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Fecha actual 15 Nov 2024 05:47
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Los Portaaviones V
La Victoria Increíble Cualesquiera que fuesen las consecuencias a largo plazo de la Batalla del Mar del Coral, la situación inmediata para el mando del Pacífico era entonces de extremo peligro. Con el Yorktown averiado y el Saratoga sin entrar de nuevo en servicio tras sus reparaciones y modernización, sólo podía disponer del Hornet y Enterprise. USS Hornet USS Enterprise El gabinete de mensajes cifrados le seguía facilitando información del enemigo y por ella se sabía que los próximos movimientos de los japoneses iban a dirigirse hacia el Este, confiando en ocupar la isla de Midway, la más septentrional de la cadena Hawayana y hacia las islas Aleutianas. Todos los portaaviones por lo tanto recibieron orden de concentrarse en Pearl Harbour; pero no teniendo más que dos y de ellos uno con aviadores poco maduros para oponerse a los cinco de la experimentada fuerza de Nagumo y que hasta entonces no habían sido averiados, no hacían la presentación del panorama demasiado optimista. A esto se sumaba la falta de los acorazados rápidos de Nimitz para que acompañasen o apoyasen a los portaaviones, en tanto que la fuerza de acorazados rápidos de Yamamoto se había elevado a once unidades tras la incorporación del soberbio Y amato, el más moderno, el más grande y el más poderoso acorazado del mundo. IJN Yamato, A duras penas Nimitz podía disponer tan sólo del arma aérea, muy poco entrenada, que aún tenía en sus manos. Con ella se preparó para enfrentarse a la aviación enemiga. Los japoneses preparaban el despliegue de toda la Flota imperial en una extensa y compleja operación, muy de su estilo, llevada a cabo por un número de diversas agrupaciones separadas entre sí. Una formación de transporte compuesta de seis unidades de esta clase con escolta directa de destructores iba a conducir 2.500 hombres que habrían de ocupar la isla de Midway. Dando apoyo a esta agrupación iría una fuerza de apoyo formada por dos acorazados, cuatro cruceros y una flotilla de destructores y finalmente otra fuerza de apoyo en vanguardia de cuatro cruceros se adelantaría para bombardear la isla antes del desembarco. Todas estas agrupaciones y unidades componían la Fuerza de Ocupación. La Fuerza de Ataque, formada por los cuatro portaaviones de Nagumo disponibles, Akagi (insignia), Kaga, Hiryu y Soryu con una escolta de dos acorazados y cuatro cruceros, un crucero ligero y varios destructores estaba destinada a neutralizar las defensas de Midway mediante un ataque aéreo en la madrugada del 4 de junio y antes del desembarco. Vice Almirante Chuchi Nagumo en el Akagi IJN Akagi buque insignia de Nagumo El grueso de la flota, bajo el mando personal del almirante jefe en el Yamato, se componía de siete acorazados, dos cruceros, un crucero ligero y un número de destructores con el pequeño portaviones Zuiho y dos grupos de abastecimiento. IJN Zuiho Esta fuerza se mantendría a retarguardia en una posición central hasta que la flota norteamericana se decidiese a salir a la batalla. La ocupación de las islas Aleutianas de Kiska y Attu formaba parte integral del plan para la extensión del perímetro defensivo japonés, pero también iba a servir como diversión del principal objetivo, para entretener fuerzas norteamericanas alejadas del principal escenario de operaciones.
