MESETA Ó CASILLERO PARA LA MANIOBRA.


Es una pieza con agujeros, por los cuales pasan cabillas para amarrar los cabos; en la parte de atrás tiene algunas mortajas para coserla a los obenques: lo más general es el ir clavada a la obra muerta.

TELERA.


ES una pieza larga de madera con agujeros para pasar ciertos cabos: se usa también para las arañas de los toldos.

TOJINOS.

Unos se clavan en la cruz de la verga (fig. 122), y otro» en los penoles (fig. 123) para los usos que se dirá, y también en el bauprés para las trincas , branques etc.

CORNAMUSA.

Se clava ó emperna en la amurada del buque, y sirve para amarrar á ella algunos cabos que mandan mucha fuerza, como por ejemplo la escota mayor etc.: algunos buques las usan de hierro.





La fig. 125 representa una cornamusa cosida al palo, para lo cual se le hace una mortaja á fin de que pase por ella la cosidura, un agujero largo en el medio para otra cosidura, y dos agujeros redondos para cruzar ó abotonar la ligada: para la cornamusa cosida a los obenques.

GALÁPAGO.

Es una pieza de madera para guía de un cabo, ó mantenerlo en un mismo sitio.

GAZA PARA MOTON.


Se aforra con meollar, y a los dos chicotes se les hace costura redonda se alquitranan bien las dos canales del motón.


La costura (fig. 128) se hace sobre el extremo (a) opuesto al por donde se pasa el chicote de la tira, que se llama el culo del motón; en el otro extremo se le da a la gaza una ligada abotonada se llama esta parte de la gaza el cuello.


Muchas veces se engazan a los motones, guardacabos con ganchos (fig. 129).


En este caso la gaza pasa por dentro del ojo del gancho y alrededor de la canal del guardacabo (d).


La costura se hace como antes sobre el culo del motón, y la ligada abotonada se da entre el guardacabo y el motón (fig. 130).

GAZA DE MOTON DE RABIZA.


Se hace a la gaza una costura de ojo (véase fig. 74).


A esta costura (que queda por la parte del motón opuesta al culo, ó sea sobre la coz del motón; se le peinan los chicotes, trincafían y aforran con meollar, y el chicote del cabo se falcacea; pero lo más frecuente es dar a la gaza una ligada redonda (a) a cierta distancia de la costura , y descolchando los cordones del cabo se hace con ellos cajeta como se ha dicho para los tomadores (véase fig. 88): otras veces en lugar de esto se separan las filásticas y se trincafían lo mismo que la salvachia (véase fig. 96).

GAZA DE BOCA DE CANGREJO PERNERA.


Se da una ligada abotonada en el seno que forma la gaza; a la pernada corta (b) se le hace una gaza en su chicote: la pernada larga no lleva gaza, y sirve para que después de dar vuelta al rededor de una verga, pase por la gaza (b) y se haga firme con dos cotes ó con una ligada abotonada al firme.


Muchas veces también se engazan los motones con las dos pernadas iguales y una gaza en cada una para que pase por ellas una cosidura, y este último engazado se llama de boca de cangrejo solamente.

GAZA DE MOTON DE CHAFALDETE Ó DE CANASTA.


Es de boca de cangrejo; el seno de la gaza se coloca sobre la parte opuesta A los tojinos, y los chicotes pasan por los agujeros a cada banda, con lo que se evita que se roce la gaza, a la que se da su ligada abotonada como antes.

CUADERNAL DE TRES Ó CUATRO OJOS.


Lleva gaza doble, para lo cual tiene el cuadernal dos canales en cada extremo: la gaza se entraña, precinta y aforra (algunas veces solamente se entraña y aforra), y se les hace costura á los dos chicotes; después se promedia de modo que la costura y el otro seno queden sobre el culo del cuadernal; se les da a los senos que cuelgan su ligada abotonada en el cuello, como se ha dicho, con la diferencia de que las vueltas cruzadas ó de botón pasan por entre las dos gazas dobles en dos direcciones, ó en
cruz como se ve en la figura.


A esta ligada con dos cruces ó botones cruzados se llama Ligada cruzada.


