Fecha actual 28 Abr 2024 01:40




Responder al tema  [ 8 mensajes ] 
 Combate naval de Palermo VI / 02 /1676 
Autor Mensaje
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje Combate naval de Palermo VI / 02 /1676
'

Combate naval de Palermo VI / 02 /1676


Este combate, como indica su nombre, ocurrió en las aguas cercanas al propio puerto y ciudad que le da su nombre.


Después de ocurrido el combate naval de Agosta, en que las fuerzas enfrentadas quedaron las dos muy maltrechas e indecisa la suerte de él, los aliados se habían dirigido a Siracusa a reparar sus naves y por el fallecimiento de De Ruyte, se quedó como jefe de ella el vicealmirante Jan de Haen.


Como segundo de él, se quedó el español don Diego de Ibarra, que había arribado a este puerto, al mando de la escuadra de galeras de Nápoles, quién a su vez se hizo cargo del mando de los galeones españoles, quienes acordaron al reparar lo necesario, el dirigirse al puerto de Palermo, para terminar de alistar los buques, ya que éste era el más seguro para repeler un ataque de los franceses.


Mientras tanto, los franceses que se habían quedado dueños de las aguas del estrecho de Messina, no perdieron el tiempo y aprovisionaron a este puerto, y su población.


La escuadra francesa estaba al mando del duque de Vivonne, por lo que sospechando que los aliados no estarían en muy buenas condiciones, se dirigió al terminar de desembarcar los pertrechos en Messina, poniendo rumbo al de Palermo.


En este tiempo, había conseguido reunir a todos los buques franceses disponibles en el Mediterráneo, así reforzado y bien pertrechado, el día veintitrés de mayo se hizo a la mar, decidido a tomar la iniciativa e intentar el coger desprevenidos a los aliados.


Como siempre y que tampoco es cosa nueva, los servicios de información funcionaron, por lo que casi enseguida, los aliados fueron informados de que la escuadra francesa había zarpado, con rumbo a Palermo.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 19:52
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

Al llegar la noticia, surgieron dudas en el planteamiento de enfrentarse a los franceses, pues los españoles, sabedores de su inferioridad numérica, propusieron el mantenerse en el puerto, ya que éste estaba perfectamente protegido por la fortaleza de Castellamare, mientras que por la otra parte, había una gran escollera y ésta artillada, por lo que no quedaban huecos por donde pasar sin sufrir el castigo de la artillería.


En cambio Jan de Haen, era de la opinión de que los navíos y galeones salieran del puerto, y con la típica formación de línea, se acoderaran formando un semicírculo, pero como éstos aportaban mas buques los españoles tuvieron que ceder.


Por lo que se decidió la salida, así la vanguardia estaba compuesta por navíos holandeses, el centro por los españoles y la retaguardia, también por los holandeses, siendo el numero de éstos de diecisiete por diez de los españoles.


Mientras que para cerrar los huecos, se colocaron las galeras de las escuadras de España y Nápoles, que en número de diecinueve formaron una segunda línea, estando al mando del marqués de Bayona, para completar esta línea, se añadieron cuatro fragatas holandesas y tres brulotes detrás de ellas.


Montando entre todos los buques, un total de 1.450 cañones, de los que correspondían a los holandeses 852.


Ya estando fuera del puerto y en la formación descrita, aparecieron por el horizonte las velas de la escuadra francesa, que consiguió alcanzar las proximidades de la aliada el día uno de junio.


La escuadra la formaban, un total de veintinueve navíos, los cuales llevaban 1.772 cañones, ya que habían algunos de tres baterías, a lo que se añadían, veinticinco galeras y nueve brulotes.


Formada a su vez, en el típico despliegue de vanguardia, al mando de Duquesne, en el centro el propio Vivonne, con su navío insignia Sceptre, del porte de 80 cañones, y la retaguardia al mando de Gabaret.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 19:54
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

Al alcanzar la escuadra francesa una distancia adecuada y ver el dispositivo de la aliada, se frenó en principio, para estudiar la forma de penetrar o romper aquella muralla de madera, además de que el viento al soplar de tierra, no les permitía el atacar a todo trapo, por lo que decidieron permanecer a esa distancia, pero sin perderlos de vista.