_________________ Secretario Justicia del Foro. Insignia en el crucero acorazado: Emperador Carlos V R. O. del 21 de febrero de 2015. Nunc Mínerva, postea palas (Primero la sabiduría, después la guerra), Lema del Arma de Ingenieros del ET Español
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21 Nov 2010 22:57 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Un movimiento más de diversión se iba a llevar a cabo el 3 de junio y consistía en un ataque aéreo a Dutch Harbour en las Aleutianas por una fuerza formada por los pequeños portaviones Ryujo y el Junyo, un portaviones éste de 27.500 toneladas recientemente incorporado y construido con el casco de un gran buque de pasaje y capaz de poner en servicio 48 aviones. IJN Ryujo IJN Junyo Ante la eventualidad de que los norteamericanos reaccionasen frente al ataque de las Aleutianas enviando allí parte de su flota, un grupo formado por cuatro de los acorazados del grueso de la flota sería desplegado hacia el Noroeste para interceptarlos. Con objeto de comunicar cualquier salida de los buques norteamericanos de Pearl Harbour hacia el Norte, una línea de vigilancia de submarinos se estableció al Nordeste de Midway desde el 3 al 7 de junio. Submarino japonés I-6 Un gran parte de este plan fue conocido por el alto mando norteamericano mediante el descifrado de los mensajes enemigos. Estaba claro que uno de los principales objetivos japoneses era el arrastrar al combate a la Flota norteamericana del Pacífico, evidentemente inferior. Para evitarlo la estrategia de Nimitz habría de ser la de aprovechar cualquier opor¬tunidad de efectuar ataques aislados, y a ello ayudó el erróneo despliegue de las fuerzas japonesas en agrupaciones dispersas. El 26 de mayo el Enterprise y el Hornet (Fuerza Operativa 16) llegaron a Pearl Harbour. Su comandante, el vicealmirante William F. Halsey, especialista en aviación, dado de baja por una enfermedad de la piel fue relevado por Raymond A. Spruance, prácticamente desconocido que no era aviador, y que había mandado anteriormente los cruceros de la Fuerza Operativa 16 Almirante Raymond A. Spruance El día 28 la Fuerza Operativa zarpó para situarse en una posición a la espera de los acontecimientos al Nordeste de Midway. En Pearl Harbour el Yorktown que había llegado el día 27 con averías y que para repararlas se pensaba habría de necesitar varias semanas se convirtió en un espectáculo sin precedente cuando los obreros e ingenieros del arsenal se lanzaron en tromba sobre él. Para el día 30 ya había sido suficientemente parcheado y estaba útil para entrar en combate saliendo como buque insignia de la Fuerza Operativa 17 para embarcar nuevas escuadrillas de aviones procedentes del averiado Saratoga, que elevaron a 73 el total de sus aviones. Las lecciones del Mar del Coral fueron aprendidas y la proporción de cazas, al igual que en la Fuerza Operativa 16, se elevó, llegando a 25 (27 en el Hornet y en el Enterprise). En la tarde del 2 de junio las dos fuerzas se reunieron bajo el mando del contralmirante Frank Fletcher, a bordo del Yorktown, después de haber burlado a la barrera de vigilancia submarina, ya que ésta no se estableció hasta el día siguiente. Ninguna noticia de la presencia de esta flota en aquella zona llegó al mando japonés, que desde el 26 de mayo había movido por separado sus distintas agrupaciones hacia los puntos previstos, confiando en que el secreto de su gran operación se había mantenido a ultranza.
_________________ Secretario Justicia del Foro. Insignia en el crucero acorazado: Emperador Carlos V R. O. del 21 de febrero de 2015. Nunc Mínerva, postea palas (Primero la sabiduría, después la guerra), Lema del Arma de Ingenieros del ET Español
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22 Nov 2010 19:59 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
En la isla de Midway se había concentrado una fuerza aérea considerable numéricamente, 17 bombarderos Fortalezas Volantes y 4 B-26 portatorpedos, todos del Ejército; 27 cazas (en su mayor parte anticuados Brewster Buffalos), 18 Dauntless y 12 bombarderos de reconocimiento Vought-Sikorsky Vindicator de la Infantería de Marina, así como seis de los nuevos aviones torpederos Grumman Avenger de la Marina se encontraban en tierra. Muchos de los pilotos estaban recién sueltos y ninguno había participado antes en combate real. Boeing B-17 “Fortaleza Volante” Martin B-26 “Marauder” Brewster “Buffalo” SBD “Dauntless” Vought-Sikorsky “Vindicator” Grumman “Avenger” Fuentes: De Trafalgar a nuestros días Vol IV, Editorial Delta // Navíos & Veleros, Editorial Planeta –Agostini // Portaviones, editorial San Martin por Donald Macintyre // La flota de alta mar Japonesa, editorial San Martin, por Richard Humble.//Brithis Aircraf 1939/45 Osprey. Chris Henry, Battle of the Coral Sea, Ed. Naval Institute Press// La Guerra Naval en el Pacífico, Luis de la Sierra- Ed. Juventud
Imágenes: fuentes anteriores, Wikipedia, Imperial Japanese Aircraft Carriers 1921-45, Profile Wars Ships, US Navy Aircrft 1923-45, Encyklopedia Okretov, Royal Navy, RAF Museun, Naval History, aircraftinformation, 24 flotilla,La Bancarella Aeronautica, Bundersarchiv, Departament of history naval, Naval historical center, dixiewing.org, Digital Colored Photogrpharchivos personales
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22 Nov 2010 20:11 |
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Beatriz de Palacios
Capitán de Navío Especialista
Registrado: 23 Sep 2010 18:47 Mensajes: 1093 Ubicación: madrid-cadiz-cordoba y otra vez madrid, y otros muchos lugares interesantes
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Re: Los Portaaviones V
Parece increíble que pudieran despegar en tan poca superficie y con la potencia (menor que la actual, desde luego) que entonces tenían los aviones!