Estos cuadernales como son tan poco manejables requieren un aparejo para halar por la gaza, y una cuña ó pasador grande para introducir entre la gaza y el cuadernal, y de este modo sentar bien la gaza y poderle dar la ligada en el cuello.


Cuando se engaza este cuadernal a bordo, se hace en dirección de arriba para abajo ó sea vertical, pasando un cabo por cualquiera de las cajeras y haciéndolo firme a un cáncamo, enganchando en seguida un aparejo sencillo (c) (fig. 135) a los dos senos de la gaza y tesándola bien (dicho aparejo puede estar hecho firme al estay): se da una barbeta provisional a los dos senos de la gaza, tesándola bien con tortor (véase fig. 71).



Se introduce un pasador grande ó burel (c) entre la barbeta y el cuadernal; se da una ligada sencilla (d) con meollar á la gaza, que pasa por la parte superior de la cajera de cada banda y se abarbeta con palo de tortor , lo cual hace que la gaza siente sobre el cuadernal.



Se quita el burel que ha servido de cuña para hacer estirar la gaza, se zafa la barbeta provisional, y se da la ligada cruzada como se ha dicho.


En los buques de guerra y mercantes grandes usan en lugar del burel un zoquete de madera, y además una cuña entre el zoquete y el motón.


La barbeta (d) va al rededor de la gaza y del cuadernal abrazando a ambos y se azoca bien con un palo de tortor.


Los motones engazados con hierro que se llaman herrados, son ó bien motones ó cuadernales de dos ó tres ojos.

MOTON HERRADO.


Es un motón con la gaza de hierro, y se usa para enganchar en los cáncamos de los tamboretes, para que pase por él el amante de virador.


El motón alto de la driza de gavia es un cuadernal de dos ó tres ojos y engazado del mismo modo que el anterior.


El motón bajo de la driza de gavia (B) tiene su gaza de hierro con un gancho giratorio (g) en ella, para que se puedan quitar con facilidad las vueltas que toma la driza, dando vueltas al cuadernal.

CORNAMUSA DE OBENQUE.


Son piezas de madera o hierro en forma de T (fig.f) que sirven para amarrar cabos, con mortajas para las cosiduras (i) que llevan su pecho de muerto, y una canal para sentar en el obenque.

APAREJOS

Los aparejos son distintas combinaciones que se hacen con motones y cuadernales por cuyas cajeras laborea un cabo y que se emplean para vencer grandes resistencias con poco esfuerzo.



TECLE Ó LANTION.

Es el aparejo más sencillo que puede formarse, pues consiste en un motón fijo por el cual laborea un cabo, en cuyos extremos se aplica la potencia y en el otro se halla la resistencia.


Este aparejo no favorece en manera alguna la potencia, pues debe ser mayor que la resistencia para que se produzca movimiento, habiendo también que vencer el rozamiento del cabo con la roldana, el de éste con el perno y la rigidez del cabo.


Resulta sin embargo ventajosa su aplicación, pues transforma la dirección en la que hay que hacer los esfuerzos, y conocemos que son más enérgicos los que se hacen halando de arriba abajo que los de abajo arriba.

TECLE Ó LANTION DE AMANTE


Es la combinación de dos tecles.

Cuando pasa un cabo por un motón como la fig. 140, se llama tecle ó lantion, como ya hemos dicho; y si el motón de otro tecle ó lantion (i) se engaza a la tira de aquel, se llama tecle de amante, ó lantion de amante.

APAREJO.


Se compone de un cuadernal y un motón engazados con guarda-cabo y gancho, la tira (b) pasa por una de las cajeras del cuadernal (a), en seguida por el motón, después por la otra cajera del cuadernal, y el chicote se hace firme con una vuelta de escota (véase fig. 61) a un manzanillo (c) engazado al rededor de la gaza del motón (d).


Cuando este aparejo es un poco grande ó de mucha fuerza, se llama de combés.


Si el motón y cuadernal fuesen de rabiza, en lugar de estar engazados con gancho y guarda-cabo, el aparejo se llamaría un chiquere.

PALANQUIN Ó APAREJO SENCILLO.


