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Querido Prinz Eugen:

<<...Hünde! Wollt ihr ewig leben?...>>

Parece ser que fue pronunciada por el Rey Federico II de Prusia, aunque no tengo seguridad de ello.

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Aquí va la mía:

¡Soldados del Imperio!:

¡Unidad, justicia y lealtad! ¡Banderas y escudos llevamos con orgullo de ancestros que lucharon por todo aquello que era suyo! Ahora sois el símbolo de la España actual Tercios de Europaaa.

Porque ha llegado la hora de luchar,y al enemigo vamos a aplastar, somos el ejército de la España Imperial, hijos de Europa, guerreros sin igual. Nada ni nadie nos podrá parar por nuestra patria dispuestos a morir. Ha llegado nuestro momento pues tienen miedo a nuestro ejército.

Nuestra bandera pronto ondeará, bandera rojigualda símbolo de libertad. Tercios de Europa: por nuestro origen y nuestra nación!

Y recordad: no tenemos miedo a morir, pues somos patriotas, símbolos de España, soldados del Imperio.

¡Por el Rey!¡por Dios!¡y por la Patria!
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Por este lado se va a Panamá, a ser pobres, por este otro al Perú, a ser ricos; escoja el que fuere buen castellano lo que más bien le estuviere



Allez

Buenas.

Permitirme:





Sobre una Hakama, algo arrugada por estar demasiado tiempo en el armario, se puede observar algunos de los bokens que use:

El n. 1 el de arriba, fue el primero, esta partido en dos por el centro, debido a un mal golpe, reparado con loctite y solo sirve como recuerdo.

En n. 2 esta otro boken este solo rajado y reparado con cinta.


En n.3 esta el de recambio.

Y en la parte superior, cruzados dos Bo de dieferentes medidas, pesos y grosor.

Y he colocado el cartel para que veais que son mios, no prestados.

Y abajo la funda de transporte.

Los Bo y el ultimo Boken son de la casa Decathlon, pues al final, he comprobado que se rompen igual o casi los caros como los sencillos. Basta un mal golpe sobre el filo y voila!

Aunque no se trata propiamente de una arenga, podría ponerse en forma de serlo.
¿Alguien sabe el origen de aquella frase "lo hicieron porque no sabían que era imposible"?

Esto es, que los buenos escapan de la mazmorra, y un sicario llama al villano por teléfono y le dice:
-¡Señor, han roto el cristal y han huido!
-¡Imposible! ¡Es irrompible!-exclama el villano.
El sicario replica:
-Ya señor, pero seguro que ellos no lo sabían...

La verdad es que no tengo ni idea.

En realidad, se utilizó en una película USA sobre la 2ª guerra mundial, pero no sé si la frase es original de esa película, o la copiaron de algún hecho anterior.
...Lo que ocurre es que no recuerdo ni el nombre de la película.

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Amigo Amenofis


No se si estoy equivocado, pero me parece que se trata de la que realizaron, basada en el hecho real del primer bombardeo de Tokio, cuando los B-25 Mitchel despegaron del portaaviones Hornet, al mando de Dolitte.


Y la película, no recuerdo muy bien el título, pero era algo así como < 10 segundos sobre Tokio > no si eran 10 ó 20 o los que fueran, pero como solo tenían tiempo de dar una pasada el título lo reflejaba.


Un abrazo.
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Gracias, Ensenada, por ponerme sobre la pista.

La película no habla ni de 10, ni 20, sino de 30 segundos. Se llamaba "30 segundos sobre Tokio". Intentaré verla, porque la tengo en mi colección.

De todas formas, tengo la sensación (sin poder fundarla en nada) que el lema es anterior, y lo copiaron.

