Los que nunca llegaron (III)
Sebastián Caboto

Marino, cartógrafo y explorador italiano, nacido en Venecia, y al Servicio de España fue nombrado Piloto Mayor a la muerte de Juan Díaz Solís y con orden de apoyar a la expedición de Jofre de Loaysa, que partió el 24 de julio del año anterior, y llegar a las islas Molucas, zarpa inicialmente de La Coruña con tres naves y 150 hombres y posteriormente de Cádiz, el 5 de abril de 1526.

Debía seguir el mismo camino de la expedición de Magallanes y después de alcanzar la costa brasileña en Pernambuco (Recife), recala en la isla de La Plata que rebautizó como Santa Catalina perdiendo una de las naos pero encontrándose con Alejo García y otros sobrevivientes de la expedición de Solís, que habían permanecido entre los indios desde l5l6.

Estos españoles relataron a Caboto la existencia de una región en donde abundaban el oro y la plata y a la que era posible llegar remontando los ríos Paraná y Paraguay.

Deslumbrado por los relatos de Alejo García, Sebastián Caboto desistió de la misión que le había encomendado la corona española y decidió unilateralmente explorar la región del Río de la Plata.
Luego de recorrer el corto curso del Río de la Plata, ingresó en el río Paraná, fundando en sus márgenes, en la actual provincia argentina de Santa Fe y en la desembocadura del río Carcañá, el fuerte de Sancti Spíritus, primer asentamiento en territorio argentino, el 9 de junio de 1527

En plena navegación Sebastián Caboto se cruzó con otro expedicionario que llegaba desde España, Había salido meses antes que él, pero llegó más tarde)

Se trataba de Diego García, antiguo compañero de Solís y piloto de profesión, que llegaba al Río de la Plata atraído, al igual que Caboto, por las versiones sobre las riquezas que escondía la región enterandose de que Caboto no tenía la menor intención de dirigirse a las Molucas.

Atacado el fuerte Sancti Spíritus y destruido totalmente por los indígenas, y visto la imposibilidad de continuar con las exploraciones, Sebastián Caboto y Diego García decidieron regresar a España donde llegaron en agosto de 1530.

Fue procesado por su conducta respecto a sus colegas en el mando y por su falta de éxito, y condenado el 1 de Febrero de 1532 a destierro por dos años a Orán, en África.

Los que nunca llegaron (IV)
Hernando de Grijalva

No se puede estar seguro de si es acertado o no incluir la aventura de Grijalva entre las expediciones para llegar a las islas de las especias como de un posible, el cuarto, intento de vuelta hacia levante.

No obstante, en cualquier caso, es que cumpliendo una orden de Hernán Cortés parte Grijalva en las últimas semanas de 1536 desde Acapulco hacia Paita en el virreinato de Perú en relación a una petición de ayuda de Francisco Pizarro, siendo el primer viaje directo entre ambos virreinatos.

Cuando la nao “Santiago”, capitana y el patache “Trinidad”, al mando de Fernando Alvarado llegan la situación estaba controlada por lo que en abril de 1937 emprenden el regreso.

A partir de aquí todo son especulaciones, la mayoría basadas en el relato que los pocos supervivientes hicieron al entonces gobernador portugués de las Molucas, Antonio Galvao y que refleja el historiador Diego do Couto

Al parecer tras la partida se siguieron las instrucciones secretas para ambos capitanes.

Alvarado con el patache “Trinidad” regresaría con la correspondencia a Acapuloco, haciéndolo por una ruta desconocida cerca de las islas Galápagos

Grijalva, con la capitana “Santiago”, debería explorar hacia el oeste a la altura del Perú, evitando la zona de responsabilidad portuguesa.

Ante su negativa a dirigirse mas al sudoeste en dirección a las Molucas la tripulación se amotina y su contramaestre, Miguel Noble, lo asesina.

Su desgraciado viaje, además del descubrimiento de algunas islas y de atravesar todo el Pacífico desde Paita hasta la parte occidental de Nueva Guinea, donde fueron los primeros en desembarcar, fue un compendio de hechos desgraciados:

Los hombres morían de hambre sed y escorbuto, el azar les alejó de las Galápagos, no descubrieron las Hawai aunque superaron su latitud, rompiendo quizás todas las marcas de permanencia sin escalas ni avistamientos. 11.000 millas de entonces .

Diez meses después, a primeros de 1538, el navío se deshizo en aguas del extremo oriente, en la línea equinoccial, quedando unos cuantos marineros hambrientos esclavizados por los naturales de la zona y mas tarde rescatados por el gobernador de Ternate.