Se forma con dos motones; para esto se pasa el chicote de un cabo por la cajera de un motón, se pasa por la cajera del otro (d) y se hace firme dicho chicote (c) a un anillo llamado manzanillo del motón (a), (c) se llama el arraigado, (e) el guarne, y (f) la lira.

APAREJO DE AMANTE.


Es la combinación de un tecle con un aparejo, o sea lo mismo que el aparejo, con la diferencia de estar aplicado á un amante: este es un cabo (c) que pasa por un motón (a), enganchado á un guarda-cabo en el chicote de la corona (b), y es lo mismo que el amante del lantion (fig. 140).

PASTECA.

Muchas veces está engazada en hierro con un gancho giratorio (a).


Se usa para meter el seno de un calabrote ó cabo grueso cuando se va á la espía, para evitar que este seno salga fuera , si de repente arrían el calabrote, lleva una aldabilla de hierro que tiene un gozne en la gaza y se afirma a la otra parte por el perno (b).

METER LOS PALOS


Los buques grandes tienen tres palos, y el bauprés que también se llama palo, y son de varios largos y grueso según el porte del buque.


El primero de los dichos se llama el palo de trinquete, y está situado en la parte delantera del buque; el segundo que es el más grande , se llama por esta razón palo mayor, y esté colocado cerca del centro del buque; y el tercero que se sitúa en la parte de popa se llama palo de mesana.


El bauprés está colocado sobre el branque ó roda haciendo ángulo mayor ó menor con el horizonte, á cuya dirección se llama promedio, y se dice, tal buque tiene el bauprés muy promediado, cuando está muy alto ó elevado, y poco promediado cuando está bajo ó poco elevado sobre la proa.


Los buques de guerra y de la India tienen sus palos formados de diferentes piezas: la fig.143 representa uno de estos en la cual (a) son los zunchos, (d) las realas de las jimelgas, (c) los baos con mortajas para que encajen en ellas las crucetas.


Los baos son unas piezas robustas de roble que van empernadas una con otra y a la cabeza del palo; descansan sobre las jimelgas de cabeza ó flanchones, que salen para afuera hacia babor y estribor, y además están sostenidos también los baos por una especie de puntales que salen hacia proa a cada banda y se llaman cacholas (b).

CABRIA

Para meter los palos y el bauprés se hace uso de las cabrias hechas de dos perchas grandes, que se llaman bordones: en sus cabezas (a) se les da una ligada redonda que en este caso se llama portuguesa ó trinca de portuguesa, y con la cual se deben dar bastantes vueltas.






Sobre las cabezas de los bordones en la portuguesa se cose un cuadernal grande de tres ó cuatro ojos (b) según el tamaño del palo mayor del buque, y se guarne una tira por él y por otro cuadernal (c): en las cabezas de los bordones se ponen cuatro cabos llamados vientos o patarraices que se dan con vuelta de ballestrinque, dos de los cuales van a proa y dos a popa (d).


En la parte superior de uno de los bordones se cose un motón para un andarivel (e), que sirve para embalsar un hombre en caso necesario.


En cada coz de los bordones se ponen dos aparejos (f) que van para popa, y dos (g) para proa, cuyos motones deben ser de rabiza y se llaman aparejos de pie.


Antes de levantar la cabria se colocan dos pedazos de madera (1, 2), que se llaman zapatas ó soleras, en cada banda sobre la cubierta, que cojan tres baos, los cuales se apuntalan por debajo en el combés y sirven para que descansen en ellas las coces de las perchas que forman la cabria.

La trinca de portuguesa sé debe pasar algo floja y de cabo usado para que no dé de sí; en seguida se abren ó separan las coces de los bordones; se colocan sobre el coronamiento (h) (fig. 145), y si el buque no tiene cámara alta se pone una percha atravesada de babor á estribor (i) sobre la borda para hacer levantar más la cabria.





El cuadernal bajo del aparejo que se cosió en la portuguesa se lleva á proa, tiramollando los guarnes (k), y se hace firme a las bitas, ó a la busarda, ó al cáncamo que hay á proa en la curva capuchina, ó a la gaza del estay mayor, la tira pasa por una pasteca motón de retorno, y va al cabrestante.


