Aunque cuando se habla de ‘pecios’ todos pensamos en barcos hundidos, lo cierto es que, al menos entre los que practicamos el buceo, se acepta la inclusión en este concepto de aeronaves hundidas.

Esta es la historia de uno de estos pecios, el B-26 Marauder, un bombardero del cual se construyeron varios cientos durante la Segunda Guerra Mundial, y los restos de uno de ellos, reposan muy cerca de la costa de la comarca catalana del Maresme, a la altura de Mataró.

Cuentan las crónicas que el 29 de marzo de 1944 (hoy se cumplen 70 años), uno de estos aparatos, con bandera de la RAF y con tripulación australiana, recorría la costa noreste española en busca de barcos alemanes que transportasen tungsteno desde España a algún puerto de su dominio. Al parecer, el bombardero tenía su base en un lugar llamado Ghisonaccia, en la isla de Córcega.

Según testigos presenciales, sobre las 11:00 de la mañana del indicado día, se pudo ver al bombardero sobrevolar a muy baja altura (unos 100 pies), siguiendo a un barco, cuando repentinamente se escuchó una explosión y el aparato cayó panza arriba en el mar, hundiéndose irremisiblemente.

Poco después, varios pescadores de la zona que habían presenciado el suceso, cogieron sus barcas y se dirigieron al lugar del hundimiento, donde encontraron cinco cadáveres flotando. Los cinco hombres fueron enterrados en el cementerio de Mataró al día siguiente.

Lo que se supo al respecto es que el avión tenía 6 tripulantes, a saber, Primer Oficial y piloto W C MACDONALD, Oficial y 2º piloto J W LEWIS, Sargento y navegador C M PEEDOM, Sargento y tirador M T WOODS, Sargento y tirador R LANHAM, y un sexto llamado F.R. LAMOND, sargento y tirador.

En definitiva, el cuerpo del malogrado sargento Lamond fue el único que quedó atrapado en el avión, y el fondo arenoso de Mataró se convirtió en su tumba. Los 5 nichos donde se enterraron a los otros cinco infortunados, pasaron a ser propiedad del ejército británico en 1947.

El caso es que el tema quedó en el olvido hasta que en junio de 1994, unos buceadores encontraron casualmente los restos del B-26 Marauder, y se volvió a hablar de ello. E incluso, en 1996, un tal Peter S Dawson, residente en Escocia, publicó un anuncio en la sección de “cartas al director” de un periódico de la zona preguntando si quedaba algún testigo de aquel acontecimiento. El Sr. Dawson era amigo de uno de los tripulantes del avión, y durante su vida nunca olvidó aquel suceso.

Los cuatro pescadores que acudieron a rescatar los cuerpos fueron Josep Pera, Jacint Castellá, Jordi Casanovas y Agustí Fábregas, y el Sr. Dawson tuvo la ocasión de conocer a los dos primeros, aún vivos en 1997, y a los hijos de los dos segundos, ya que por entonces los Sres. Casanovas y Fábregas habían fallecido.

La ubicación exacta de este pecio, se supone es sólo conocida por el reducidísimo grupo de buceadores que lo encontró casualmente en 1994, habiendo provocado el debate de si se ha de revelar o no dicha ubicación, imperando hasta el momento el criterio de que es mejor que permanezca en secreto, para evitar el expolio de los restos. Así pues, la tumba del sargento Lamond, que hoy tendría unos 90 años, seguirá gozando de la casi total tranquilidad que ha tenido durante las últimas siete décadas.

Las características del avión, según wikipedia, son las siguientes:

Tripulación: 7 personas.
Longitud: 17,75 metros.
Envergadura: 21,64 metros.
Altura: 6,55 metros.
Superficie alar: 61,13 metros cúbicos.
Peso vacío: 10.886 Kg.
Peso cargado: 16.780 Kg.
Planta motriz: 2 x motor radial Pratt & Whitney R-2800-43. Potencia: 1.412 Kw (1.894 HP; 1.920 CV) cada uno.
Hélices: dos de cuatro palas.

En cuanto al rendimiento:

Velocidad máxima operativa: 454 Km/h
Alcance en combate: 1.850 Km
Alcance en ferry: 4.587 Km.
Techo de servicio: 6.400 m.

Y por último su armamento:

Ametralladoras: 12 x BrowningM2 de 12,7 mm.
Bombas: Hasta 2.359 Kg en bombas de diverso tipo.

Saludos,

Paladium

Una magnífica historia. Gracias

Alguna foto del pecio:

Timón de cola:



Motores:

Efectivamente, esas fotografías son del B-26 Marauder caído frente a Mataró.

La luminosidad que se aprecia en ellas (sobretodo en la segunda), ha conducido a muchos a la conclusión de que el pecio está a poca profundidad, hecho que ha contribuido a incentivar su búsqueda.

Un saludo,

Paladium.

