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Biografía de don Miguel Grau.



Almirante de la Armada del Perú.



Nació en el año de 1834.



El Huascar era un monitor, de dos mil toneladas, que fue construido en el Reino Unido, en el año de 1865; su armamento consistía en una torre doble del tipo Coles, con dos cañones de 230 m/m, la protección constaba de una cubierta de 50 m/m de espesor y una cintura de 120 m/m; pero como todos los monitores su franco bordo era muy bajo, pues sólo estaba a 150 m/m, lo que también le favorecía por presentar poca estructura para que hicieran blanco sus oponentes, su velocidad máxima era de once nudos y como todos los buques de su época, estaba provisto de un espléndido espolón.



En el mes de noviembre del año de 1877, ya había demostrado su valía, al conseguir escapar a la persecución de dos buques acorazados británicos, el Schab, de 6.250 toneladas y artillado con piezas de 230 y 180 m/m, y a su compañero un poco más pequeño de 1.970 toneladas, el Amethyst, los cuales pretendieron hacerle arriar la bandera, como represalia a ciertas vejaciones inflingidas a los buques mercantes británicos.



El día veintiuno de mayo del año de 1879, el Huascar, al mando de Grau, que navegaba junto a la corbeta acorazada Independencia, sorprendió frente a Iquique a los buques chilenos con casco de madera, la corbeta Esmeralda y la goleta Covadonga, (la española apresada y que provocó la guerra o campaña del Pacífico en el año de 1866) que estaban en misión de bloqueo.


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Por lo que el Huascar emprendió la persecución de la Esmeralda, la cual se vió obligada a reducir su marcha por causa de una avería en las máquinas, por lo que la logró alcanzar, embistiéndola en tres ocasiones con su espolón y evitando en cada uno de los tres momentos de acercamiento hasta el contacto, el ser abordado por lo chilenos, los cuales estaban preparados para ello.



Mientras tanto la goleta Covadonga, pudo escapar metiendose por donde su calado se lo permitía, pero no así a su perseguidora, la corbeta acorazada Independencia.



Después de hundir a la Esmeralda, el monitor Huascar, atacó en repetidas ocasiones las costas y fuertes chilenos, logrando interrumpir el tráfico marítimo enemigo.



Pero el día siete de octubre del año de 1879, estando frente a Mejillones, fue atacado por la escuadra chilena, en la que se encontraban las corbetas acorazadas Almirante Cochrane, de 3.500 toneladas y con seis cañones de 230 m/m, que junto al de igual potencia Blanco Encalada le atacaron.



Después de un desigual combate, en que un proyectil chileno abatió el mástil del monitor Huascar, en el que esta izada la bandera peruana, habiendo perecido gran parte de la tripulación, incluido el almirante Grau, el teniente Pedro Garezón, que estaba al mando por fallecimiento de todos sus superiores, ordenó el abrir las válvulas para echarlo a pique, pero en ese instante fue abordado por los chilenos, quienes apresaron al monitor y evitaron su hundimiento.



Falleció a bordo del monitor Huascar el día siete de octubre del año de 1879.








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Don Miguel Grau Seminario nació en la ciudad de Piura el 27 de julio de 1834.
A los 9 años se inicia en la vida de marino, como grumete en el buque mercante "Tescua" Durante diez años viajó por diferentes partes del mundo en barcos distintos.

Se ve envuelto en la larga sucesión de levantamientos y divisiones que van a asolar Perú desde 1843 a 1879, sin embargo supo mantener una conducta de fidelidad al poder legítimamente constituido, lo que le permitió estar por sobre esas mismas disensiones.

“Como siente la atracción del mar, obtiene en marzo de 1843 el permiso paterno para embarcarse en un bergantín dedicado al tráfico marítimo entre Paita y otros puertos del litoral peruano".

El 14 de mayo de 1854 ingresa como guardia marina a la marina de guerra del Perú. Sirve primero en el Rímac por espacio de 6 meses y luego pasa, el al pailebot Vigilante, en el que permanece más de 10 meses para ser trasladado a continuación al vapor de ruedas BAP Ucayali.


PE: Fuente revista marina, https://www.armada.cl, B Vicuña Mackenna.

