Que estando el capitan Pedro Ignacio de Goicoechea (no confundir con Pedro de Garaycoechea aunque tambien tuvo gran exito como corsario) con su fragata de 24 cañones, Nuestra Señora del Carmen en las cercanias de la costa portuguesa avisto un bergantín.

Se trata del bergantín, Townshend de 100 Tn, 10 cañones y abundante numero de fusiles y armas blancas para su defensa. Pero su mejor defensa era su velocidad pues era uno de los bergantines mas rapidos de Inglaterra y por eso, ademas de sus labores comerciales, tambien actuaba como aviso entre Inglaterra y Lisboa.

Sigamos la narración desde el punto de vista español:

El Townshend, al acercarse la fragata española vira para tomar el viento y larga su gallardete a la vez que inicia una serie de disparos sin bala, salvas de honor, para burlarse de la fragata española. La fragata española fuerza la vela y le va ganando terreno. El Townshend apareja la bolina para ganar mas velocidad pero la fragata española hace lo mismo resultando haciendo que la distancia se acorte aún mas rapido. La fragata empieza a usar sus cañones de caza ...

Pasemos ahora al punto de vista ingles:

Maldiciendo la hora en que dejo atras al bergantín de escolta Fly su bergantín empieza a recibir el fuego artillero dirigido a malmeter la arboladura. El capitan Jhon Cooper espera poder dispararle y tumbarle algún palo para poder huir.

Borda a borda ambos se disparan, y el Townshend le tumba un mastelero asi como otros daños en la arboladura pero no es suficiente. La artilleria del Nuestra Señora del Carmen se cobra con intereses los daños abriendole varios boquetes a flor de agua y destrozando el velamen. La metralla provoca dos muertos y seis heridos y muchos otros marineros, junto al oficial de artilleria, se refugian bajo el bote de cubierta.

Jhon Cooper da la orden de rendirse pero antes se dirige al camarote donde coge los pliegos y abre la ventana. Varios españoles que ven la acción le apuntan desde la cubierta y amenazan con disparar.

John Cooper tira los pliegos al mar pero los españoles alaban su valentia y no disparan.

Internado en San Sebastian se les permite moverse libremente a él y a su segundo por el pueblo, quedando internada el resto de la tripulación.

Constia su carga en:

55 talequitos de dinero
- 6637 monedas de oro de 10 pesos y 12 gramos cada una
- 49 monedas de oro de 21 pesos
- 22 monedas de oro de 5 pesos y 6 gramos
- 31 idem de oro de 2 pesos
- 5 barras de oro de 98 marcos y medio (113,275 Kgs en total)
- 355 monedas de plata

Con un valor total de la presa estimado en 90.000 pesos.

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Lo ya comentado, de estos pequeños combates, los britis casi siempre llevaban la peor parte, esta es la prueba del porque en grandes movimientos navales, nos costaba más ganar, porque el individualismo español no era libre y estaba sujeto a normas de cooperación y apoyo a los compañeros.

Es nuestro sino.

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Ahi no puedo estar de acuerdo con vd.

Despues de leer decenas sino cientos de acciones amigas y enemigas no era nuestro valor sino una ferrea disciplina y entrenamiento.
Y esto se conseguia con tripulaciones que estaban 360 de 365 dias en el mar.

Saludos!
Andreu

No vamos a discutir. Pero después de leer unos cuantos libros de nuestra historia naval, por cada combate perdido por escuadras españolas, hay cientos de particulares ganados.

La única diferencia es que depende de que siglo hablemos, porque por desgracia hubo alguno, que gracias a los gobernantes, ni siquiera teníamos cascos para salir a combatir.

Pero eso sí, cada cual puede sacar sus conclusiones, que todas son muy respetables.

Un saludo.
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