Cortés creyó que uno de sus capitanes más experimentados y en el que tenía gran confianza había huido hasta que, años después, se enteró de lo ocurrido cuando los informes de la expedición Villalobos llegaron a la corte.

Conclusión

20 de noviembre de 1564.
Mañana zarpará Legazpi a las islas filipinas

En todo este largo recorrido más de medio siglo ha transcurrido desde que Núñez de Balboa descubriera el mar del sur y se hizo patente la posibilidad de llegar a las prometedoras tierras del oriente, dos cosas habían sido importantes:

El control de las islas de las especias y saber volver

Muchas naves y muchos hombres, de una u otra forma, fueron empeñados en conseguirlo y los restos de unas y otros, que en gran mayoría no regresaron, allí y allá quedaron para siempre.

Pero ¿las Molucas?
En manos portuguesas

¿Y las de Poniente, San Lázaro o Filipinas?
Inexploradas en su mayor parte y geográficamente en zona de influencia portuguesa, a tenor del Tratado de Zaragoza

¿Y la vuelta?
Vaya pregunta, tras seis fracasos

En estas circunstancias la corona española no ceja en su empeño de conseguir su cuota de comercio con oriente, pero era imprescindible un bastión y encontrar el modo de volver a levante

La conquista de las islas y el regreso de Urdaneta desde poniente cambia totalmente el foco de atención con el establecimiento de la línea comercial más dilatada en el tiempo y una de las más largas de la navegación a vela, en lo que se llamaría el Galeón del Pacífico, el Galeón de Acapulco, el Galeón de Manila o la Nao de la China, pero esta historia es, naturalmente, otra larga historia.

Un saludo

Antonio

Bibliografía

Difícil es relacionar la gran cantidad de páginas de donde he sacado algún dato o he comprobado otro, pero fundamentalmente el propio foro, la inevitable wiki y google maps han estado presentes.

Y además:

“Los hallazgos españoles en el Pacífico”
Amancio Landín Carrasco en la Revista Española del Pacífico

“Presencia española en el Pacífico”
Isabelo Macías Domínguez

“Los primeros contactos de los españoles con el mundo de las Molucas en las islas de las especias”
Leonard Y. Andaya

“Estudio histórico-jurídico de la expedición de García Jofre de Loaisa a las islas Molucas”
Jose María Ortuño Sánchez-Pedreño

“Estudio histórico-jurídico de la expedición de Ruy López de Villalobos”
Jose María Ortuño Sánchez-Pedreño

“Hernán Cortés y sus intereses marítimos en el Pacífico” Woodrow Borah

“El lago español” O.H.K. Spate

“Historia de Baja California” Antonio Ponce Aguilar

“El marino alavés Iñigo Ortiz de Retes” Jose Maria Gonzalez Ochoa

“La carrera por las especias” Gudrun Lenkersdorf

y alguno más.

Artículos y libros completos en PDF han pasado a mi archivo virtual y si dijera que he leido toda la bibliografía aportada, mentiría como un bellaco, pero he rastreado de forma somera todo aquello que me interesaba con las ayudas electrónicas de búsqueda.

El resto es cocina

Y una excelente cocina!!!!


Un modelo de exposición, digestión claridad y sencillez.

Todo lo contrario a una carga de caballería.

Muchas gracias.

Tal vez una carga de Caballería esté bastante bien cocinada, pero solo al principio.
Orden, sencillez y claridad pero cuando se ha iniciado el galope es como tirarse de un trampolín, ya no hay marcha atrás y no se sabe como acaba

Aunque antigua (1936) hay una buena película que lo muestra "La carga de la brigada ligera" consideraciones cinematográficas aparte.

Un saludo
Antonio

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Amigo Orfebre


Como he visto el tema ahora y es una recopilación de las diferentes expediciones a las Filipinas, de las cuales y hasta la llegada de Legazpi con Urdaneta a la toma y conquista de ellas y el feliz regreso de Urdaneta, por la ruta que durante más de 300 años se mantuvo en funcionamiento, me ha parecido más correcto el traer el tema a este nuevo asentamiento, para que sea más fácil su localización, que no mezclado con las biografías.


Si no estuvieras conforme, solo tienes que decirlo y le buscamos otro sitio.


Y muchas gracias por tan laborioso trabajo.


Un abrazo.
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Me parece muy bien.

El administrador del foro es quien lo organiza y con esa tranquilidad nos quedamos cuando hacemos un vuelco los demás y no tenemos seguridad en donde colocarlo.

Si no es el sitio más conveniente, pues le busca acomodo o crea uno nuevo.

Que el sistema es bueno y que está organizado con lógica no creo que tenga mucha discusión

Un abrazo
Antonio