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DESCARTES (
1596 –1650)
René Descartes nació el 31 de marzo de 1596 en
La Haye–en-Touraine, cerca de
Poitiers, aunque,desde 1967
La Haye se llama
Descartes, en honor de su hijo más ilustre.
Descartes vivió durante uno de los grandes períodos intelectuales en la historia de la civilización:
Fermat y
Pascal fueron sus contemporáneos en Matemática.
Cervantes y
Shakespeare fallecieron cuando
Descartes tenía 20 años.
Descartes sobrevivió a
Galileo ocho años.
Newton tenía ocho años cuando
Descartes falleció.
Descartes tenía 7 años cuando
Gilbert, el fundador de la ciencia del magnetismo, murió.
Aunque el padre de
René no era poderoso, sus medios de fortuna le permitían vivir fácilmente y su hijo fue destinado a la carrera de gentilhombre, al servicio de Francia.
Debido a la delicada salud de
René, el padre demoró su enseñanza, eligiendo el colegio de jesuitas en
La Fléche como la escuela ideal para su hijo.
En esa institución y, cayendo en la cuenta de que
Descartes parecía necesitar más reposo que los niños normales de su edad, el Rector le permitió permanecer en cama cuanto quisiera durante las mañanas y que no abandonara su habitación hasta que quisiera reunirse con sus compañeros en el aula.
Recordando más tarde sus días escolares en
La Fléche,
Descartes confiesa que aquellas largas y tranquilas mañanas de silenciosa meditación fueron el verdadero origen de su filosofía y de su matemática.
Alternó diversos periodos de servicio a las armas con etapas de meditación y creación humanístico – científica.
En septiembre de 1649, la reina
Cristina de Suecia le llamó para ejercer como preceptor real y para que fundase la
Academia Sueca de Ciencias.
El ritmo de trabajo cotidiano al que fue sometido (la reina le citaba a las cinco de la mañana y debía seguir durante las tardes, con los trabajos de la Academia) le fue debilitando, hasta fallecer a causa de una neumonía el 11 de febrero de 1650.
Pasando de puntillas sobre sus hallazgos en el tema de la filosofía, resumiremos sus brillantes descubrimientos en la matemática:
A pocos hombres les es dado renovar todo un campo del pensamiento humano y
Descartes fue uno de ellos.
Omitiendo las muchas y bellas cosas que realizó en
Álgebra y, particularmente, en la
notación algebraica y la
teoría de ecuaciones, diremos que
Descartes rehizo la Geometría, haciendo posible la Geometría moderna:
Partimos de ecuaciones de cualquier grado deseado o sugerido de complejidad e interpretamos sus propiedades algebraicas y analíticas geométricamente.
Por tanto,
hemos renunciado a que la Geometría sea nuestro piloto:
El Álgebra y el Análisis serán nuestros pilotos en los mares del espacio y su geometría.
Todo lo que hemos dicho puede extenderse a un espacio de cualquier número de dimensiones.
Para el
plano, necesitamos
dos coordenadas y, para el
espacio ordinario,
tres; para la
Geometría de la mecánica y la relatividad,
cuatro; finalmente, para
el espacio (tal como los matemáticos lo imaginan),
n coordenadas, o bien,
tantas coordenadas como todos los números naturales; es decir, tantas como existen en todos los puntos de una línea.
Esto es batir a
Aquiles y a la tortuga en su carrera.
Descartes no revisó la Geometría: La creó.
Además de la
Geometría Analítica,
Descartes descubrió
El Método, como
conjunto de preceptos para la dirección del espíritu:
1) No admitir algo como verdadero, si no existe evidencia de que lo sea (Duda Metódica).
2) Dividir las dificultades en tantas partes como sea necesario para solucionarlas mejor (Análisis).
3) Establecer un orden de pensamiento, apoyándose en las soluciones de las cuestiones simples, hasta resolver lo más complejo (Síntesis) y, finalmente
4) Hacer revisiones amplias a fin de evitar omitir nada (Control).