Fué un buen invento el harrier, supongo!
_________________ Jefe de máquinas del crucero: Emperador Carlos V R. O. del 16 de noviembre de 2010. «Mas madera, que es la guerra. Más aceite, que esto vuela» (Don José Rodríguez Barba, fogonero maquinista del crucero Canarias, en pleno apresamiento del Mar Cantábrico, Guerra Civil Española 1936-1939)
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22 Nov 2010 20:16 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Sí, Jefe pero los Harrier no tienen las mismas prestaciones que un avión convencional, es la solución para países <pobres>
La falta de potencia no era tal con esos aviones, incluso algunos modelos estaban <sobraos>, ten en cuenta que en esa época no se les ayudaba con la catapulta en los despegues como ahora, y los actuales, sí andan con exceso de potencia pero son mucho más pesados que los de la II GM.
Saludos
Sotacómitre
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22 Nov 2010 20:41 |
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Orfebre
Capitán General
Registrado: 28 Abr 2008 11:35 Mensajes: 10641 Ubicación: Junto al Pisuerga
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Re: Los Portaaviones V
Diferencias hay muchas entre la aviación embarcada de esa época la actual y no solo en lo relativo a potencia y peso de as aeronaves.
Como ejemplo y dadas las dimensiones de los portaaviones de la SGM el Avenger (por ejemplo) podía ser considerado un STOL (despegue y aterrizaje corto)
Características aproximadas, como simple comparación
Peso vacio: 4.800 kg.
Peso máximo: 8.200 Kg. (al despegue)
Potencia motor : 1.900 Hp
Harrier AV 8B
Peso vacio: 6.336 Kg.
Despegue vertical: 8.600 Kg.
Despegue corto: 14.000 Kg.
El motor Pegasus tiene un empuje de 10.600 kg.