Apreciados conmilitones:

Metidos en "japonerías", y que me perdone Eusebio,efectivamente, como menciona Ensenada, el libro que a tenido mayor difusión en Occidente, desde su aparición , ha sido el de Inazo Nitobe, "Bushido, el alma de Japón, 1899". En este libro, Nitobe, compara el bushido con la caballería occidental, explicando las pautas del pensamiento japones dentro de contextos conceptuales occidentales, de ahí su fácil introducción, al principio en Estados Unidos y despues en Europa. Pero... su visión del "camino del samurai" está distorsionada. Quizas por un afán de dar a conocer al mundo la cultura guerrera japonesa, Nitobe cedió demasiado a las necesidades de comprensión del occidental y acabó por presentar un bushido tan embellecido e idealizado que se aleja de lo que realmente representa. Le falta la puesta en práctica del "camino". De este libro existe una versión en español, "El Código del Samurai" (Ediciones Obelisco, Barcelona, 2005)

A quienes gusten de estos temas, además de "El Libro de los Cinco Anillos" recomiendo lean "Hagakure", de Yamamoto Tsunetomo. Ambas son obras escritas por verdaderos samurais basándose en sus propias experiencias y las dos se alejan de la imagen modernista que legó Nitobe. En tanto "El libro de los Cinco Anillos" se centra en marcar la "postura interna" y la técnica de combate de un samurai en solitario, el "Hagakure" nos muestra la devoción absoluta que un samurai miembro de un clan siente por su señor. El primero nos muestra al hombre independiente de cualquier colectivo y el segundo lo muestra como parte indivisible del grupo. Espíritu legionario, la suma de ambos, diria yo.

Hay un tema muy interesante para dedicarle un subforo, si os parece, algún día. El tema se llama "Yukio Mishima", nunca fue soldado pero tuvo su ejercito en el Japón de hace unos años. Se hizo "seppuku", claro.

Bueno, ya me he enrrollado bastante.

Cordiales saludos.

Mishima fue soldado. Nada menos que soldado kamikaze.

Una fingida enfermedad le libró de un destino fatal. Parece ser que no superó nunca su propia falta.

Era un tipo genial, con las cosas de la literatura, pero raro hasta decir basta.

Creó un ejército de opereta, con uniformes de opereta y una misión delirante: proteger con el cuerpo al Emperador, cuando los disturbios callejeros (que Mishima esperaba) lo amenazasen.

Su última aventura fue delirante. Secuestró a un general, salió a dar un discurso a la multitud, que no le escuchó y se retiró para hacer el suicidio ritual con otro de sus seguidores.

Quizá así ajustó su particular cuenta pendiente.

Un estudio interesante de todo esto en Vallejo Nájera, Mishima o el placer de morir.

En la proa del Infanta María Teresa. Al fondo la escuadra Yanky. A mi derecha, un poco por detrás, mi comandante, el comandante jefe de la Escuadra de Operaciones de las Antillas D. Pascual Cervera.

Miro a D. Pascual de refilón, su rostro sereno no me indica emoción alguna, pero sus ojos……., sus ojos me transmiten una pena infinita.

Vuelvo a mirar al frente, y me encuentro susurrando.

Abridme sitio los que estáis en la tumba,
dejadme espacio viejos marinos,
un recién llegado se une a vosotros
para probar su amor a la batalla.
Acogedle en vuestras tumbas,
es digno de ellas.

Una mano se apoya en mi hombro, es mi comandante, D. Pascual, me mira a los ojos con ternura.

¡Solicítales un sitio para mí también, solicítales un sitio para todos nosotros!

No es una arenga general, sería mi arenga particular, mi arenga a mí mismo.

Un saludo.

Extraída del "Diario de un Testigo de la Guerra de África" de don Pedro Antonio de Alarcón, os pongo la arenga con que el general Prim, conde de Reus, obsequió a su incorporación al Ejército español de las compañías de Voluntarios Catalanes, en la víspera del asalto a Tetuán, el 3 de febrero de 1860.

"Catalanes:

Acabáis de ingresar en un ejército bravo y aguerrido: en el ejército de África, cuyo renombre llena ya el universo.

Vuestra fortuna es grande, pues habéis llegado a tiempo de combatir al lado de estos valientes. Mañana mismo marcharéis con ellos sobre Tetuán.