En 1856 Grau recibe su primer ascenso recibiendo los despachos alférez de fragata Miguel Grau Seminario, a quien se destina al Apurímac, el mejor buque de la escuadra, que comanda el capitán de navío José María Salcedo.

En la fracasada revolución de Vivanco en 1857, al buque Apurimac le cupo destacada actuación en el bando conservador, esto trajo aparejado su separación del servicio.
En 1863 es llamado nuevamente al servicio, cumpliendo funciones a bordo del “Lerzundi”, para luego ser enviado en comisión de servicio a Europa como asesor naval en la compra de nuevas unidades para la marina del Perú. Ante los premiosos acontecimientos provocados por la presencia de la escuadra española en el Pacífico se apura la compra en Inglaterra de la fragata Independencia en 108.000 libras y de un monitor de alta mar bautizado como Huáscar en 81.300 libras. Adicionalmente se compran en Francia las corbetas Shangay y San Francisco (Unión y América), la primera de las cuales es puesta bajo el mando de don Miguel Grau, con estas dos naves logran llegar a Valparaíso recién en junio de 1865.Logra participar de esta forma en la desgraciada guerra con España en el combate de Abtao . No pudiendo enfrentarse directamente con las fuerzas hispanas, esperan la llegada de los dos acorazados hasta junio de 1865 cuando la flota enemiga ya se ha dispersado y abandonado el Pacífico.

Al regresar a su patria Grau es acusado de insubordinación, deserción y traición por negarse a servir bajo las ordenes de John R. Tucker, nombrado como el nuevo contralmirante.
Absuelto por una corte militar es llamado nuevamente al servicio esta vez como comandante del monitor Huáscar, ejerciendo el rango de capitán de fragata y luego como comandante de la escuadra peruana hasta 1876 en que es elegido diputado.

En 1877 es nombrado, durante el receso parlamentario, Comandante General de la Marina. Finalmente asume nuevamente el mando del Huáscar dado el estado de tensión que desembocará en la “Guerra del Pacífico”.

En este conflicto se escribirán las páginas más gloriosas para las marinas de Chile y Perú, conflicto durante el cual Don Miguel Grau obtendrá el título de caballero de los mares, con una actuación que llenará de orgullo a sus connacionales y también a sus enemigos en batalla.

Las diferentes concepciones asignadas a sus escuadras llevó al Perú a evitar una confrontación directa con la escuadra chilena, considerando las grandes diferencias en capacidad de desplazamiento y fuego existentes desde el inicio de la Guerra del Pacífico, acentuadas después de la pérdida de la fragata Independencia en Punta Gruesa

Supo Grau obtener el máximo poder a su nave, manteniendo a raya a una marina tres veces superior a la suya, estorbar la red de suministros, provocando con ello una crisis política en chile que estuvo a punto de derribar al presidente.

Cuando se hizo inevitable el choque de ambas escuadras en Angamos, el Huascar, comandado por su valeroso comandante, afianzó su pabellón de combate disparando los cañones de la torre sobre el Cochrane a mil metros de distancia, sin embargo los cañones de avancarda de 300' carecian de proyectiles perforantes en uso en aquella época por lo que dificilmente podrían perforar la coraza de los dos blindados chilenos. . El Almirante Blanco Encalada en esos momentos se hallaban a una distancia de seis millas con dirección al Huáscar, mientras que la O'Higgins y el Loa se dirigían a cortar el paso a la Unión. El Almirante Cochrane no contestó inicialmente los disparos, sino que acortó distancias gracias a su mayor velocidad, estando a 500 m, una andanada del Monitor golpeó la banda del acorazado chileno haciéndolo bandearse por unos instantes, pero sin mayor daño y cuando estuvo a 200 m por babor del Huáscar, hizo sus primeros disparos, perforando el blindaje del casco y dañando el sistema de gobierno.

Mientras tanto, las alzas de los cañones chilenos apuntaban hacia las partes vitales del monitor. Diez minutos después un proyectil proveniente también de Cochrane impactó en la torre de mando y al estallar hizo volar al contralmirante Miguel Grau y dejó moribundo a su acompañante teniente primero Diego Ferré. Sólo se rescató la mandíbula y un pie del destrozado cuerpo del comandante peruano. El gobierno chileno hizo enterrar el cuerpo con honores en un mausoleo de su familia en Chile, para luego repatriarlos a su país una vez concluida la guerra.