No tengo mucha seguridad en la diferencia entre medir la potencia en HP en un motor de pistones y la expresión en kilogramos de empuje de una turbina a reacción, pero seguro que alguien lo aclara
un saludo
Antonio
_________________ Secretario Técnico del Foro. Insignia en el crucero: Cristóbal Colón R. O. del 16 de septiembre de 2008 "Si vis pacem, para bellum"
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22 Nov 2010 23:12 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Había además una escuadrilla de bombarderos anfibios Catalina con base en la isla y esta fuerza, así como las Fortalezas, había estado reconociendo diariamente hasta una distancia de unos 1.100 kilómetros al Oeste y al Norte. Consolidated PBY “Catalina” Uno de estos Catalinas fue el que levantó la primera alarma de presencia enemiga cuando a primera hora del 3 de junio, fue descubierta la Fuerza de Transporte unos 1.000 kilómetros al Oeste, si bien su composición real no fue enteramente precisada. Cuando los bombarderos Fortalezas la interceptaron aquella misma tarde, atacándola, los inexpertos pilotos terrestres "identificaron" acorazados y cruceros, así como gran número de transportes. Sus bombas cayeron dispersas; pero ellos creyeron que habían alcanzado a varios barcos, dejando a un acorazado o crucero, así como un transporte, en llamas y a otro crucero averiado. Durante la noche el ataque se llevó a cabo con torpedos desde los Catalinas, tres de los cuales atacaron y lograron un impacto en un petrolero, causando pocos daños. Lejos, hacia el Norte, los planes japoneses para el día 3 de junio se habían desarrollado sin un solo contratiempo. Desde el Ryujo y el Junyo dos oleadas de bombarderos habían devastado Dutch Harbour. Pero si se pensaban que las noticias de estas operaciones iban a hacer distraer la atención del almirante Nimitz del área principal de operaciones, tentando a los acorazados norteamericanos para que entrasen en batalla con los cuatro acorazados japoneses destacados de cebo, se equivocaron por completo. Nimitz había enviado una formación de cruceros a las Aleutianas en el mes de mayo. Con esta fuerza el contralmirante Theobald, al mando de aquella zona, tendría que arreglárselas hasta que quedara decidida la batalla principal. Robert A. Theobald La escuadra de Nimitz, compuesta por acorazados lentos, fue retenida entre tanto en la costa de California. El Plan Midway de Yamamoto se inició también como estaba previsto. Ordenó a la fuerza de Nagumo lanzar al aire su fuerza aérea de ataque al amanecer del 4 de junio desde una posición situada a unos 400 kilómetros al Noroeste en Midway a la que se aproximó desde el Noroeste. Tuvo tanta suerte, que hasta una cubierta de nubes bajas se extendió sobre la ruta de la flota con escasa visibilidad hasta el atardecer del día 3, ocultando así a los portaviones de cualquier exploración. Incluso estaban aún sin ser descubiertos cuando 36 bombarderos Kate del Hiryu y del Soryu y 36 bombarderos en picado Vals del Akagi y del Kaga con 9 Ceros de cada uno, despegaron y conducidos por el teniente de navío Joichi Tomonaga del Hiryu, se dirigieron directos hacia la isla. Teniente de Navío Joichi Tomonaga
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22 Nov 2010 23:20 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Pasó más de una hora de vuelo antes de que los Catalinas, vigilando en su diaria tarea al amanecer, hicieran contacto con ellos, dando informe de su localización. A las 05-52 horas fueron localizados también los portaaviones. Antes de cinco minutos hasta el último avión útil en Midway estaba ya en el aire; los bombarderos y los aviones torpederos, en busca de los portaaviones enemigos, y los cazas tomando altura hasta 5.000 metros. A 50 kilómetros de Midway fue avistada la oleada de bombarderos que iba en formación de V. Los cazas norteamericanos, 18 Buffalos y 7 Wildcats, se precipitaron al ataque; pero en su descenso fueron interceptados por los Cero, superiores en número y por supuesto mucho más aún en rendimiento y en experiencia. Todos los Brewsters fueron derribados o gravemente averiados. De los Wildcats tres fueron abatidos y dos alcanzados. Pocos aviones japoneses resultaron derribados por sus contrincantes o por la artillería antiaérea de las islas. Cuando la fuerza aérea de ataque regreso a sus portaaviones las instalaciones de Midway estaban ya muy gravemente dañadas y entre tanto los portaaviones japoneses