¿Como podemos estar seguros de que la luminosidad es natural y no debido a la proyección de un foco, o al retocado de contraste en la fotografía?

Compañero bemaro,

No deja de admirarme la capacidad que tiene para ilustrar las noticias. Había visto en algún foro la foto de los tripulantes, pero la de los nichos, sinceramente no.

En cuanto a la cuestión de la luminosidad de las fotos... pues ciertamente no estoy en condiciones de garantizar que todo lo que se ve es natural. No obstante, personas que han estado - o al menos eso insinúan - en el lugar donde se encuentran los restos, invitan a los interesados en buscarlo a no ir más allá de los -20 metros. Otro argumento a favor de que esos restos se encuentra esa profundidad aproximada es que en algunas fotos se aprecian unos tipos algas que, según los entendidos, no se pueden hallar a mayores profundidades (tampoco puedo valorarlo porque sólo soy capaz de reconocer algunas gorgonias, esponjas, anémonas, coral y poco más, además de la posidonia, que es bastante típica).

Yo sospecho que efectivamente no está a mayores profundidades. He buceado a menudo en la zona, y básicamente lo que hay de interés para el buceador son las denominadas "barras" (formaciones rocosas más o menos rectas, en cuyo interior moran diferentes tipos de peces, crustáceos y algunos tipos de vida vegetal como los que he citado antes), y esas barras no suelen estar a más de -30 metros. Por eso, sospecho que el hallazgo de 1994 se debió a una casualidad que se produjo cuando un reducido grupo de buceadores, buscando nuevas barras (u otras cosas de interés, pero dentro del límite del buceo recreativo), se topó con el B-26 Marauder.

En suma, en la zona no se suele bajar a mayor profundidad, salvo que se sepa a ciencia cierta que hay algo de interés, como otro pecio que se encuentra muy cerca del puerto de Premià de Mar, conocido como "La Draga", y que está a unos -34 metros. Lo he visitado un par de veces, pero no he hablado de él porque no tiene excesivo interés, y lo más destacable del mismo es la enorme cantidad de redes de pesca que están enganchadas en diferentes partes... y el tamaño de un bogavante que vive dentro (o vivía, porque según quien lo vea, no lo deja en su sitio).

Por cierto, aprovecho para indicar que también he leído algo acerca de una noticia publicada en La Vanguardia el 26 de octubre de 1937 sobre el derribo de dos trimotores del bando nacional entre Premià de Mar y Mataró, pero como sobre estos no he tenido más noticia, sospecho que si el dato es correcto, quizás no cayeron en el mar.

Un saludo,

Paladium.

Gracias por ilustrarnos tan sabiamente respecto a la profundidad.

Si efectivamente el pecio se encuentra a esas profundidades estimadas, según la carta náutica, su localización puede estar en un área respecto al puerto de Mataró con distancia máxima entre 1,80 y 2,6 millas náuticas.

Este plano tampoco lo había visto. Es excelente; gracias.

Teniendo en cuenta que los descubridores salieron de el Puerto de Balís, quizás hay más posibilidades de encontrar los restos en la parte superior de ese polígono rojo. Si yo tuviera ganas, tiempo y medios, empezaría por ahí.

En todo caso, creo que sin un detector de metales será complicado, porque ya en 1994 estaba bastante enterrado.

Un saludo,

Paladium.

No me extraña nada la tendencia a ocultar la posición de los nuevos pecios descubiertos. La razón es que el deporte del buceo se ha convertido en "turismo masificado" y en gran negocio para las empresas de submarinismo, con la consiguiente degradación del equilibrio marino, además de la tendencia al expolio desaprensivo y depredador de restos.

Como muestra, véase una reciente noticia por la cual la Generalitat ha impuesto una multa de 18000 euros, y puede llegar a los 30000, a centros de submarinismo de las Islas Medas por hacer más inmersiones de las permitidas. Y eso que permiten hasta 846 inmersiones diarias.

https://www.naciodigital.cat/noticia/667 ... lles/medes

Cierto. Ese es el motivo por el que no se ha querido revelar la posición, por miedo a que se lleven lo poco que queda, y la verdad es que no me extraña.

Sorpresa mayúscula con lo de Medas: he buceado por allí más de una vez, y si hay algún sitio donde se controlan las inmersiones, es en esta reserva. Está prohibido hasta dar de comer a los meros.

Los centros tienen designado en un "planning" las inmersiones que pueden hacer cada día (el punto de inmersión), y hay un cupo máximo de buceadores por día. Por cada inmersión se paga una tasa (sobre los 4 euros), amén del precio de la inmersión en sí misma, y se lleva un control riguroso de los buceos que se hacen. Creo que es algo así lo que al final van a hacer en Cabo de Palos.

Entiendo también que quieran aprovechar el verano, porque en temporada baja, muchos cierran porque no hay clientela, y los que no lo hacen están bajo mínimos.

Saludos,

Paladium.