El dispositivo adoptado, al estar en semicírculo, comenzaba bajo el amparo de la artillería del fuerte de Castellamare, que así se convertía en el punto fuerte, pero se alargaba hasta casi el final del muelle, lo que por apoyo de la artillería fija en aquél lugar, lo volvía a fortalecer, pero en cambio el centro, en el que otra vez estaban los galeones españoles, se convertía en el punto débil de aquella formación.


Por ello Vivonne, dispuso que Duquesne, con nueve navíos, cinco brulotes y siete galeras, atacara a esta última posición defensiva, pues le resultaría relativamente fácil el romper la formación.


Mientras el que propio Vivonne, se colocaría a forma de segunda línea detrás de Duquesne, con lo que aún sería más probable la rotura, ya que los galeones españoles, por mucho que se empeñaran en el combate, no podrían soportar durante mucho tiempo el empuje de tanto buque francés.


Quedando a retaguardia Gabaret, que con sus buques a distancia suficiente de la artillería de la fortaleza de Castellamare, se limitaría a abrir fuego a distancia, para que esa parte de la escuadra aliada, no pudiera acudir en refuerzo del centro.


Ya dispuesto el dispositivo de ataque se levanto viento del nordeste, lo que facilitó el movimiento de los navíos galos, pero Duquesne, se dejó llevar por el viento para acercarse lo antes posible, lo que le llevó a atacar a menos de doscientos metros, el principio de la línea holandesa, que esta acoderada al muelle.


Pero fue tan rápido y contundente su ataque, que el propio humo de sus disparos, se les vino encima a los bátavos, lo que los dejó sin visibilidad, circunstancia que aprovecharon los franceses para soltar y que el viento empujara, a sus brulotes sobre ellos.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 19:56
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

A pesar de esto los tres primero brulotes, no dieron en ningún buque, pues los holandeses para evitarlos, cortaron los cables que le unían, pudiendo maniobrar para evitarlos, pero con esta acción rompieron la unión de sus buques, lo que al tener el viento en contra, los fue arrojando sobre la escollera del muelle y con ellos arrastraron a varios de los galeones españoles, que así se vieron fuera de combate, pues fueron a parar a lo largo de las rocas.


Aprovechando esta confusión, Vivonnne se lanzó sobre el centro español, lanzando al mismo tiempo los brulotes por delante de él, a pesar de esto, se consiguió el hundir a dos de los brulotes, pero los que les seguían si que dieron de lleno con la línea de los galeones, lo que aumento de forma extraordinaria la confusión ya en toda la línea y casi la dejó fuera de combate, al no poder presentar bandas para ofender a la escuadra francesa.


Al producirse este apelotonamiento de buques, sin poder ni siquiera disparar, para no dañar a los compañeros, fue aprovechado por La Brossardière, que al mando de dieciocho galeras, se coló por el centro de la línea ya roto, lo que le llevó a posicionarse a las popas de los españoles, a quienes bombardeaban, sin que estos pudieran responder al fuego, además de taponar así la posible retirada de ellos a su puerto de partida. (Del que como se verá, no debieron salir nunca, pero las cosas son, como son).


Los brulotes lanzados contra los españoles, fueron a dar de pleno, uno contra el galeón insignia, el soberbio Nuestra Señora del Pilar, que montaba 64 cañones, por lo que inmediatamente se propagó el fuego a todo el buque.


A pesar de ello y de la confusión, la galera capitana del marqués de Bayona, a la que seguían varias de las suyas, se introdujeron en aquel bosque de palos, despreciando todo los peligros e intentaron el sacar al galeón incendiado, pero dado el volumen de fuego y a pesar de sus esfuerzos, les resultó vano el arriesgar sus vidas y buques.


Del cual tuvieron que desistir, al apercibirse que muy pronto el voraz incendio alcanzaría la santa bárbara del galeón, lo que inevitablemente significaría su voladura y con ella el poder salir dañados o hundidos varios buques más, por esta razón abandonaron su intento.


El propio don Diego de Ibarra, una bala enemiga le había arrancado una pierna, por lo que al ver que su buque ya no tenía salvación dio la orden de abandonar, pero ésta no llegó con suficiente tiempo, pues el galeón saltó materialmente por lo aires a los pocos minutos.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 19:59
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

De la tremenda explosión, él mismo fue lanzado al agua donde pereció, pues no pudo mantenerse a flote, por la falta del miembro, además de que la hemorragia seria casi total al sumergirse en el líquido elemento, pero con él murieron otros setecientos cuarenta hombres, de la dotación del galeón.


