Nació José en Madrid, el 19 de Diciembre de 1758 y era hijo de D. Juan Manuel del Río Haedo, Contador Mayor de Tabacos, y de Doña Tomasa de la Cosa y Llatazo, siendo nieto por la línea paterno de D. Pedro del Río Casuso, Procurador Sindico General y Regidor de Santoña, y Doña Josefa de Haedo, y por la materna del Capitán de Fragata D. Pablo de la Cosa Camino y de Doña María Llatazo y Gijón.

Comenzó a servir en la Real Armada el 25 de Enero de 1777, día en el que sentó plaza de Guardia Marina en la Compañía del Departamento de Cádiz.

Una vez que hubo concluido sus estudios en la Academia y con elogiable aprovechamiento, embarcó el 14 de Junio de 1779 en el, navío San Genaro, un dos puentes y 74 cañones del mando del Capitán D. Félix de Tejada, en el que el que se halló en el bloqueo realizado a Gibraltar y con el que se redujeron a varios buques británicos, permaneciendo en ese destino hasta el 28 de Agosto siguiente, que regresó por vía terrestre a Cádiz, donde una vez allí embarcó en la urca Santa Polonia, de 16 cañones y que mandaba D. Nicolás de Rojas, en la que prestó durante un mes el servicio de reconocimiento de las embarcaciones que entraban en la bahía. En el interín había sido promocionado al empleo de Alférez de Fragata, el tres de Julio.

Del 14 de Julio al 5 de Noviembre de 1780, estuvo haciendo el corso embarcado en el navío San Vicente, con Don Francisco Gil de Lemos como Comandante, y en la fragata Rufina del mando de Don Pedro Cañaveral.

El 5 de Noviembre siguiente, embarcado en la fragata Gertrudis, de 30 cañones y al mando de Don Aníbal Casoni, pasó el bloqueo de Gibraltar y en ella hizo cruceros por el Estrecho y fue comisionado para sacar una presa que embarrancó en la costa de Marruecos, donde sufrió bastante fuego y le mataron a dos hombres que se hallaban junto a el.

El 3 de Enero del año siguiente fue trasbordado al navío San Isidro, un dos puentes y 74 cañones al mando del Comandante Don Alvaro López de Carrizosa, formando parte de la escuadra del Teniente General Don Luis de Córdova, permaneciendo en labores de corso por el Océano hasta el 25 de Marzo de 1782, fecha en la que pasó al navío Purísima Concepción, tres puentes y 120 cañones, insignia del Jefe de Escuadra y al mando de Don Antonio Osorno y Funes y se halló en el socorro de las baterías flotantes durante el asedio a Gibraltar el 13 de Septiembre de 1782 y en el combate naval de Cabo Espartel el siguiente 20 de Octubre.

El siguiente 18 de Abril de 1783 pasó al navío San Joaquín, un dos puentes y 74 cañones al mando de D. Francisco Javier Muñoz, en el cual recibió su empleo de Alférez de Navío e hizo viaje a las Islas Canarias y desembarcó el 25 de Agosto siguiente para servir su empleo en los batallones de Marina como Oficial propietario de ellos, pues había sido nombrado Teniente de la quinta Compañía del tercer Batallón desde el anterior 19 de Abril.

El 7 de Junio de 1788 fue promocionado al empleo de Teniente de Fragata y en Octubre de ese mismo año fue nombrado segundo Capitán de la 2ª Compañía del 12º Batallón.

En Cádiz, el 8 de Marzo de 1790 fue destinado al navío Salvador del Mundo, un tres puentes y 120 cañones al mando del Brigadier Don Jacinto Serrano y con el cual se unió a la escuadra del Teniente General marqués del Socorro, cuya insignia arbolaba, con motivo de los incidentes de Nutka, hizo la campaña a Ferrol y el corso sobre las costas del Océano hasta Mogador, entrando en Cádiz el siguiente mes de Septiembre, y al ser desarmada la escuadra quedó desembarcado el 14 de Junio del año siguiente.

El 12 de Agosto siguiente fue destinado al navío San Felipe, su Comandante
Don Enrique Mac Doneil, en el cual pasó a Ferrol y en cuyo departamento trasbordó el 19 de Diciembre siguiente a la fragata Santa Catalina del mando de D. Diego Choquet de Isla, con la que salió para la costa de Marruecos a desempeñar una comisión de Estado en la rada de Safi.

