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1621 Holandeses

Se situó don Fadrique cruzando el estrecho de Gibraltar, el 10 de agosto de 1621 aparecieron en el horizonte las velas enemigas, no había llegado los refuerzos demandados, por lo que solo contaba con siete de sus galeones más dos pataches, contra la escuadra holandesa compuesta de no menos de veintiséis (1) galeones bien armados y unos treinta mercantes algunos de ellos armados. El almirante holandés al ver la poca fuerza que se le ofrecía no dudo en adoptar la formación de media luna, dejando a su popa a los mercantes, con la orden de aprovechar el fragor del combate en el que todos los enemigos estarían ocupados, ellos debían pasar fuera de su alcance poniéndose a salvo.

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(1) Y la que lleva el título «Victoria que el Armada Real de que es general D. Fadrique de Toledo tuvo en el Estrecho con nueve Naos de su escuadra contra 26 de olandeses, que venian de Levante…» Sevilla, 1621, relacionado en la Colección de Navarrete, en su tomo XXXVIII. Existe en la misma relación otro libro pero aumenta el número de bajeles enemigos con el siguiente título: «Relación verdadera de la victoria que tuvo D. Fadrique de Toledo Ossorio, Capitán General de la Armada y del exército del mar Océano, contra treynta y un navíos de Olandeses en el Estrecho de Gibraltar.»
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Don Fadrique dispuso a sus galeones separados para evitar escaparan los enemigos, advirtiendo que el combate sería muy duro por la inferioridad, pero que se les podría parar o al menos hacer mucho daño. La capitana de España era conocida por su alias de La Doncella, pues era un galeón nuevo y todavía no había entrado en fuego y otro de sus galeones, conocido por el alias de El Atalaya, por ser uno de los más veleros y hermosos, tanto que siempre era el encargado de separarse de la escuadra y servir de aviso de ella.


Por la diferencia de número cada buque español pronto se vio rodeado de dos o tres enemigos, pero la capitana en poco tiempo echó al fondo dos de los más poderosos enemigos, mientras El Atalaya siguió por el mismo rumbo y también muy pronto echa a pique otros dos, mientras el resto de la Armada consiguen hacer dos asaltos y tomar a otros dos que fueron rendidos, al ver esto los holandeses decidieron salir cada uno por donde pudo, pues los españoles solo habían sufrido daños pero ninguna pérdida. Así con sus dos presas arribó en olor de multitud a la bahía de Cádiz, aumentando al saberse que otros cuatro fueron hundidos.


Por los méritos contraídos con fecha del 24 de agosto por una Real cédula lo gratifica S. M., con el título de Capitán General de la Gente de Guerra del Reino de Portugal, autorizándole al mismo tiempo a gratificar con pensiones dinerarias a todos los que considerase haberse distinguido en el combate.



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