Al desparramarse los restos del galeón por todas partes, surgieron nuevos incendios en los galeones que estaban en sus cercanías, pero el que más cercano se encontraba que era el San Felipe, del porte de 44 cañones, tuvo el mismo final que el de su buque insignia, pues a pesar de los intentos de la tripulación por apagar los diversos incendios, estos prendieron rápidamente y no hubo solución.


Mientras tanto, el otro brulote había dado de pleno en el galeón San Antonio, del porte de 46 cañones, por lo que a pesar de los denodados esfuerzos de su dotación, también salto por los aires, pero sus restos fueron a alcanzar de lleno a los dos mas cercanos, el San Salvador, del porte de 40 cañones y el San Carlos (no se citan lo cañones).


Pero aquí no quedó el desastre, pues también fueron alcanzadas dos de la galeras, que siempre demostrando su gran valor, estaban tratando de alejar al San Antonio, por lo que les cogió de tal forma la explosión y sus desperdigados trozos en llamas, que quedaron prácticamente envueltas en fuego.


Así de esta forma, se perdieron los cinco galeones y la dos galeras, que fueron consumidas totalmente por el fuego.


Mientras esto sucedía en el centro, los daños causado en los extremos de la inexistente línea, habían sido muy fuertes, pues los franceses atacaron con todas sus fuerzas.


Entre los fallecidos, por la intensidad el ataque galo, había sido el propio comandante en jefe de la escuadra aliada, el vicealmirante Jan de Haen, al cual un proyectil le había deshecho la cabeza.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 20:02
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

(Al parecer el destino de este almirante, era ese, pues no demostró tener mucha al forzar a la escuadra a salir a combatir a una muy superior, pero él mismo en esta ocasión sufrió en primera persona su propio error).


Por lo que se hizo cargo del mando, al no estar ya el segundo don Diego de Ibarra, el contralmirante holandés Middellandt, cuyo navío, el Steenberg, del porte de 68 cañones, también había resultado incendiado por otro de los brulotes, lo que le convirtió en un hoguera flotante sin control.


Pero a parte de éste, se encontraban en la misma situación el Vrijheid, del porte de 50 cañones y el Leyden, de 36, por lo que ya estos se daban como pérdida total.


Al mismo tiempo, se encontraban un grupo de cuatro navíos holandeses, que se mantenían firmes, defendiéndose de todos los franceses, que ya sin oposición se iban incorporando al combate, siendo uno de ellos, el anterior buque insignia de De Ruyte, el tres baterías y 84 cañones Eendracht, pues a los franceses ya no les quedaban más brulotes y mantenían, pertinazmente sus fuegos para conseguir el rendirlos o hundirlos.


Pero de nuevo hicieron presencia las abnegadas galeras españolas, pues viendo que los buques amigos ya se encontraban mochos, e impedido de cualquier maniobra, se volvieron a meter en el centro del combate, consiguiendo no sin esfuerzos, valor y algo de temeridad el remolcarlos, hasta dejarlos detrás de la escollera y bajo el fuego de las piezas que la protegían.


De esta forma, fueron remolcando a los buques que pudieron, para ir dejándolos así protegidos, salvándose unos cuantos de una pérdida total, y salvar así algo del desastre producido, por la incompetencia de un vicealmirante.


Que quedó más que demostrada, ya que al ir resguardando a los buques que se pudo, detrás de la escollera, los galos ya no se atrevieron a seguirles.


Por lo que, si desde el principio se hubiera actuado así, nada o casi nada hubiera ocurrido, pero a veces la valentía de alguno, pone en peligro a muchos más y así sucedió el tamaño desastre de este combate.
.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 20:04
Perfil Email WWW
Intendente General
Intendente General

Registrado: 26 Jul 2006 18:05
Mensajes: 33285
Ubicación: A la vista del Mar Mediterráneo. De guardia en el Alcázar y vigilando la escala Real.
Nuevo mensaje 
'

Por lo que las pérdidas sufridas por lo aliados, fueron al menos de siete buques, dos holandeses y los cinco galeones españoles, más las dos galeras, también españolas.