Tras desembarcar los efectos que conducían, experimentaron en aquel surgidero los mayores contratiempo durante los dos meses que permanecieran allí, habiendo sido comisionado como segundo comandante que era de la fragata y oficial de toda confianza para parlamentar con aquellos moros, para desembarcar los regalos que conducían para el emperador y demás asuntos que se ofrecieron.

Desempeñada esta comisión en el rigor del invierno y en una costa tan peligrosa, mereció la aprobación de S. M., y de su orden recomendaron los ministros de Estado conde de Floridablanca y conde de Aranda al de Marina que fueran premiados por el mérito distinguido que habían contraído tanto el comandante como los oficiales de la fragata de esa fragata, resolución que les fue comunicada por el Coronel General de Marruecos, Don Juan Antonio González, pero al final solo fue premiado el Comandante, que le fue concedido el grado de Brigadier. A su vuelta a Cádiz, el 3 de Abril del 92, quedó desembarcado.

Siendo Teniente de Navío desde el 12 de Abril de 1793, el siguiente día 22 embarcó en el navío San Fermín, un dos puentes y 74 cañones al mando de Don Manuel de Ezquerra e incorporado a la escuadra del Teniente General Don Juan de Lángara pasó al Mediterráneo, cruzó sobre el cabo de Creus y entró en Tolón, hallándose en la defensa de aquella plaza francesa hasta su total evacuación.

El 26 de Marzo de 1794 trasbordó al navío San Juan Nepomuceno, al mando del Brigadier Don José de Escaño, con el cual zarpa el primero de Abril del 94 de Cartagena para traer de Liorna al Infante Don Luis de Borbón, heredero al trono de Parma y que venía a España para contraer matrimonio con la infanta Doña María Luisa. Después, el 11 de Julio y ahora al mando del Capitán Don Martín García Serón de Aragón, zarpa el barco junto con la escuadra de Cartagena fondeando en el golfo de Rosas el siguiente día 22, con tropas y municiones para aquella plaza, partiendo la escuadra el siguiente día 27, cruzando por Tolón, la isla Santa Margarita y otros puertos con el objetivo de mantener bloqueados en sus puertos a las escuadras republicanas francesas, hecho lo cual volvió a Cádiz el 18 de Septiembre.

Trasbordado el 7 de Octubre de 1794 al navío Mejicano su comandante don José
Pascual de Bonanza pasó el Océano con la escuadra del Teniente General Don Juan de Lángara, y embarcado el 6 de Diciembre siguiente en el Oriente del mando de D. Pedro Ristori, volvió con la misma escuadra al Mediterráneo, con la que hizo varios cruceros y comisiones los años 95 y 96, así como en la fragata Mercedes con Don Salvador Medina, en la Casilda con Don Ramón de Herrera y en el navío San Isidro, con don Teodoro Argomosa.

Estando en Cartagena el 25 de Enero de 1797, embarcó en el navío Atlante, un dos puentes de 74 cañones al mando de Don Gonzalo Vallejo, dando vela el primero de Febrero con la escuadra del Teniente General D. José de Córdova para Cádiz y hallándose el 14 de dicho mes en el combate que en aguas del cabo de San Vicente sostuvo con la inglesa del almirante Jervis, fondeando en aquella bahía el 3 de Marzo para desembarcar el 30 de Septiembre siguiente. Tuvo el barco ocho muertos y veinte heridos y por su deficiente actuación fue su Capitán degradado e inhabilitado mediante un Consejo de Guerra.

A principios del año de 1798 pasó al armamento del navío San Ildefonso, al mando de Don José de Uriarte y Borja, pasando a formar parte de su dotación el 24 de Marzo y con la que salió de Balandras. Dio la vela para Veracruz en conserva con otros buques y en aquel puerto transbordó el 6 de Marzo de 1799 para mandar una de las lanchas cañoneras que defendían el puerto. Pasó después al río Alvarado mandando las dos lanchas y el primero de Noviembre siguiente se encargó del mando de la corbeta Ardilla, 15 cañones, con la que desempeñó la vigilancia de los cruceros ingleses, en el seno Mejicano y realizando comisiones del mayor cuidado e importancia, como por ejemplo la conducción de caudales a Nueva Orleans y Campeche.