habían esquivado con éxito los ataques de los aviones torpederos norteamericanos del Ejército y de la Marina, los de los bombarderos de reconocimiento de la Infantería de Marina y los de las Fortalezas Volantes del Ejército procedentes de Midway. Los cuatro B-26 y los seis Avenger atacaron simultáneamente, pero no lograron hacer blancos y por el contrario dos B-26 y un Avenger cayeron víctimas de la sombrilla de protección de caza de Ceros, al igual que les ocurrió a muchos Dauntless y Vindicators, que tampoco consiguieron nada. El bombardeo a alta cota de las Fortalezas no tuvo mejor resultado contra los buques en navegación, que la que había obtenido en el teatro de Europa. Para las 08-30 horas la fuerza aérea de ataque de Midway se había ya agotado por completo sin lograr provecho en concreto. En los buques de Nagumo prevalecía un sentimiento de júbilo por todas partes menos en el puente del Almirante, en donde estaba Nagumo, quien nunca fue demasiado fogoso a pesar de su récord de éxitos conseguidos hasta la fecha, y que se encontraba en un momento de indecisión originado por un fallo fatal en el plan concebido por Yamamoto. Contra el peligro de que la Fuerza de Ataque fuese sorprendida por la flota enemiga, se había tomado la prudencia de efectuar un reconocimiento aéreo hacia el Este, llevado a cabo por siete hidroaviones catapultados desde buques al amanecer. Además, Nagumo había retenido consigo desde el ataque aéreo a Midway la mitad de los Vals del Hiryu y del Soryu y la mitad de los Kates del Akagi y del Kaga, estos últimos armados además con torpedos. Pero lo cierto es que si hubiese llegado a descubrir a la flota enemiga antes del aniquilamiento de Midway se habría visto forzado a escoger entre una de estas dos tareas incompatibles entre sí: atacar a la flota enemiga o atacar a Midway. Y ésta era la mismísima situación en que ahora se encontraba. La cadena de sucesos que habían conducido a ello comenzó cuando a las 07-00 horas Tomonaga, repasando los resultados de sus ataques, llegó a la conclusión de que era necesario un segundo golpe y así lo señaló. A las 07-15 horas por tanto, se ordenó a los Kates alineados en las cubiertas del Akagi y del Kaga que fueran devueltos a los hangares para cambiar sus torpedos por bombas. Trece minutos más tarde comienza la incertidumbre de Nagumo cuando recibe un mensaje del hidroavión del crucero Tone informando la localización de una fuerza de diez buques enemigos, aproximadamente a unas 300 millas hacia el Este. IJN Tone Durante quince minutos Nagumo luchó entristecido con el problema que se le presentaba, complicado más aún si cabe por el fallo del avión del Tone, que no especificaba los tipos de buques de su avistamiento. Finalmente se decidió por una solución de compromiso.
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23 Nov 2010 18:41 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
El segundo ataque se prepararía contra los buques enemigos solamente con los Kate que aún no habían cambiado las bombas y retenían sus torpedos. Entre tanto se envía un aviso al avión del Tone para que ampliara detalles del avistamiento y se le repitió nuevamente diez minutos después. Nunca se sabrá si Nagumo habría lanzado este segundo ataque si no hubiera tenido noticia de la presencia de los portaaviones enemigos. En los treinta minutos siguientes fue imposible hacerlo, porque sus portaviones estuvieron completamente ocupados haciendo rumbos en zigzag para evitar los ataques de los bombarderos de los Marines y de las Fortalezas Volantes de Midway y en el centro de la formación de los torpedos del submarino norteamericano Nautilus. USS Nautilus SS-168, abril 1942 Los únicos aviones que despegaron fueron los Ceros que estaban en cubierta para acompañar el ataque, pero que ahora se lanzaron al combate que se había desencadenado encima de ellos. Desde este momento el ataque que se lanzase tendría que ir forzosamente sin escolta de cazas, y este paso no se decidió a darlo Nagumo a pesar de la señal recibida del avión del Tone a las 08-20 horas en el que se comunicaba que el enemigo iba acompañado de lo que parecía ser un solo portaaviones y a pesar de otro mensaje recibido de su subordinado a las 08-30 horas el contralmirante Yamaguchi a bordo del Hiryu, urgiéndole para que lo hiciera. Contra Almirante Tambo Yamaguchi En este momento estaba ya a la vista de regreso la primera oleada que volvía del ataque. Algunos aviones regresaban