Respecto al Huascar, sufrió severos daños en su estructura, y gran parte de la tripulación pereció en el combate, al igual que los marinos de la Esmeralda hiceron un supremo sacrificio por su patria. La nave pudo ser remolacada y reparada pasando a prestar servicio a la marina chilena, la que aún lo conserva como reliquia histórica en la cual se recuerda el sacrifico de los marinos chilenos y peruanos que cayeron en su cubierta defendiendo a su patria.

A raiz de esta noticia encontrada hoy en el diario de Cadiz, donde le han dedicado un busto en la capital gaditana, me he puesto a indagar sobre este Almirante Peruano:

https://www.diariodecadiz.es/article/cad ... ruano.html

Esto es lo que he encontrado sobre el:

Don Miguel Grau Seminario nació en la ciudad de Piura el 27 de julio de 1834.
A los 9 años se inicia en la vida de marino, como grumete en el buque mercante "Tescua" Durante diez años viajó por diferentes partes del mundo en barcos distintos.

El 14 de mayo de 1854, como guardia marina inicia su carrera en la Armada Nacional, desempeñando diversos cargos hasta ocupar el comando del "Huáscar".

Se casó el 12 de abril de 1867 con la dama limeña Dolores Cabero Núñez, con quien tuvo diez hijos. Vivió en la calle Lescano 172, cuyo inmueble completamente restaurado se conoce como la Casa Grau.

Fue elegido Diputado por Paita, dejando momentáneamente el comando del Huáscar el 5 de junio de 1876.

La gloria le alcanzó en la campaña naval iniciada el 16 de mayo y concluída cinco meses después, el 8 de octubre de 1879, campaña sin parangón en los anales de la historia marítima universal.

Por Ley 23856 del 24 de mayo de 1984, el escenario de sus hazañas se denomina "Mar de Grau". Sus restos mortales yacen en la Cripta de los Héroes del Cementerio Museo Presbítero Matías Maestro y en la Escuela Naval del Perú.

EL INICIO DE LA GUERRA
Al inicio de la guerra, la Escuadra peruana estaba prácticamente desmantelada en El Callao. Las calderas de la "Independencia" estaban en tierra y el "Huáscar" se encontraba desartillado.

Si Chile se venía o no alistando para la guerra, puede resultar discutible. Hay indicios a favor y algunos argumentos en contra. En todo caso, aquel país tenía un ejército muy bien organizado y disciplinado, basado en la estructura militar prusiana y en una fuerza naval respetable, aún para estándares europeos, organizada en base a los parámetros de la marina británica.

Su escuadra -quizás la mejor de América Latina- estaba compuesta por dos enormes acorazados gemelos: El Almirante Cochrane y el Almirante Blanco Encalada. La marinería estaba bien entrenada y la flota estaba comandada por el contraalmirante Juan Williams, quién se distinguió durante la guerra contra España de 1865-66.

Bolivia no contaba con escuadra y aquel era un factor que quizás el Perú debió considerar al mantener la alianza militar con el país del altiplano, cuyos gobernantes de esa época cometieron el error de no desarrollar una marina mercante y una fuerza naval disuasiva.

La escuadra del Perú en tal sentido, salvo una excepción, no se había renovado en los últimos once años. Estaba integrada por dos blindados, dos monitores de hierro, dos corbetas de madera, dos cañoneras y algunas lanchas torpederas.

Casi todas las naves se encontraban inmovilizadas y en pleno proceso de reparación.

La escuadra chilena pues aventajaba a la peruana en cantidad, desplazamiento, blindaje, poder de artillería, modernidad y número de transportes.

EL HUÁSCAR

Sin duda la principal nave del Perú era el Huáscar, blindado de mar con espolón modelo Ericsson. Su construcción se inició a fines de 1864 en Liverpool. El blindado era tan maniobrable que podía dar un giro de 180 grados en apenas dos minutos. Para los estándares de esos tiempos, el Huáscar era una nave de guerra formidable, adquirida a un precio bastante razonable.

