PATRULLERO DE ALTURA RÍO MIÑO.



Características

Nombre: Rio Miño / ex Tensho Maru N.º 28 (1984) / ex Daian Maru (2003) / Amazonas Reefer I (2006)
Tipo: pesquero palangrero de altura / reconvertido en patrullero de altura.
Astillero: KK Kanasashi Zosen (Japón)
Botadura: 1984
Reconversión: Astilleros Armón
Entrada en servicio: 2007
Puerto base Las Palmas de Gran Canaria.

Desplazamiento: total 1.218 t / lastre 605 t
Eslora: 50,81 m.
Manga: 8,60 m.
Calado: 3,30 m.

Propulsión: 2 x motores diésel
Potencia: 100 cvx2
Velocidad: 12 nudos
Combustible: gasóleo, 227.083 l
Autonomía: 22.000 millas

Dotación: 22 / 14 agentes / 8 de Marina Mercante / 200 náufragos

Armamento: lanza-granadas LAG 40
MMSI: 225364000
IMO: 8410471
Código de llamada: ECNL

El Río Miño es el primer buque con la clasificación –oceánico– con que contó el Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SEMAR), siendo entregado oficialmente el 1 de septiembre de 2007 en Las Palmas de Gran Canaria.

Su puesta en servicio supuso una progresión en el desarrollo de este servicio, ya que le permite disponer de un buque con capacidad de permanencia en la mar y a larga distancia de su base.


Misiones

1-Judicial: prevención e investigación de delitos.

2-Gubernativo: custodia de costas y puertos y prevención de la inmigración irregular.

3-Fiscal: Resguardo Fiscal del Estado, prevención y represión del contrabando.

4-Administrativo: protección de la naturaleza y el medio ambiente en el medio marino, control e inspección pesquera y protección del patrimonio arqueológico submarino.

5-Militar: las que le encomienden el Gobierno y el Ministerio de Defensa.

6-Varias: misiones de paz en el extranjero, colaboración con la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (SASEMAR) en auxilios y remolques.

En sus envejecidas cuadernas, había sido anteriormente un palangrero japonés de nombre ‘Tensho Maru nº 28’, construido por Kanasashi en los astilleros de KK Kanasashi Zosen de Shizuoka en Japón en 1984.

A lo largo de su vida cambió varias veces de nombre y hasta tuvo pabellón panameño antes de ser adquirido por la Benemérita.

Tras pasar por los Astilleros Armón, en Burela, con la finalidad de adaptarlo a las exigencias de su nueva vida, se entregó a comienzos de septiembre de 2007, en Las Palmas de Gran Canaria, comenzando a prestar servicio para el SEMAR.

Astilleros Armón le instaló los más modernos sistemas de comunicaciones, radares, cámaras térmicas, etc. al tiempo que se le construyó una cubierta de vuelo sobre la popa de la superestructura para poder operar con helicópteros, si bien no posee hangar a bordo.

Adaptó el nuevo buque para que pudiera operar con una dotación de 22 tripulantes, consistentes en 14 agentes de la Guardia Civil y ocho miembros de personal civil (incluyendo su capitán) repartidos en 20 camarotes, implementando como capacidad el poder actuar como buque de rescate, pudiendo albergar a 200 náufragos, contando también con 4 celdas para detenidos cuando actúa en misiones contra el narcotráfico y la comisión de delitos en la mar.

Fue el mayor buque del SEMAR, y su puesta en servicio supuso una progresión en el desarrollo de este servicio, ya que le permite disponer de un buque con capacidad de permanencia en la mar a larga distancia de su base.

Tras la creación de su Servicio Marítimo, la Guardia Civil debió enfrentarse a la crisis migratoria de los cayucos en las Islas Canarias, no se disponía de ningún buque oceánico con el que afrontar el reto.

Por aquel entonces, la nota oficial lo declaraba como buque de altura, y que pronto se vería acompañado por otra unidad adquirida de oportunidad, el añoso supply Britannia Uno, que se convertía en el buque oceánico Río Tajo en 2008, año en el que se encargaba a Astilleros Gondán la primera unidad oceánica construida para el SEMAR, el patrullero Río Segura de 73 metros de eslora.

Lo más reseñable a nivel operativo, de entre su discreto cuadro de características, son las dos embarcaciones semirrígidas de 7,7 metros con las que cuenta, así como la casi testimonial cubierta de vuelo que cierra a popa del buque y su gran autonomía.

El Río Miño, con su proa, alta y en escalón, está diseñada para remontar las olas oceánicas de los océanos Pacífico e Indico, haciendo que las del Mare Nostrum, que son más cortas y seguidas, provocan que su castillo y combés sean muy húmedos al embestir el oleaje cuando hay temporal.

Desde que entró en servicio con la Guardia Civil en el 2007, la patrullera Río Miño ha ido acumulando un extenso historial operacional, como su misión inaugural en el Senegal ese mismo año para ayudar en el control de la inmigración ilegal.

El 27 de agosto de 2014, en aguas internacionales y a la altura de Portugal, interceptó al velero alquilado en Valencia Pandora Lys que tripulado por tres personas, transportaba con destino a Galicia 800 kg de cocaína a bordo.

El 11 de septiembre de 2014, cerca de Melilla, interceptó un yate que navegaba con rumbo a costas españolar y transportaba 300 kg de hachís a bordo.

A finales de noviembre 2014, participó en una operación conjunta con un buque de la Guardia de Finanza de Italia en la que se interceptó un pesquero de bandera egipcia frente a la isla de Cerdeña, procedente de Marruecos y con rumbo a la costa italiana, que transportaba 15 toneladas de hachís, de las que solo se pudieron aprehender unos 1600 kg al hundirse la embarcación, hundida por sus tripulantes

En 2018, el «Río Miño» rescató a 1.412 inmigrantes irregulares en 31 embarcaciones.

En la actualidad la patrullera Río Miño sigue dedicándose a la prevención y lucha contra el narcotráfico, el tráfico ilegal de personas y el control de los recursos pesqueros y medioambientales.

El Rio Miño cumple sus últimas misiones en el mar, puesto que el mismo astillero Armón Vigo, está realizando la construcción de su sustituto mediante un contrato de 35 millones de euros.

La nueva construcción, más grande y potente, estará equipada también con un helipuerto y dispondrá de una zona destinada al salvamento de personas en peligro, sobre todo, migrantes.

07 de junio de 2025 Gijón



El patrullero oceánico “Río Miño” (IMO 8410471), del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, ha rendido su última singladura en el puerto de El Musel (Asturias), donde será desguazado a cargo de DDR Vessels XXI, una de las dos empresas españolas autorizadas por la CE para el desguace de buques.

En septiembre próximo será relevado por el nuevo patrullero oceánico “Duque de Ahumada”, que se encuentra en avanzado estado de armamento a flote en Astilleros Armón Vigo.

En los últimos años el patrullero “Río Miño” ha tenido su base en el puerto de Cádiz, con área de vigilancia en la zona del Estrecho —en una etapa anterior estuvo en Canarias— y en función de los acuerdos que tiene la Guardia Civil con diversas administraciones, subía una vez al año al Cantábrico como apoyo de las labores de inspección de la flota pesquera durante la campaña de la caballa.

Adaptado para su misión en Astilleros Armón Burela, en 2007 se incorporó al Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SEMAR) y tiene una larga hoja de servicios en África Occidental, Canarias, Portugal, Estrecho y Alborán, con el apoyo de sus embarcaciones auxiliares.

SEMAR / Puente de mando