Esta es la historia de un marino que no gano batallas, pero si gano su lugar en la historia.

Carlos domingo Antonio Genaro Cuarteroni nació en Cádiz en septiembre de 1816, hijo de un comerciante de la ciudad, Juan Cuarteron, originario del norte de Italia y casado con la española Ramona Fernadez de San Lucar de Barrameda. El matriminio tuvo 9 hijos, siendo Carlos el 4.
Carlos Cuarteroni, con apenas 13 años fue enviado a navegar en diversos buques mercantes por los mares de Filipinas y China, en 1829.
Vuelve a Cadix en 1831 para acceder al grado de 3º piloto que se el otorga en 1832.
En 1835 es ya 2º piloto, toma el mando del bergantín Cantabro con el que realiza 6 viajes por Filipinas, Hong Kong, Singapur, Canton.

Luego toma el mando de las fragatas Buen Suceso de 1838 hasta 1840, siguiendo por aguas orientales.
En 1841 se le concede el titulo de capitán graduado de la Marina Sutil de las islas y navega con la Bella Vascongada.

Con su dinero adquiere en Manila la goleta Mártires de Tong-King para ir a buscar perlas y carey por los mares de Oceanía con una tripulación básicamente de filipinos.
Luego se dedica a buscar los restos del brick inglés Christian, hundido en 1841 mientras hacia el trayecto Macao Bombay, cuyo cargamento de plata en su interior es enorme, tras 14 meses de búsqueda da con el pecio.
Cuarteroni reparte la fortuna entre los dueños del buque naufragado y su propia tripulación en 1845.

Regresa a España en 1846 donde decide tomar los habitos, hombre preocupado por sus semejantes, sobre todo de los presos a manos de los moros en Asia.
Harto que estaba a lo largo de sus numerosas travesías de ver a esclavos sometidos por los moros.
Como que es muy rico, decide usar su fortuna y tomar el hábito de la Orden Tercera de Trinitarios Redentores, para dedicarse al rescate de cautivos.

Inicialemente realiza sus misiones de liberación con el buque los Martires, pero en 1847 compra la goleta inglesa Lynx.
Empleo su fortuna para la liberación de numerosos esclavos en las islas de Filipinas y Borneo.

En 1849 esta en Roma, para presentar un proyecto de creación de nuevas misiones en Oceania Occidental.
Recibió de manos del Papa Pío IX las Sagradas Órdenes, cantando su primera misa en junio de 1854, asi mismo el Pontífice lo nombra prefecto apostólico de las misiones de Borneo.

En 1856, Cuarteroni compra dos buques para el rescate de esclavos, a la vez que manda construir iglesias en Labuán, Lose-Porin y Baranbany.

Su incesante labor permite la evangelizacion du numerosas partes de las Filipinas y de mas alla tambien.

Estando ya algo anciano, decide regresar a Cádiz, pasando por Roma para saludar al Papa León XIII. Falleció tres días después de llegar a Cadiz, el 9 de marzo de 1880.

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Amigo eusebio Gracias.


Siempre por los caminos de la Mar.


Un abrazo.
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