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El día seis de septiembre del año de 1732, nació en Cádiz, fueron sus padres D. Diego Tofiño de San Miguel, natural de Villanueva de la Serena y de Doña Juana Vandewalle y Guzmán, que era natural de Cádiz.



Quedó huérfano de madre y padre a la temprana edad de doce años, quedando al cuidado de una hermana y al de un tío eclesiástico en Extremadura.



Por mediación de su tío, pidió y se le otorgó, la dispensa de edad para ingresar como cadete de guardias españolas.



Pero no pudiendo sostenerse con el brillo necesario en tan distinguido cuerpo, en el año de 1750, solicitó pasar al regimiento de Murcia.



En el día nueve del mes de septiembre del año de 1752, se le ascendió a subteniente, siendo ascendido a teniente el día veinticuatro de abril del año de 1754, siendo nombrado a los cuarenta y dos días como ayudante del regimiento; después pasó al regimiento de Soria, con el mismo grado.



Estando en casa de su tío no había podido aprender el arte de Nebrija a pesar del rigor de los castigos, pero en cambio en el regimiento, y por sí sólo fue capaz de aprenderse los quince libros de Euclides.



En el año de 1751, asistió por su demostrada afición al estudio a los cursos de la academia que el Marqués de la Ensenada abrió en la ciudad de Cádiz, estando esta a cargo de oficiales del arma de artillería.
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Se entregó apasionadamente al estudio de la física experimental y escribió un interesante y voluminoso cuaderno con observaciones especialmente relativas a la máquina neumática.



Su nuevo destino le llevó a la ciudad de Segovia, y allí tuvo la ocasión, que no desperdició de perfeccionar sus conocimientos, con el trato que le dispensaba el padre Isla y el frecuentar la biblioteca del ilustrado conde de Mansilla, del cual se había granjeado el trato y la amistad.



Por sus conocimientos, el día dieciocho de noviembre del año de 1755, fue elegido para tercer maestro de matemáticas de la Academia de Guardiamarinas, habiendo sido elegido por don Jorge Juan, se le asignó con doce mil reales de sueldo y sin dejar de pertenecer como teniente del regimiento de Soria.



El día veintiocho de julio del año de 1757, dejó el ejército y pasó a la Armada, donde se le concedió el grado de alférez de navío.



El día tres de septiembre del año de 1767 se le ascendió a teniente de fragata y en el mismo año, el día once de noviembre, se le volvió a ascender a teniente de navío, siendo nombrado segundo maestro de la Academia y director de ella el día seis de agosto del año de 1768, contando en esos momentos con treinta y seis años de edad.



El día uno de junio del año de 1773, se le ascendió a capitán de fragata, confirmándosele en el cargo y a partir del año de 1776, cuando fueron creadas las Academias de guardiamarinas de El Ferrol y Cartagena, se le encomendó la dirección de las tres; lo que motivó que se le ascendiera el día diecisiete de febrero del año de 1776 a capitán de navío graduado, siéndole dado en propiedad el día trece de mayo del año de 1779, sucesivamente fue ascendiendo a brigadier, el día quince de noviembre del año de 1784 y a jefe de escuadra, el día diecinueve de septiembre del año de 1789.
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Cesó en la dirección de las Academias el día diecinueve de octubre del año de 1789, un mes después de su último ascenso.



Durante el transcurso del tiempo en el que estuvo en la dirección de las Academias, se ocupó en las observaciones astronómicas y escribió libros para mejorar la enseñanza de los guardiamarinas.



Cuando fue trasladada a San Fernando la Academia y la Compañía de guardiamarinas, se pasaba las noches en el observatorio, que también había sido trasladado, regresando al amanecer y al comenzar el día, emprendía otra vez todas sus tareas.



Los astrónomos Pengre, Fleurin, Borda, y Verdun de la Cruese, que fueron visitantes del Observatorio, lo mencionan en sus escritos muy encomiásticamente a su director, y lo mismo sucede con el célebre Lalande en la introducción de su famosa obra <<Astronomía>>.



No era de los que se quedaba quieto, en cuanto sus obligaciones se lo permitían, con cualquier excusa válida se hacía a la mar, aprovechando sobre todo las ocasiones en las que no habían urgencias y en las del periodo de las vacaciones.



No se quiso perder la ocasión, en que la escuadra al mando del general don Juan José Navarro, marqués de la Victoria, viajó a Nápoles para traer a España a su nuevo rey don Carlos III y su Real familia; también aprovecho otras ocasiones, para realizar observaciones y navegaciones; en el año de 1782, participó en el memorable bombardeo del peñón de Gibraltar, haciéndolo en calidad de ayudante del duque de Crillón.
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Entre los año de 1783 y 1788, se ocupo, auxiliado por los oficiales discípulos suyos, de los prolijos reconocimientos, sondas y demarcaciones de todos los puertos y costas de España y su correspondiente de África, y en la consiguiente formación del <<Gran Atlas Marítimo de las Costas de España>>, que después le proporcionó una gran fama.



