D. Juan Antonio Blanco Paz (*1890 +1965). (7).
Nacido en Santa María de Neda (La Coruña), el 19 de febrero de 1890, ingresó a los 16 años en la Armada como Aprendiz de Marinero el 1 de septiembre de 1906. Los empleos alcanzados por él, fueron:
Aprendiz de marinero el 01/09/1906.
Marinero de 2ª.
Marinero de 1ª.
Preferente.
Cabo de Mar.
Segundo Contramaestre el 05/01/1914.
Contramaestre Primero en 1931 con asimilación a Alférez de Fragata.
Teniente de Navío, el 04/04/1943.
Capitán de Corbeta, el 15/01/1948.
Capitán de Fragata, el 30/06/1951, de acuerdo con los beneficios concedidos por el art. 32 del Reglamento de la Real y Militar Orden de San Fernando.
Pasó al retiro extraordinario en 1931 situación en la que estuvo hasta el 18 de julio de 1936, fecha en la que al estallar la guerra civil, fue nombrado Alcalde de Puerto Real por el Almirante D. Juan Cervera Valderrama y cargo en el que estuvo hasta pocas fechas después de finalizar dicha contienda, pasando a prestar servicios militares a las órdenes del Capitán General del Departamento Marítimo de Cádiz.
Prestó servicios a bordo de los buques:
Corbeta “Villa de Bilbao”.
Corbeta “Nautilus”.
Acorazado “Pelayo”.
Crucero “Extremadura”.
Remolcador “A”.
Transporte de guerra “Almirante Lobo”.
Torpedero “Bonifaz”.
Carabela “Santa María”, reproducción exacta de la “Capitana” que llevó Colón en el descubrimiento de “las Indias Occidentales”.
Destructor “Churruca”.
Estaba en posesión de las condecoraciones siguientes:
Cruz de la Real y Militar Orden de San Fernando.
Medalla Militar de Marruecos.
Cruz de plata del Mérito Naval.
Medalla de la Campaña.
Cruz de San Hermenegildo.
Placa de San Hermenegildo.
El Capitán de Fragata D. Antonio Blanco Paz, falleció el 27 de agosto de 1965 y su esposa doña María Fernández Osuna, el 25 de noviembre de 1967, con la que había contraído matrimonio en 1920, siendo la misma natural de Puerto Real (Cádiz) y perteneciente a una ilustre familia marinera (7).. De este matrimonio, al menos nacieron dos hijos varones, Antonio y Emilio Blanco Fernández (8).
La Cruz Laureada de San Fernando.
Como al Cabo de Mar D. Francisco Rodríguez Saleta y al Marinero de 1ª D. Baltasar López Pérez, le fue concedida la Cruz Laureada de la Real y Militar Orden de San Fernando, tras resolverse favorablemente el Expediente de Juicio Contradictorio instruído para esclarecer si era o no merecedor de la misma, por los méritos obtenidos y el comportamiento observado a bordo de la corbeta “Nautilus”, el 23 de diciembre de 1913, al verse sorprendida la misma por un fuerte temporal. La resolución favorable a tales hechos, decía los siguiente (textual), siendo firmada en Madrid el 19 de diciembre de 1914 por Echagüe:
“…El Cabo de Mar D. Juan Antonio Blanco Paz, a bordo de la corbeta “Nautilus” el 23 de diciembre de 1913, hallándose el referido buque a más de ochenta millas de tierra firme en el paralelo de Finisterre, se vió seriamente comprometido a causa del temporal, en cuyas circunstancias el mencionado fue uno de los tres primeros que voluntariamente se prestaron para subir a la arboladura, con el fin de degollar unas velas que comprometían la estabilidad del barco, faena de difícil éxito, que realizaron con eminente riesgo de sus vidas. Considerando los hechos comprendidos en el caso 25 del artículo 26 de la Ley de 18 de mayo de 1862, el Rey ha tenido a bien conceder al cabo de mar don Juan Antonio Blanco Paz (hoy segundo contramaestre) la Cruz de primera clase de la Real y Militar Orden de San Fernando…”
El hombre. (8).
Según recuerdan de su padre en una entrevista mantenida hace años y publicada en el fascículo de “España en sus héroes”, titulado “Cuatro laureados en la Nutilus”, D. Antonio Blanco Fernández y D. Emilio Blanco Fernández, recordaban a su padre como un hombre nada vanidoso, les contaba la gesta por él protagonizada en la corbeta “Nautilus” el 23 de diciembre de 1913, como una cosa normal, no erigiéndose como protagonista todo y sintiéndose ennoblecido por ella a pesar, que inculcó a sus hijos un profundo respeto por ella. Era un hombre de gran vocación por la mar.