La percha (i) sirve de apoyo a la cabria y la cantea para arriba, y las coces no pueden ir para proa porque lo impiden los aparejos (f).


Cuando la cabria está levantada, se lleva á proa ó á popa por medio de los vientos y aparejos de pie; los vientos se tesan y se desengancha el cuadernal que estaba dado á proa.

El palo de mesana es el primero que se mete, para lo cual se coloca la cabria quedando por la cara de proa de la fogonadura (d) por donde debe entrar el palo, y el cuadernal bajo se cose un poco más arriba del centro de gravedad de aquel, para que de este modo canteé un poco para arriba, y es mejor en lugar de coser el cuadernal dar una salvachia de meollar alrededor del palo (a) (fig. 146), meter el seno por la gaza del cuadernal y por dentro del seno un cazonete: esto es más pronto y la flexibilidad de la salvachia hace que no se corra nada.





Se cosen dos motones uno a cada banda en la cabeza del palo (b) para pasar por ellos los andariveles que se ven en la fig. y que sirven para subir la gente y jarcia necesaria sobre los baos con el fin de encapillarla.


El chicote del andarivel que se dio á uno de los bordones (c), sirve de lantía, y se da al rededor del palo por debajo de las cacholas, y puede llamarse también á este cabo aparejo de cabeza.


Cuando se ha suspendido bastante el palo, se hala del aparejo de cabeza, lo que le hace poner en una dirección de arriba para abajo ó vertical sobre la fogonadura (d): la gente que está sobre cubierta ayuda á meter la mecha del palo por dicha fogonadura del aparejo real de la cabria se t¡ramolla poco á poco, y después que ya ha entrado el palo, se arria seguido.


La gente en la bodega coloca la mecha (e) en una mortaja hecha en una pieza grande de roble que se llama carlinga, la cual va empernada sobre la sobrequilla.


Después que se ha metido el palo de mesana se pasa la cabria hacia proa por medio de los vientos y aparejos de pie, como demuestra la fig. 144, lo necesario para meter el palo mayor, colocándola por la cara de proa de su fogonadura; este palo y el de trinquete se meten y se colocan en su carlinga, lo mismo que el de mesana.

BAUPRÉS


La parte del bauprés que está dentro del buque hasta la mecha ó coz es ochavada, y lo demás hasta el tamborete es redondo.





El tamborete (A) es un zoquete grande de olmo con dos agujeros uno redondo y otro cuadrado, que se coloca en el extremo de afuera ó espiga del bauprés, introduciendo en el agujero cuadrado quedando el redondo para arriba por donde ha de pasar el botalón del foque: en este tamborete hay diferentes cáncamos cuyo uso se explicará más adelante.


A poca distancia del tamborete de la parte de adentro se empernan al bauprés dos piezas de madera de olmo una a cada lado, y en cada una se hace una cajera con roldana.


A estas piezas (e) se llama orejas ó gavieta del bauprés; en la parte de afuera de la parte ochavada se clavan unos barrotes que se llaman tojinos (d), y sirven para que no se corra la trinca, y más arriba una pieza de madera (f) que se llama telera con diferentes groeras para poder pasar maniobra: a los dos tercios del bauprés contados desde dentro, se pone un galápago (g) para el botalón del foque, y un tojino (h) para el arritranco de la cebadera.


Cuando la coz del botalón del foque descansa en el branque del estay de trinquete de la fig.116, no se pone el galápago (g).


Cuando el bauprés descansa sobre la cubierta alta se mete como los demás palos; pero si va entre cubiertas se arria de los vientos de popa para que la cabeza de la cabria incline hacia proa. (Nota 29.)


Para meter el bauprés formando abanico con la verga de trinquete, véase la fig. 372.

METER UN PALO NUEVO POR MEDIO DEL VIEJO, SIN CABRIA.