Para la realización de éste Atlas, se le dio el mando de una división compuesta: por la fragata Santa Perpetua y los bergantines Vivo y Natalia.



Alcanzó tal renombre sus conocimientos, que era consultado en todo proyecto científico, que estuvieran a cargo de las secretarias de Estado, Hacienda y Marina.



Fue académico de mérito de la Real Academia de la Historia, de las Academias de Ciencias de Lisboa y de la de París e individuo de las Sociedades de Amigos del país de las Mallorca y Vascongadas.



Falleció, el día quince de enero del año de 1795, en la Isla de León; San Fernando, a los sesenta y dos años, cuatro meses y nueve días de edad.



El día tres de noviembre del año de 1798, leyó su elogio en dicha sociedad de Mallorca su individuo don Mariano Antonio Togores, que también había sido, como guardiamarina de la compañía de Cádiz, discípulo del señor Tofiño







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Nació en Cádiz, el 6 de septiembre de 1732, en una familia formada por Diego Tofiño de San Miguel, de profesión militar y natural de Villanueva de la Serena, y Juana Vandewalle y Guzmán, natural de Cádiz. Aunque ingresó inicialmente en el Ejército, desarrolló casi toda su carrera militar como oficial de la Armada.

Su actividad científica le llevó a ser reconocido internacionalmente como uno de los más destacados científicos españoles, siendo citados sus trabajos por reputados astrónomos como Lalande o Verdun de la Crenne. A lo largo de su vida, ingresó en diversas academias y sociedades científicas, como la Real Academia de la Historia, la Sociedad Vascongada de Amigos del País, la Sociedad de Amigos del País de Palma de Mallorca, la Academia de Ciencias de Lisboa y la Academia de Ciencias de París (como corresponsal de Jean-Charles Borda).

Ingresó en el Ejército tras concedérsele en 1747 una plaza de cadete en las Guardias Españolas, a raíz de la muerte de su padre en 1746 durante una acción bélica en Italia. Su primer destino fue el Regimiento de Murcia, donde ascendería sucesivamente a alférez y a teniente. En 1751, aprovechando un permiso especial concedido por el marqués de la Ensenada, cursó estudios en la Academia de Artillería de Cádiz. Unos años más tarde, poco tiempo después de su ascenso a teniente de infantería, sería destinado al Regimiento de Soria. De esta ciudad pasó, durante un breve período de tiempo, a la de Segovia, antes de ser nombrado por Jorge Juan tercer maestro de matemáticas de la Academia de Guardiamarinas de Cádiz, cargo docente con el que Vicente Tofiño iniciaría su fructífera relación con la Armada.

Dos años después de su llegada a Cádiz, en 1757, Vicente Tofiño ingresó definitivamente en la Armada con el grado de teniente de fragata. A partir de entonces dedicaría su actividad profesional a las tareas docentes de la Academia, de la que llegaría a ostentar el cargo de director a partir de 1768.

No obstante, su cargo de director de la Academia de Guardiamarinas no le impidió navegar cada vez que tuvo ocasión. En 1759 estuvo embarcado en el navío Guerrero, participando en el viaje que condujo a Carlos III desde Nápoles hasta España. Unos años después formó parte de la dotación del navío Santiago la España, mandado por José de Córdoba, en una campaña por el Canal de la Mancha. Durante la expedición de Argel, desarrollada en 1775 y dirigida por el conde de O’Reilly, fue como segundo comandante en la fragata Palas, mandada por Gonzalo de Cañas. Poco después, en 1780 embarcaría durante unos meses en el navío San Vicente, mandado por Francisco Gil e integrado en la escuadra combinada. Por último, en 1872 participó en el sitio de Gibraltar como ayudante del duque de Crillón, teniendo a su cargo el reconocimiento de los lugares donde habrían de colocarse las baterías flotantes para atacar las fortificaciones británicas.

Murió Tofiño a los sesenta y dos años de edad en la Isla de León, hoy San Fernando, el 15 de enero de 1795, después de toda una vida dedicada a la enseñanza, a la astronomía y a la hidrografía.

Ascensos de Vicente Tofiño de San Miguel:

Cadete de Guardias Españolas en 1747; Alférez de Infantería en 1752; Teniente de Infantería en 1754; Teniente de Fragata en 1757; Teniente de Navío en 1767; Capitán de Fragata graduado en 1776; Capitán de Navío graduado en 1779; Capitán de Navío en 1784; Jefe de Escuadra en 1789.

Destinos de mar de Vicente Tofiño de San Miguel:

Navío Guerrero en 1759; Navío Santiago la España en 1763; Fragata Palas en 1775; Navío San Vicente en 1780; Sitio de Gibraltar en 1782; Campaña hidrográfica en 1783, 1784, 1785, 1786, 1787 y 1788.


Fuentes:

*.- Marinos Cartógrafos Españoles. Libro editado por Prosegur, en colaboración con la Sociedad Geográfica Española.

Disculpa Ensenada. Mire de la primera página a la última para ver si ya teníamos la biografía de este marino. Es obvio que no mire bien.

Un saludo.