Tenía dos aficiones a las cuales se dedicó una vez retirado y de forma extraordinaria de la Armada, la carpintería, teniendo un taller montado en su domicilio y a los pájaros, afición gracias a la cual tuvo una muy notable colección dedicándose también a la cría de los mismos.
Durante un tiempo, fue Presidente de la Asociación de Padres de Alumnos del colegio de La Salle. Corrían años difíciles durante la II República y más de una noche, cuentan sus hijos, la pasó su padre en el colegio en evitación de que los religiosos fuesen molestados.
Con el estallido de la guerra civil de 1936, D. Antonio Blanco, se puso rápidamente a las órdenes del Almirante don Juan Cervera Valderrama, su antiguo comandante en la “Nautilus”, con el que con el paso de los años a lo mismo que con sus hijos también Almirantes D. Juan, D. Luís y D. Pascual mantuvo una buena amistad, a lo mismo que con otros marinos ilustres como eran los hermanos Abarzuza, Moreno Fernández, Julio Guillén, etc…. La 1ª orden que recibió al estallido de la guerra civil, provinente del Almirante Cervera, fue el hacerse cargo de la Alcaldia de Puerto Real, sumiéndose en la responsabilidad del desempeño de la misma de tal forma, que según recordaban sus hijos, estuvo 15 días sin aparecer por su domicilio.
Era persona muy familiar, dedicándose en pleno a los suyos una vez se hubo retirado de la Armada en 1931, era un hombre entregado al bienestar de los demás, al orden y a los principios sociales en los que se desarrollaba la familia española de la época. Con el paso de los años, demostró ser una persona resignada y sufridora en el silencio ya que cuando le aquejó una grave enfermedad que acabó cobrándose su vida, los suyos jamás le escucharon la menor protesta y queja por ella, llevándola y sufriéndola interiormente. Cuando murió, el médico les comentó a sus hijos que D. Antonio Blanco Paz, debía de haber soportado horribles dolores, de los cuales, la familia en ningún momento le escuchó quejido alguno ignorando incluso que estaba enfermo.
De sus virtudes, sus hijos destacaban por un lado y relacionado con su enfermedad la resignación y capacidad de sufrimiento y por el otro, el sagrado sentido del deber (8), hombre listo, serio, sereno, que trataba a su gente con con diplomacia y discreción, pero no libre de severidad reconocidas a bordo (9).
D. Antonio Blanco Paz, fue un hombre sencillo, humilde, que tan pronto podía hablar de los pájaros que llevar a cabo actos heroicos, un hombre que sentía vocación por el mar y que amaba el bien, un hombre trabajador y amante de la justicia.
Fuentes
(1). “Francisco Navarrete y Ceniza”, “España en sus héroes”, “Cuatro laureadas en la “Nautilus” pág.892, Madrid 1969.
(2). “Con la familia del Laureado Navarrete”, “España en sus héroes”, “Cuatro laureadas en la “Nautilus” pág. 894, Madrid 1969.
(3). “Baltasar López Pérez”, “España en sus héroes”, “Cuatro laureadas en la “Nautilus”, pág.870, Madrid 1969.
(4). “Todoavante”, Historia Naval de España y países de habla hispana”, post firmado por el “Nick “Almirante Orfebre”.
(5). “Concello de Ponteceso”, página web del municipio en Internet y “Concello de Ponteceso”, “Personajes ilustres”, página web del municipio, en Internet.
(6). “Francisco Rodríguez Saleta”, “España en sus héroes”, “Cuatro laureados en la Nautilus”, pág.870. Madrid 1969.
(7). “Antonio Blanco Paz”, “España en sus héroes”, “Cuatro laureados en la Nautilus”, pág.872.Madrid 1969.
(8). “56 años después, con los hijos de Blanco Paz, laureado de la “Nautilus” de D. Antonio Gutierrez Lozano, “España en sus héroes”, “Cuatro laureados en la Nautilus”, pág.882. Madrid 1969.
(9). “Cháchara marinera en el “Concha”, “España en sus héroes”, pág. 866, “Cuantro laureados en la Nautilus”, Madrid 1969.
(10). “Vísperas de Nochebuena de 1913”, “España en sus héroes” “Cuatro laureados en la Nautilus”, Madrid, 1969.
(11). “Panteón de Marinos Ilustres” en Vikipédia, enciclopedia libre en Internet.
¡Un cordial saludo!
Hannes Hunger.