Las perdidas humanas fueron muy cuantiosas, pues seguras, fueron entre los mil doscientos y los mil quinientos hombres, mas otros quinientos heridos, solo por parte de los españoles.


Y atendiendo a las cifras dadas en total por los franceses, entre los tres mil y los cinco mil. (Lo que las hace con gran amplitud de miras, ya que no son tan centradas como las dadas de españoles y sabiendo que los holandeses no perdieron tantos buques, pues es difícil el pensar, que fueran tan elevadas como dicen las fuentes galas, aunque la primera cifra en total es muy posible).


Lo que si es incontestable, es que fueron muchos los jefes con distinto cargo que perdieron la vida, pues los dos jefes de las escuadras, tanto la holandesa como la española, perdieron la vida, lo que deja a las claras, que no precisamente se mantuvieron alejados del fuego.


Como contrapartida, los franceses no sufrieron casi pérdidas, ni humanas ni materiales, por lo que su triunfo fue total.


A parte de tener más clarividencia de la situación y actuar en consecuencia, pues esperaron a tener el viento favorable para poder lanzar sus brulotes, siempre mantuvieron una visión de por donde y a quién, debían de atacar y con que fuerza, para así conseguir la victoria.


Todo lo contrario del almirante holandés, que no se sabe muy bien del porque de esa decisión, a no ser por orgullo personal y querer emular a su anterior jefe, para sí intentar demostrar que se había perdido a uno, pero había nacido otro, pero como también perdió la vida, pues nada más que decir de él, solo pensar que se equivocó, como nos suele ocurrir a todos.




Citar:
Bibliografía:

Enciclopedia General del Mar. Garriga, 1957. Compilada por Ángel Dotor.

Fernández Duro, Cesáreo. La Armada Española, desde la unión de los reinos de Castilla y Aragón. Museo Naval. Madrid. 1973.

Compilada por Antonio Luis José Martínez y Guanter.

.

_________________
Si ignoras lo que pasó antes de que nacieras, siempre serás un niño. Marco Tulio Cicerón.


Hay criterios cerrados, de ásperas molleras, con los cuales es inútil argumentar. Miguel de Cervantes Saavedra.


Cuando soplan vientos de cambio, unos construyen muros, otros, molinos.

Sorpresa y Concentración.


Imagen


22 Ene 2008 20:06
Perfil Email WWW
Grumete
Grumete
Nuevo mensaje Re: Combate naval de Palermo VI / 02 /1676
Un tripulante preguntaba si existía alguna reproducción o cuadro de esta batalla, y aunque en formato bastante pequeño, si que los hay.
De aquella campaña en el Mediterráneo de 1676 podemos encontrar imágenes de la batalla de Agosta, incluso un plano de esta; un retrato de Mateo de Laya y Cabex, capitán del navío "Nuestra Señora del Rosario", el único buque español que participó en las tres batallas junto a los holandeses (Stromboli, Agosta y Palermo) y hasta una reproducción del "Eendracht", navío insignia holandés, en el puerto de Nápoles, 1676, por el maestro Willem van de Velde "El viejo", antes de regresar a Holanda tras la debacle de Palermo. Pero de la batalla de dicha ciudad, hoy capital de Sicilia, hay muy pocas imágenes, aqui dejo tres de ellas.

Imagen

Imagen

Imagen
Esta última es del escultor y pintor francés Pierre Puget.

Espero os sea de alguna ayuda.
Un saludo.


06 Feb 2009 15:59
Mostrar mensajes previos:  Ordenar por  
Responder al tema   [ 8 mensajes ] 

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 7 invitados


No puede abrir nuevos temas en este Foro
No puede responder a temas en este Foro
No puede editar sus mensajes en este Foro
No puede borrar sus mensajes en este Foro
No puede enviar adjuntos en este Foro

Saltar a:  
Powered by phpBB © 2000, 2002, 2005, 2007 phpBB Group.
Designed by STSoftware for PTF.
Licencia de Creative Commons
foro.todoavante.es by Todoavante is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 3.0 Unported License.
Based on a work at foro.todoavante.es.
Permissions beyond the scope of this license may be available at creativecommons.org.

Traducción al español por Huan Manwë para phpbb-es.com