" y "Southamton".

Somerville se apercibe de la presencia de la flota italiana y ordena lanzar los dos cazabombarderos "Blackburn Skua" y 12 "Hurricanes" que llevaban para reforzar la protección aérea de Malta para que éstos alcanzasen la isla por sí solos. Los aviones, bien por decisión apresurada o por error del cálculo del combustible no pudieron llegar a Malta. A la vista de ésta fueron cayendo al mar y se perdieron nueve aparatos con los depósitos secos, al mismo tiempo que ordena al convoy y escolta que regresen a Gibraltar. El fiasco habido, con la consiguiente reprimenda a Somerville por parte del Almirantazgo, hacen remplantearse a este una nueva acción de suministros, dado lo vital que son los aviones para la resistencia en Malta, por lo que se decide reforzar la "Operación Collar" con más fuerzas de acompañamiento.

El 24.11.1940 zarpan de Gibraltar de nuevo, con los italianos al acecho. Somerville decide derivar hacia el Norte para evitar el ataque a los mercantes, al mismo tiempo que decide esperar a las fuerzas en camino de Holland. El día 27 es informado que los italianos se encuentran a ochenta millas de distancia. Por fín a las 12.00 horas, la Fuerza D se le une. Pese al desequilibrio de la fuerza de fuego de sus cruceros - 152mm contra los 203mm de los italianos-, Somerville decide presentar batalla. Forma dos grupos: en primera línia la división de cruceros de Holland más el "Berwick" y el "Newcastle". El "Renown" se queda atrás por tener problemas con el eje de sus hélices, que obligan al "Ramillies" y diez destructores a escoltarlo a su paso. Más atrás sitúa al "Ark Royal" y su escolta y finalmente el convoy escoltados por dos cruceros y tres destructores.

Los italianos forman tres grupos: El "Pola", "Fiume" y "Goritzia" junto con su escolta de destructores, a treinta millas del cabo Teulada, al S.O. de Cerdeña. El "Trieste", "Trento" y "Bolzano" con su escolta a tres millas del primer grupo a 270º y el tercer grupo los dos acorazados y resto de destructores a doce millas del "Pola" a 75º, con clara desventaja con respecto a los acorazados británicos -320mm contra los 381mm de éstos-Los italianos también carecían de coordinación aérea. Ya ha quedado mencionada la ventaja de calibres de los cruceros italianos, también complementada por su mayor rango de fuego: 30 Km contra 24Km de los italianos.

A las 12.22 el "Fiume" abre fuego, uniéndose el segundo escuadrón, mientras se acerca la vanguardia británica. El "Pola" y el "Fiume" concentran el fuego en el "Berwick", mientras el "Manchester", "Sheffield"
y "Newcastle" contratacan a los cruceros italianos. A las 12.24 horas el "Renown" se horquilla al "Trento", peró éste logra escaparse tendiendo una densa cortina de homo. El "Berwick" sufre un impacto de 203mm del "Fiume" y pierde la torre Y. A las 12.35 horas sufre otro igual del "Pola". La artillería principal del "Ramillies" llega a la zona y se esparce entre los cruceros italianos, peró estos se han puesto ya fuera de su alcance. A las 12,30 Iachino recibe órdenes de romper el contacto con el enemigo. Hay que suponer por el fallo de la cobertura aérea programada desde tierra. En plena retirada y persecución el "Manchester " impacta un cañonazo al destructor "Lanciere", que tiene que ser remolcado por otro destructor. La orden de retirada terminó, por supuesto, con la ligera ventaja italiana, El "Renown" intenta el ataque a los cruceros italianos, pero el "Vittorio Veneto" responde enviándole siete salvas con diecinueve obuses de 381mm, por lo que se retira al estar prácticamente orquillado desde 29 km de distancia.

Y se acabó la contienda. Buque a buque cabe atribuir la victoria a los italianos, si bien los ingleses consiguieron que todos los suministros llegaran a Malta y éste era su objetivo principal. Por el desempeño del combate, en general, y sobre todo por la pérdida de los aviones que lanzó al límite de su autonomía de vuelo, fué amonestado Somerville. Los italianos siguienton con su eterno problema de cobertura aérea, aunque esta acabó llegando al combate del Cabo Teulada, peró cuando ya había acabado éste, y sin el menor éxito en su ataque.