Pero sobre la capacidad bélica del blindado, su comandante formuló al gabinete del presidente Prado la siguiente advertencia:

"Señores, es preciso que no nos formemos ilusiones; el Huáscar es sin duda un buque muy fuerte, pero nunca podrá contrarrestar el poder de uno sólo de los blindados chilenos, pues estos tienen una coraza uniforme de nueve pulgadas y seis cañones de igual calibre que los del Huáscar (...) A pesar de todo el Huáscar cumplirá con su deber, aún cuando tenga la seguridad de su sacrificio".

IQUIQUE

El 25 de abril de 1879, veinte dias después de declarada la guerra, el Huáscar se hizo a la mar con una tripulación de 200 hombres. El blindado tuvo su primer enfrentamiento y durante los primeros treinta minutos se enfrentó solo contra los dos buques de guerra enemigos.

La Esmeralda estaba dirigida por el valiente capitán de fragata Arturo Prat y disponía de una tripulación de 200 hombres, número similar a la dotación del Huáscar. El combate entre ambas naves se prolongaría por más de tres horas.

El Huáscar limitaba el uso de su artillería por temor a que los proyectiles alcanzaran a la población de Iquique. Grau decidió terminar el encuentro recurriendo al espolón, pero los dos primeros intentos fueron vanos.

El primero de ellos impactó a babor y el segundo en el estribor de la nave adversaria, la que pese al castigo recibido no se rindió.
En esos momentos, el aguerrido capitán Prat intentó abordar el Huáscar y acompañado sólo de un sargento, se arrojó sobre el blindado, ultimó a un oficial de señales y fue muerto sobre la cubierta cuando intentaba avanzar hacia el torreón de mando.

Un segundo intento de abordaje por doce tripulantes resultó también infructuoso. Sólo recién al tercer impacto con espolón la Esmeralda se partió y se hundió con el mástil al tope. El dramático combate concluyó a las 12:10 de la tarde. En total el Huáscar disparó cuarenta cañonazos.

Los chilenos acusaron 135 muertos. Los peruanos perdieron un oficial y siete marineros resultaron heridos.

De inmediato Grau, antes de avanzar hacia la otra nave chilena, la Covadonga, dispuso el salvataje de los 62 valientes sobrevivientes chilenos, cuyo último comandante, el teniente Uríbe, agradeció el humanitario gesto del Almirante.

La posterior correspondencia entre Grau y la viuda de Prat fue un ejemplo de profundad hermandad latinoamericana, a pesar de la crueldad de esa guerra.

By atietam

El Huascar

CORRERIAS DEL MONITOR "HUASCAR"

Gracias a su considerable andar, blindaje, poderosa artillería y muy en especial a la audacia y habilidad de su Comandante, el monitor "Huáscar" se constituyó en una seria amenaza a las líneas de comunicaciones marítimas que sustentaban el esfuerzo bélico chileno.

El 26 de mayo de 1879 ataca Antofagasta y al día siguiente apresa dos naves mercantes en Cobija.

El 3 de junio es avistado por el blindado "Blanco" y la cañonera "Magallanes", pero logra escapar después de un corto duelo de artillería. Durante la noche del 10 de julio penetra en Iquique y ataca a las unidades navales que bloquean el puerto.

La cañonera "Magallanes" elude con mucha pericia marinera varias embestidas del espolón del "Huáscar". Pero, ante la probabilidad de tener que enfrentar al blindado "Cochrane", el Comandante Grau decide regresar a su refugio en Arica.

El 17 de julio zarpa a interceptar un convoy chileno y una semana después captura al transporte "Rímac" , con 300 carabineros de Yungay, caballares y abastecimiento de guerra.

Pese a que era el objetivo prioritario de la Escuadra Chilena, logró siempre escabullirse aprovechando que las naves nacionales estaban drásticamente reducidas en su andar, después de la larga campaña lejos de su base. Estas limitaciones hicieron insostenible el persistir en el bloqueo de Iquique.

Los éxitos del "Huáscar", en particular la captura del "Rímac", llevaron a la renuncia del Almirante chileno Juan Williams Rebolledo, asume como Comandante en Jefe el Capitán de Navío Galvarino Riveros Cárdenas y se somete a los buques chilenos a una recuperación de sus capacidades operativas, lo que toma la mayor parte del mes de septiembre.