Catalanes: vuestra responsabilidad es inmensa; estos bravos que os rodean, y que os han recibido con tanto entusiasmo, son los vencedores de veinte combates; han sufrido todo género de fatigas y privaciones; han luchado con el hambre y con los elementos; han hecho penosas marchas con el agua hasta la cintura; han dormido meses enteros sobre el fango y bajo la lluvia; han arrostrado la tremenda plaga del cólera, y todo, todo lo han soportado sin murmurar, con soberano valor, con intachable disciplina. Así lo habéis de soportar vosotros. No basta ser valientes: es menester ser humildes, pacientes, subordinados; es menester sufrir y obedecer sin murmurar; es necesario que correspondáis con vuestras virtudes al amor que yo os profeso, y que os hagáis dignos con vuestra conducta de los honores con que os ha recibido este glorioso ejército; de los himnos que os ha entonado esa música, y del general en jefe bajo cuyas órdenes vais a tener la honra de combatir; del bravo O'Donnell, que ha resucitado a España y reverdecido los laureles patrios; y también es menester que os hagáis dignos de llamar camaradas a los soldados del SEGUNDO CUERPO, con quienes viviréis en adelante, pues he alcanzado para vosotros tan señalada honra...

»Y no queda aquí la responsabilidad que pesa sobre vosotros. Pensad en la tierra que os ha equipado y enviado a esta campaña; pensad en que representáis aquí el honor y la gloria de Cataluña; pensad en que sois depositarios de la bandera de vuestro país..., y que todos vuestros paisanos tienen los ojos fijos en vosotros para ver cómo dais cuenta de la misión que os han confiado.

»Uno solo de vosotros que sea cobarde, labrará la desgracia y la mengua de Cataluña. Yo no lo espero. Recordad las glorias de vuestros mayores, de aquellos audaces aventureros que lucharon en oriente con reyes y emperadores; que vencieron en Palestina, en Grecia y en Constantinopla. A vosotros os toca imitar sus hechos y demostrar que los catalanes son en la lid los mismos que fueron siempre.

»Y si así no lo hiciereis; si alguno de vosotros olvidase sus sagrados deberes y diese un día de luto a la tierra en que nacimos, yo os lo juro por el sol que nos está alumbrando, ¡ni uno solo de vosotros volverá vivo a Cataluña!

»Pero si correspondéis a mis esperanzas y a las de todos vuestros paisanos, pronto tendréis la dicha de abrazar otra vez a vuestras familias, con la frente coronada de laureles; y los padres, las madres, las mujeres, los amigos, dirán llenos de orgullo, al estrecharos en sus brazos: Tú eres un bravo catalán.»

Tampoco me resisto a volcar las impresiones que tal arenga causó en las filas; dejemos que nos lo cuente la pluma de don Pedro Antonio:

"Imposible es que os figuréis ni que yo describa con exactitud la manera que tuvo el conde de Reus de pronunciar esta brillante alocución.

Al principio la interrumpieron vivas y aclamaciones. Al final todo el mundo lloraba (todos llorábamos), mientras que el gran batallador, de pie sobre los estribos árabes, rígido, trémulo, espantoso, parecía transportado a los antiguos tiempos, a los días de los Jaimes y Berengueres, y comunicaba a todos los corazones el entusiasmo patriótico de su alma, el calor de su belicosa sangre y la extrema energía de su temperamento. ¡Cuán fulminante en la amenaza! ¡Qué arrebatador en el elogio! ¡Qué persuasivo en la promesa! ¡Qué sublime al evocar la pasada historia!

¡Llorábamos todos, sí, viejos y jóvenes, generales, jefes y soldados! ¡Todos comprendíamos en tal instante aquel idioma extraño; todos palpitábamos a compás con aquel corazón embravecido; todos ansiábamos ardientemente la llegada del nuevo día, la hora de la refriega, el momento de la embestida y el asalto!

¡Eterno, inolvidable será el día que nos espera! ¡Húndase pronto en occidente el sol de hoy, y luzca sin tardanza la nueva aurora!"

Una “estilo 2010”, redactada en estilo caricaturesco sólo con el ánimo de reírnos un rato, sin pretender ofender a nadie. Si el intendente general la encuentra poco adecuada, ruego que la retire.

