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Botado en Guarnizo en 1768 y construido por Gautier. De la misma serie que el San Juan Nepomuceno (ver historial de este navío).



En 1769, al mando del capitán de navío don Felipe González Haedo, zarpa de Cádiz con tropas rumbo al Perú, llegando el 20 de mayo de 1770. Acompañado por la fragata Santa Rosalía, al mando del capitán de fragata don Antonio Domonte, zarpa de El Callao el 10 de noviembre de 1770 para explorar las costas e islas descubiertas años antes; se trata de la isla de Pascua, llegando el 15 de noviembre y de la cual tomaron posesión y llamaron isla de San Carlos. Ambos buques regresaron a El Callao a mediados de 1771.



El 18 de enero de 1772 zarpa de El Callao con los navíos Astuto y Septentrión y las fragatas Liebre y Santa Rosalía con un cargamento de oro y plata, 7.992.043 pesos fuertes y otros géneros, llegando a Cádiz en junio de ese año. En 1777 se encontraba en aguas del cabo de San Vicente en misiones de corso con la escuadra del teniente general don Miguel José Gastón de Iriarte.



En 1777 zarpa rumbo a La Habana y se incorpora a la escuadra al mando del teniente general don Juan Bautista Bonet. Con el navío Ángel de la Guarda y las fragatas Santa Cecilia y Santa Bárbara zarpan de La Habana para ir a su encuentro y dar escolta a la Flota de Nueva España al mando de don Antonio de Ulloa, entrando en La Habana el 13 de febrero. Los dos navíos y las dos fragatas se incorporan a la Flota de Ulloa, zarpando de La Habana el 9 de marzo de 1778 y llegan a Cádiz el 29 de junio de ese año (ver navío España).



Cuando comienza la guerra con Gran Bretaña en junio de 1779, pertenece a la escuadra del teniente general don Luis de Córdoba con base en Cádiz. Zarpa con esta escuadra rumbo al Canal de la Mancha. Estando en aguas gallegas, donde se unen las escuadras española y francesa, el San Lorenzo es destinado a patrullar la costa portuguesa, en torno a Lisboa y Oporto con la división del capitán de navío Mendizabal. A mediados de septiembre dan caza a un convoy británico salido de Lisboa con destino a puertos británicos. Estaba escoltado por el navío Chatham, el cual consigue regresar a Lisboa.

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Después de tres meses en aguas de la costa portuguesa, a primeros de octubre de 1779 regresa a Cádiz y se incorpora la noche del 13 de octubre a la escuadra de don Juan de Lángara para el bloqueo de Gibraltar. Con la escuadra de Lángara estuvo en la batalla del cabo de Santa María el 16 de enero de 1780 al mando del capitán de navío don Juan Araoz (ver navío Real Fénix). Debido a su excelente marcha consiguió, al igual que el San Agustín, zafarse de los navíos británicos de Rodney, llegando a Cádiz al día siguiente, por lo tanto no tomó parte en el combate.



En los años posteriores se encuentra en la escuadra del teniente general don Luis de Córdoba basada en Cádiz, participando en otras campañas en el Canal de La Mancha y en la batalla de Cabo Espartel el 22 de octubre de 1782, donde tiene 7 heridos entre la tripulación.



En agosto de 1783 participa en el bombardeo de la plaza de Argel con la escuadra del teniente general don Antonio Barceló (ver navío Terrible).



Al mando del capitán de navío don José Serrano Valdenebro se encuentra en 1789 en la escuadra de evoluciones del mando del don Félix Ignacio de Tejada, compuesta por otros cuatro navíos, seis fragatas y dos bergantines.



En 1790 se integra en la escuadra del teniente general don José Solano Bote, marqués de Socorro, formada en Cádiz por los incidentes de Nootka con los británicos, al mando del capitán de navío don Tomás de Ugarte.



El 11 de julio de 1793 zarpa de Cádiz al mando del capitán de navío don Pedro Carriazo con la escuadra del teniente general don Gabriel de Aristizabal rumbo a América. El 29 de enero de 1794, al mando del capitán don Tomás de Ugarte, se encuentra en la toma a los franceses del fuerte Delfín (Guarico).