Mientras tanto, el monitor "Huáscar" y su brillante Comandante continuaba atacando los puertos chilenos, destruyendo instalaciones portuarias y embarcaciones, para afectar el esfuerzo económico necesario para sostener la guerra.

LA BATALLA DE ANGAMOS

08 de octubre de 1879

Chile, ya capturado el Rímac y renovado sus mandos, se concentró en la toma del Huáscar. Las naves chilenas recibieron los mejores cuidados. Los transportes fueron armados con la artillería recién llegada de Europa.

Puestas las naves en las mejores condiciones, el nuevo comandante de la escuadra chilena, Galvarino Riveros, se dispuso a acabar con la presencia del Huáscar en el Pacífico.

El 8 de octubre de 1879 a las tres y media de la madrugada el Huáscar y la Unión, que llegaban de Antofagasta, divisaron tres humos, constancia indudable de la presencia de naves enemigas.
Grau actuó como otras veces, ya que no había otra posibilidad, y enrumbó hacia el este para continuar luego al norte. A las 7:15 am. se pudieron distinguir hacia el norte, cerrándoles el paso, otros tres humos: eran el Cochrane, el O'Higgins y el Loa.

En la convicción de que eludir el combate ante fuerzas tan superiores era imposible, el comandante Grau se dispuso a cumplir con su deber. Ordenó al comandante de la Unión huir, lo que permitió la savación de aquella nave.

A los veinte minutos de iniciada la acción, una granada lanzada desde el Cochrane "chocó en la torre del comandante, la perforó y estallando dentro hizo volar al contralmirante Miguel Grau Seminario, que tenía el mando del buque y dejó moribundo al teniente primero don Diego Ferré, que le servía de ayudante", según consta en el parte de combate firmado en San Bernardo, el 16 de octubre, por Manuel Melitón Carbajal.

Se continuó el combate con sigular coraje de parte de los defensores del Huáscar, cuyo blindaje no tenía resistencia ante las poderosas baterías de las naves chilenas.

El combate fue tenaz y sostenido, y se sucedieron en el comando de la nave peruana los oficiales Aguirre y Rodríguez, hasta que, no quedando nada por hacer, el último comandante del Huáscar, el teniente primero Pedro Gárezon, ordenó abrir las válvulas para hundir el buque. La nave, ya incapacitada para la defensa, sufrió el abordaje del enemigo.

Fue el más brillante buque de la Armada peruana en 1879, durante la Guerra del Pacífico, comandado por el Almirante Miguel Grau Seminario, distinguido y valiente marino peruano.

El 21 de mayo de 1879 hundió la corbeta chilena "Esmeralda", en el Combate Naval de Iquique. Capturado por Chile en el Batalla Naval de Angamos, el 8 de octubre de 1879, en la cual murió su Comandante, Almirante Miguel Grau.

Operó el resto de la Guerra del Pacífico bajo bandera chilena, destacando en el cañoneo de Arica y muerte de Manuel Thomson Porto Mariño y en el bloqueo de El Callao.

Formó parte de la Escuadra Chilena hasta 1897, fecha en que quedó de baja en Talcahuano por la explosión de una caldera. Se le restauró como reliquia histórica en 1934. En 1951 y 1970 fue sometido a extensas reparaciones y se le restauró a su condición original.

Se le conserva actualmente como reliquia histórica en el puerto de Talcahuano, rindiéndose homenaje permanente a los héroes chilenos y peruanos que murieron en su cubierta en cumplimiento de su deber.

By atietam

El Almirante

Aunque este trabajo esta extraido de otra pagina es increible lo extensa que es su bioghrafia en la Wiki:

https://es.wikipedia.org/wiki/Almirante_ ... _Seminario


Un saludo

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Amigo atietam


En el Ágora ya hay un humilde trabajo, con referencia este marino, no es tan extenso como el de la Wiki, pero algo si sabíamos de él.


viewtopic.php?f=50&t=466


Con tu permiso y cuando pueda, las colocaré juntas, así no está en dos sitios.


Y gracias por tu trabajo, que nunca sobra.


Un abrazo.
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Encantadisimo de que los unas.

Eso me pasa por no mirar y guiarme por impulsos, en este caso el Diario de Cadiz, jejeje.

Un saludo