.


Navío de 58-62 cañones construido en el astillero de Guayaquil en 1756 y entregado al año siguiente. Gervasio de Artiñado menciona que fue realizado por el constructor Bonet en 1768 (es un claro error de nombre y año). Permaneció seis años en el astillero, utilizándose para su construcción las maderas de la fragata de 50 cañones Esperanza. Tuvo un diseño inadecuado, resultando un navío de deficientes cualidades marineras. Fue botado con cinco codos menos de eslora y dos codos más de manga, según el proyecto original. Entaba armado con 24 cañones de 18 libras, 26 de 12 libras, 2 de 8, 6 de 6, 4 pedreros de 3 libras y 10 esmeriles (dato de 1777). Su nombre era San José, más conocido por su alias de El Peruano.



En 1761 fondeó en Valparaíso para que embarcara a bordo el gobernador de Chile don Manuel de Amat y llevarlo a El Callao, al ser nombrado virrey del Perú. Entró en este último puerto el 12 de octubre de 1761.



En 1763 zarpa de Cádiz rumbo a Veracruz al mando del capitán de fragata don Joaquín de Olivares y Centeno, pasando por La Habana. Ese mismo año, de vuelta a las aguas del Pacífico, zarpa de El Callao por orden del virrey del Perú don Manuel de Amat para llevar cañones y otros pertrechos a otros puertos y localidades como Luma, Valparaiso, Chiloé, Guayaquil, Santiago y Panamá, acompañado de las fragatas Hermiona y Liebre.



El 28 de octubre de 1767 salió de El Callao con los buques Famosa, Ventura, Águila, Matamoros y Toscano para traer a Cádiz 6.588.367 pesos, además de llevar un centenar de jesuitas, 25 de ellos a bordo del Peruano, al mando del capitán de fragata don Juan Bautista Bonet, haciendo escala en Valparaíso, a cuyo puerto llegó el 30 de noviembre. Zarpó de Valparaíso el 20 de enero de 1768.



.

.


Regresó de nuevo a las costas del Pacífico en octubre de 1770, llevando a bordo doce cañones de hierro de 24 libras y diez mil balas de ese calibre para la defensa de aquellas costas.



En 1771 llegó a Cádiz desde el puerto de El Callao. Regresó al Pacífico el mismo año al mando del brigadier don José de Somaglia, encontrándose en aquellas aguas en 1773. Regresó a Cádiz en abril de 1777 al mando del brigadier don José Antonio Mozo.



El 4 de noviembre de 1777, al mando del capitán de navío don José de Córdova y Ramos, zarpa de Cádiz hacia el Pacífico. Debía de haber zarpado a partir del 17 de octubre pero las tormentas en aguas gaditanas retrasaron su salida. Llegó a El Callao, después de seis meses de navegación, el 18 de abril de 1778. Su misión era científica al llevar a los botánicos don Hipólito Ruiz y don José Antonio Pavón para el estudio de la flora peruana, además de llevar 4.000 quintales de azogues y otras mercancías.



La guerra comenzada con los británicos a finales de junio de 1779 le sorprendió en el Pacífico, donde efectuó cruceros de vigilancia, junto a los navíos San Pedro Alcántara y América y la fragata Santa Paula, que son encuadrados en la Armada del mar del Sur, al mando del capitán de navío don Antonio Bacaro, nombrado en 1779, ascendido al poco a brigadier. Al llegar la paz en 1783 se trasladó a Lima con el fin de habilitarse para el regreso a España con caudales y frutos en unión del navío San Pedro de Alcántara y la fragata Santa Paula. Salieron de El Callao el 13 de abril de 1784. Se separaron el 14 de mayo, pues una serie de averías obligaron al navío Peruano, que seguía al mando de José de Córdoba, a entrar en Río de Janeiro el 4 de julio. La fragata Santa Paula también había tenido que entrar por averías el 27 de septiembre en el mismo puerto portugués. Finalmente llega a Cádiz el 21 de febrero de 1785.


Vendido en 1790. Su baja en la Armada pudo haberse realizado años antes.





.