Si un cúter, balandra u otro cualquier buque chico tiene un palo inútil y no puede adquirir perchas de suficientes dimensiones para formar la cabria y meter otro nuevo, se desencapilla toda la jarcia menos las coronas (n) se dan los aparejos reales a las mesas de guarnición, y se tesan bien, y dos vientos uno a popa y otro a proa (m) a la cabeza del palo, y también un motón con su andarivel (k).





Se asegura el palo sobre la fogonadura con sus dos aparejos de pie, uno a popa y otro á proa (p), y con dos retenidas una a babor y otra a estribor (s): se cose un cuadernal (o) en la cabeza del palo, y mientras se está haciendo esto se apuntala bien la cubierta alta en el combés.


Después que todos los cabos están bien tesos, se asierra el palo malo a la haz de la cubierta, acuñándolo según se va aserrando, y así que está aserrado se lleva un poco a popa por medio de los vientos y aparejos de pie como se dijo hablando dé la cabria; se clava un cáncamo grande en el zoquete (g) que quedó del palo, y el otro cuadernal (r) bajo del aparejo correspondiente al (o) se cose ó se engancha al dicho cáncamo, y por medio del expresado aparejo se echa fuera el zoquete.


El palo nuevo se mete por medio del mismo aparejo como antes, y cuando está ya sentado en la carlinga , se cambia el cuadernal (o) a la cabeza del palo nuevo, y el otro cuadernal bajo se da á una salvachia con su cazonete al palo viejo ( véase fig. 146), y después de zafarle los vientos, coronas etc., se echa fuera por medio del palo nuevo.


Así qué los tres palos y el bauprés están sentados, se hallan listos para aparejarse ó vestirse, y como la seguridad de los palos hacia proa depende del bauprés, empezaremos por asegurar este.

APAREJAR O VESTIR LOS PALOS

TRINCAS DEL BAUPRÉS.


Para asegurar el bauprés y que resista a la gran fuerza de los estays que sostienen los palos hacia proa, se emplean las trincas, los barbiquejos y los mostachos.


Antes de todo se sienta bien el bauprés, hacia abajo por medio de una pipa ó tonel de agua (a) (fig. 149) según el buque, ó por un bote que se suspende en el extremo de afuera, ó la lancha si es buque de guerra; se pasa para esto un estrobo alrededor del bauprés; se engancha en él un cuadernal de dos ojos (b), y el motón (c) a una eslinga que pasa al rededor del tonel (d), el cual se iza y permanece así hasta que se da la trinca.


La trinca es un cabo, guindaleza ó calabrote según el buque, que se pasa con ocho, diez ó doce vueltas, según el tamaño del mismo sobre el bauprés y por dentro de una groera que hay en el tajamar (m) el chicote se pasa por la groera, por encima del bauprés y se hace firme con malla ó con gaza al firme; se azoca, y teniendo cuidado que quede la malla debajo del bauprés, se pasa otra vuelta sobre este con el firme por la groera y otra vez sobre el bauprés.


Las vueltas sobre el bauprés van de popa á proa, y las de la groera de proa a popa, a causa de que los tojinos caen á la cara de proa de la groera.


El seno de la trinca se hace firme en la gaza de un amante (n) con cazonete ó bien con vuelta de boca de lobo a un gancho en el chicote del amante.


Este amante pasa por un motón de rabiza hecho firme, ó un motón cosido, a la groera de los barbiquejos (c) en el tajamar, y entra por el escoben (p): se le engancha un aparejo de combés (q) dentro del buque, cuyo motón se engancha en un cáncamo cualquiera de la cubierta y la tira va al cabrestante.


La trinca se tesa bien, y cuando lo está se abarbeta con meollar pagando vueltas alrededor y por entre medio, como cuando se abarbetan las tiras de un aparejo cualquiera (véase fig. 76): el aparejó (q) se arria se zafa el cazonete, se pasan una ó dos vueltas más, que se tesan del mismo modo y se continúa así hasta acabar.


Cuando se ha dado el número prefijado de vueltas el chicote se pasa alrededor de todas ellas y se tesa como antes: a estas vueltas se llama botón D, y a la operación abotonar, con la cual se azocan perfectamente las vueltas de la trinca que se dieron al bauprés y tajamar, el chicote se abotona al firme con una ligada redonda.