El primero de Octubre de 1800 embarcó en Veracruz en la fragata Juno, que mandaba
Don Ignacio Bustillos, en la que se transportó a la Habana, donde transbordó al navío Argonauta, un dos puentes y 80 cañnes que estaba al mando del Comandante Salcedo, el 5 de Enero de 1802 para regresar á España cargado de caudales, quedando José desembarcado en Cádiz el 12 de Abril siguiente, momento en el cual dieron por terminados sus servicios navales, pues en adelante todos los destinos y comisiones que desempeñó, aunque de la mayor importancia, fueron en Comandancias de Marina y en el Ejército.

Hay que hacer notar que los periodos de tiempo que estuvo desembarcado desde que salió a navegar por primera vez hasta el año de 1802, estuvo sirviendo en los Batallones de Marina y en los Arsenales de los tres departamentos. Así mismo, fue Ayudante del Subinspector de pertrechos en Ferrol, del Comandante de Ingenieros del arsenal de la Carraca y de la Mayoría General del departamento de Ferrol.

Al establecerse los tercios navales fue destinado por el Capitán General del Departamento de Ferrol en Septiembre de 1803 como Ayudante Temporal a la provincia de Pontevedra, en la que quedó de segundo Comandante y el 5 de Septiembre de 1801 fue nombrado segundo Comandante de la provincia de Villagarcía.

El 26 de Octubre de 1806 y con el mismo cometido al Tercio Naval de Vigo, teniendo a su cargo el mando interinamente por espacio de un año y cuatro meses, prestando excelentes servicios, como los realizados en el armamento de marinería, operaciones de defensa de la ciudad de Vigo y en los ataques del Puente de San Payo, hasta que el 16 de Octubre de 1809 lo entregó al Capitán de Navío Don Pedro Calvillo.

El 23 de Febrero de 1809 fue ascendido a Capitán de Fragata.

El 6 de Enero de 1810 se presentó en Ferrol y en Abril pasó a Cádiz gracias a una Real Licencia, tras la cual, el 12 de Mayo, fue nombrado por la Regencia del Reino vocal del
Consejo de Guerra que se había formado en aquel Departamento para juzgar los delitos de imprudencia y otros con motivo del sitio sufrido por la isla gaditana y en cuyo cargo cesó el 30 de Noviembre siguiente para pasar a Ferrol en el navío Herva, puerto al que llegó el 6 de Enero de 1811, siendo destinado acto seguido como segundo Comandante militar de aquel tercio naval, cuyo destino desempeñó hasta el 6 de Marzo de 1812, que fue nombrado por la Regencia del Reino Mayor General de Marina del 7° Ejército para después y con el mismo empleo, pasar al 4º de Operaciones, en los que cesó el 4 de Abril de 1814, que entregó la Mayoría General, Apostadero y Gobierno Militar que estaba desempeñando en Pasajes, al Capitán de Navío Don Manuel Díaz Herrera, volviendo a Ferrol, donde se presentó el 18 de Mayo de ese año.

Tras ser ascendido el 29 de Mayo de 1815 a Capitán de Navío, el siguiente día15 de Junio fue a Madrid a pasar unos días gracias a una Real Licencia, volviendo luego a Ferrol en Noviembre, para empezar a ejercer las funciones de Secretario del Consejo de Guerra que se estableció en dicha plaza y creado para la pacificación de los oficiales que se hallaren en país ocupado por los enemigos durante la última campaña y los que estuvieron prisioneros en Francia, tras lo cual pasó a La Coruña como habilitado del
Departamento, falleciendo en esa plaza de enfermedad natural el 5 de Noviembre de 1817, contando sesenta años de edad.

Era Caballero de la Orden Militar de Santiago desde el año de 1804 y disfrutaba de la Cruz y Placa de San Hermenegildo por los méritos contraídos en la campaña contra los franceses.

FUENTES:

- Periódico El Día de Madrid, 5-8-1909, página 3 y 6-8-1909, página 2
- Caballeros de la Orden de Santiago que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XIX, páginas 63 y 64. Segunda edición. Vicente de Cadenas y Vicent. Ediciones Hidalguía, Madrid 1993.
- www.todoavante.es