El 29 de marzo de 1794 entra en Cádiz al mando del capitán Ugarte procedente de La Habana con pliegos.



Ese mismo año de 1794 regresa de nuevo al Caribe y se incorpora a la escuadra de Aristizabal. Es enviado a Veracruz para buscar caudales, siendo 700 pesos los entregados a la escuadra en La Habana. El 13 de febrero de 1794 zarpa de La Habana para par escolta al navío San Pedro y la fragata Ceres con quince millones de pesos hasta Cádiz.



En diciembre de 1795, todavía al mando del capitán Ugarte, traslada el general Aristizabal los restos de Cristóbal Colón de Santo Domingo a La Habana, a donde llega el 15 de enero de 1796.

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El 6 de junio de 1797 zarpa de La Habana rumbo a Veracruz al mando de Ugarte con otros tres buques, las fragatas Anfitrite, al mando de don Casimiro de la Madrid, y Tetis, al mando de don Juan de Mendoza y Moscoso, y la goleta Elisabet. Según instrucciones del comandante de Marina de La Habana don Juan de Azara, debía recorrer la costa de Honduras y expulsar a los británicos establecidos en la costa, además de reconquistar la isla de Roatán. Se auxilió el puerto de Trujillo, donde es rechazado un ataque enemigo, causando once muertos y cuatro heridos. Dejó Ugarte una lancha armada con un cañón de a 18 libras en Trujillo y destacó a Omoa a los bergantines de la división San Antonio y Príncipe, que quedaron a las órdenes del presidente de Guatemala.



El 30 de junio, después de desestimar un ataque a Wallis, pone rumbo a La Habana, capturando en el cabo San Antonio la goleta británica Deleyre y detiene a dos balandras. En el mes de julio se encontraba de nuevo en Veracruz. El 25 de diciembre de 1797 zarpa de Veracruz al mando del capitán de fragata don Martín de Funes, su anterior comandante Ugarte había sido destinado como comandante de Marina de El Callao. Zarpa con su división, fragatas Anfitrite y Tetis y goleta Elisabet, y se le agrega la fragata Minerva rumbo a La Habana con el situado, 1.610.785 pesos, y 310 quintales de pólvora, mientras que las mercantes La Paloma y Esperanza y la goleta Diligencia llevan 1.800 quintales de pólvora. La fragata Paloma tuvo que volver a Veracruz al día siguiente de la salida al hacer seis pulgadas de agua por hora. Para su escolta hasta el puerto cubano habían zarpado el 15 de diciembre de La Habana el navío Ángel de la Guarda y las fragatas Juno y Nuestra Señora de la O.



A mediados de 1805 se encontraba desarmado en La Habana, pasando a entrar en dique para quedar alistado a finales de marzo de 1806 y comenzar a patrullar la entrada del puerto.



Al mando del capitán de navío don José Quevedo zarpa de Cádiz el 25 de abril de 1809 para llevar 500 marineros franceses prisioneros de la escuadra de Rosilly a Santa Cruz de Tenerife, a donde llega el 11 de mayo, desembarcan a los prisioneros dos días más tarde.



El 18 de marzo zarpa de Cádiz rumbo a La Habana, a donde llega el 7 de julio con el teniente general don Ignacio María de Álava como pasajero, pues el día 15 de julio se hizo cargo del apostadero. Abandonado en el arsenal de La Habana en 1815.

Capitan, supongo que se refiere al 18 de marzo de 1810?

¿Todos los navios de la "serie" del Nepomuceno, fueron construidos en Guarnizo por el asentista don Manuel de Zubiría, según un contrato firmado el 15 de junio de 1763?

Gracias por las puntualizaciones!

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A todas las preguntas la respuesta es sí. Como ya sabrás Zubiría tenía firmado un contrato para la construcción de seis navíos y cuatro fragatas según el método de Jorge Juan y tomando como modelo los anteriores navíos construidos por Isla y Donesteve. Con la llegada de Gautier se paralizó el proyecto y se realizaron según su método.

Un placer volver a saludarte.


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Mi enhorabuena por su trabajo, muy interesante y sacrificado. Merece usted el "nick" que se ha puesto.

Me uno a esa enhorabuena