Navegar en el mar es algo tan inestable como las propias olas. Los barcos, indistintamente de su tamaño, belleza o capacidad técnica, todos tienen indefectiblemente su cruz: suelen hundirse. Y cuando se hunden, se ponen en peligro vidas humanas y se resiente la economía.

Pero hay algo que sobrenada en la desgracia: el heroísmo de tripulantes y socorristas.

Este vídeo es el del salvamento de un pesquero en la costa de Portsmouth , que hacía agua y cuyo motor se paró. El socorrista, después de rescatar a dos pescadores, se quedó en el pesquero y tuvo que saltar al mar segundos antes de que la nave se hundiera.

https://www.rnlivideolibrary.org.uk/getv ... d=389hhvxe

Apreciado amigo Bemaro, impresionante documental de un salvamento de personas por miembros de Salvamento Marítimo de la" Pérfida Albión", ellos como los bomberos, policías, G.C. y demás personal dedicados a estos menesteres son los auténticos héroes , su única satisfacción el deber cumplido por el salvamento de vidas humanas, ya que la paga que por ello cobran, no va en consonancia de los riesgos.


Me alegra enormemente saber que se salvo el rescatador de ese pesquero, que deduzco se hundió por una vía de agua, a mi parecer por entrada por la bocina.


Un abrazo

Menuda sangre fría!, lo curioso es que nadie parece tener miedo...debe ser la famosa "flema inglesa"

Un cordial saludo.

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Amigo bemaro


Gracias por traer el vídeo aquí.


Como siempre, quien se la juega y a veces a cara o cruz, ese no sale en la prensa y si lo hace, es porque hay un funeral.


Los grandes sueldos para los de siempre, para los demás a veces ni medios para hacer su trabajo algo más seguro. Es el cuento de nunca acabar.


Un abrazo.
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Es abrumador ver el vídeo, tan abrumador como la misma mar.

Hay algo muy importante cuando hablamos de los hombres que hacen de ella su vida hasta no poder prescindir de la misma, y esto se debe a que ha forjado su personalidad como no lo hace otro elemento.

A veces, en situaciones como esta y otras parecidas, viendo como arriesgan su vida por la de los demás da la sensación de que son irresponsables ante ese elemento, pero no, es todo lo contrario, es que la mar les hace pensar, les vuelve prácticos y por ello esta gente son esenciales para ese tipo de trabajo, porque están hechos de otra pasta.

(Quizá es el amor que siento por ella y a la vez saber que me tiene atrapada)

Un saludo

Amigo Sotacomitre, el asunto de las vías de agua es un tema apasionante desde el punto de vista de la seguridad, tanto la preventiva como la de prácticas de emergencia para el taponado.

La vía de agua a través de la bocina de la hélice, la mecha de timón y otros orificios practicados estructuralmente bajo la línea de flotación, son temibles. Sin embargo, debido a que están determinados en el proyecto de construcción del barco, para la función que han de realizar, pienso que sería muy fácil para el proyectista establecer un mecanismo de seguridad específico para cada caso, a fin de taponar de una manera mecánica y altamente factible, la vía de agua originada por la rotura de los elementos o fallo de sus estanqueidades.

Las vías de agua que pueden producirse aleatoriamente en el casco, si necesitan de medios de taponamiento improvisados, en función del tamaño y la forma, de la sección de rotura.

Aunque ya hay algo al respecto en "De quilla a perilla", no estaría demás profundizar un poco en este tema.

Más vale un buen taponado, que confiarlo todo a las bombas de achique.

En este salvamento se dio la coincidencia de que el bote o los botes salvavidas se encontraron en la ruta del pesquero cuando venían de un entrenamiento rutinario y oyeron por radio la llamada de auxilio.

Mientras uno de los botes transportaba a los pescadores a tierra, otro recogía al socorrista, permaneciendo en el sitio hasta fijar una boya que indicara donde se encontraban los restos del barco naufragado.

El salvamento es siempre loable, porque incluso tiene riesgos infinitamente mayores que este. Es en efecto, la nobleza de los hombres de la mar.