“Marineros y marineras. Tal como estipula el convenio colectivo de las FFAA, forma parte de nuestras tareas enfrentarnos con el enemigo. Nuestro gobierno no nos ha dado carbón para llegar a La Habana. De todos modos, fruto de la especulación inmobiliaria, el dique flotante de esa villa está inútil. No nos ha dado munición de calidad. De todos modos, fruto de la malversación de fondos, los cierres de los cañones no funcionan. Los fondos de los buques están sucios. De todos modos, para no llegar a ninguna parte, fruto de la ausencia de proyecto de país, da lo mismo. No nos pagan. De todos modos, fruto de las grandes superficies comerciales sitas en las afueras en poder del enemigo, en el centro de Santiago no hay en qué gastar el dinero. Es un mal gobierno pero lo votamos y es el nuestro. Aquellos de allí delante quieren que nos mande el suyo, y ese no lo votamos. Pensad que son el arbitro y los jueces de línea que invalidaron el gol de la victoria de vuestro equipo en la final de la copa, y dadles su merecido. Es suicida, sí. Pero, ¿No lo es respirar el aire contaminado de las ciudades españolas que mata 14000 personas al año? ¿No lo es circular por nuestras carreteras y autopistas? ¿No lo es comer bollería industrial repleta de grasas hidrogenadas sin que los fabricantes tengan tan siquiera que declarar su composición? Marineros y marineras, trabajad en equipo, estad motivados y motivadas, sed respetuosos y respetuosas con las minorías sociales y étnicas que sirven los cañones enemigos, respetad los derechos de los peces que habitan bajo nuestros buques y no disparéis más proyectiles de los necesarios, pues son dañinos para el medio ambiente. ¡A por ellos! Me olvidaba: se recuerda a los marineros y marineras que está prohibido fumar en las baterías del 28 y del 5,7. Sólo se permite en la abierta del 14 y en las cofas artilladas."

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Pero todo eso ocurre, porque mucha técnica mucho desarrollo, pero no investigan en que los cañones y armas portátiles sean de aire comprimido, así como las balas lo sean a forma de caseta de tiro antigua, con un tapón de corcho con hilo para recuperarlo, así el medio ambiente no se contaminaría, la guerra sería ecológica y los heridos (ya que muertos serian por infarto, no por efecto de los corchos) serían rápidamente recuperables, nada de hospitales y UCIs, esos espacios en los buques para guarderías y así sucesivamente.


Las guerras entonces serían "limpias" y sin daños colaterales.


Pero tranquilo, que a todo se llegará.


Un abrazo.
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Gila ya le puso un hilo a su única bala.

Realmente un precursor

Un saludo

Antonio

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Es que Gila, es la muestra palpable de lo malo que era el dictador.


Él estuvo en la zona del ejército popular de la república, pero como era una persona normal, se dedicó a hacer lo que le mandaban, o sea ha hacer la guerra.


Al terminar, como muchos otros pasó por el juicio de fidelidad a los alzados, pero como nada se le pudo demostrar, a pesar de cierto pájaro del PS lo quiso involucrar, solo pasó el tiempo (largo) en la cárcel necesario hasta que se le juzgara, pero de allí salió y comenzó a burlarse de la guerra y sus "gratas" consecuencias y a tanto llegó su fama, que no hubo ningún inconveniente para ser llamado al Pardo, para amenizar una de aquellas cenas anuales con el cuerpo de embajadores acreditados. Obteniendo un gran éxito, tanto, que después a su vez era llamado por otros embajadores para trabajar en sus fiestas.


Una forma de ganarse la vida, que personalmente considero que es la mejor, ya que hacer reír es mucho más complicado que hacer llorar. Una gran profesión para un gran hombre.


Un abrazo.
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Cuenta Rafael Garcia Serrano, en uno de sus libros, no recuerdo si "La Fiel Infantería" o "La Gran Esperanza", que en el verano del 36, cuando las fuerzas de Mola, de las que él formaba parte, avanzan hacia Madrid, su compañía debía de realizar un asalto frontal. Al capitán, que no era muy diplomático ni un gran orador, no se el ocurrió decir otra cosa que la siguiente:

"¡Adelante, y al que le den que se joda!".

Es, probablemente, la arenga mas corta de la historia militar. Y, con toda seguridad, la mas sincera.