con averías y todos ellos muy cortos de gasolina, por lo tanto tenían que tomar cubierta inmediatamente. El atolón de la disputa, Midway Nagumo dio la señal que iba a decidir la Batalla de Midway; despejar las cubiertas de los portaviones cancelando el segundo ataque que se estaba preparando. En los próximos cuarenta y cinco minutos las cubiertas de los portaaviones vivieron escenas de pesadilla cuando los aviones iban tomando cubierta uno tras otro y eran asaltados por los equipos del buque para reponerles de combustible y armamento. Abajo, en los hangares, los pesados torpedos eran conducidos a remolque desde los pañoles a los bombarderos Kate. En el Kaga y en el Akagi las bombas que se reemplazaban eran amontonadas por las buenas junto a los costados de los hangares en espera del momento conveniente de que pudieran ser devueltas a los pañoles. Y mientras los portaaviones estaban en esta peligrosa y vulnerable situación, y totalmente inadvertidos, se acercaba volando hacia ellos la némesis inexorable. En la fuerza de portaviones norteamericana, a 200 millas al Nordeste de Midway, el 4 de junio había empezado con un despegue a las 04-30 horas para un reconocimiento de madrugada hacia el Norte, de diez aviones de reconocimiento del Yorktown, Llevaban ya una hora de vuelo cuando el buque insignia de Fletcher captaba los avistamientos de los portaaviones de Nagumo hechos por los Catalina de Midway. Por fin había aparecido el objetivo esperado. Inmediatamente Fletcher señaló a la Fuerza Operativa 16 de Spruance el Enterprise y Hornet, que se dirigiera hacia el Sudoeste y atacara a los portaaviones enemigos en cuanto los localizase. El les seguiría con el Yorktown tan pronto como recogiese a sus aviones de reconocimiento.
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23 Nov 2010 20:56 |
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Sotacomitre
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Re: Los Portaaviones V
Cuando la Fuerza Operativa 16 hacía rumbo a 25 nudos, los dos portaaviones de Spruance se preparaban para lanzar sus oleadas de ataque. Spruance se percató de la oportunidad que se le presentaba de sorprender a los portaaviones enemigos en el momento más vulnerable para ellos, es decir, cuando estaban recobrándose de su ataque a Midway, y decidió lanzar contra ellos la totalidad de su fuerza de choque, pero no todos los aviones podían volar juntos y ser lanzados al mismo tiempo. Los bombarderos en picado, 33 del Enterprise conducidos por su comandante el capitán de corbeta Clarence W. McClusky, 35 del Hornet conducidos por el capitán de fragata Stanhope C. Ring, formaban la primera oleada. Clarence W. McClusky Mientras los restantes estaban siendo izados y despegaban, los primeros tomaban altura girando en torno al buque. Pero en este momento fue descubierto el hidroavión de reconocimiento del Tone. El enemigo, por tanto, estaba desde este momento alertado. No se podía perder ni un minuto para que su contraataque se frustrase. A los bombarderos en picado del Enterprise se les ordenó actuar sin esperar a los aviones torpederos y a la escolta. En la creencia de que Nagumo habría de continuar a rumbo Sudoeste tal y como había sido avistado, pusieron rumbo directo a interceptarlo. Inesperadamente, sin embargo, Nagumo cambió el rumbo al Nordeste, mientras los aviones de McClusky y los de Ring con los bombarderos en picado y cazas del Hornet seguían haciendo un rumbo demasiado alejado hacia el Sur. Al no encontrar al enemigo en el punto estimado de intersección, Ring arrumbó al Sur con la fuerza completa de bombarderos en picado del Hornet y de cazas. No encontraron nada y estando ya cortos de gasolina, los cazas se vieron forzados a amerizar y los bombarderos a tomar tierra en Midway o volver directamente a su portaaviones. Si McClusky hubiera tomado la misma decisión que Ring el resultado de la Batalla de Midway podía haber sido muy diferente de lo que fue. Pero en vez de ello "él giró" a estribor, hacia el Noroeste, una elección que le llevaría a la fama y a la gloria. Entre tanto las escuadrillas de aviones torpederos del Enterprise y del Hornet habían sido lanzadas en busca del enemigo. El capitán de corbeta John C. Waldron, mandando el grupo de 15 aviones torpederos del Hornet y mientras recibía las instrucciones finales de su comandante Marc Mitschet, había es¬tudiado la situación, tal como se presentaba en el puente de navegación, sobre la carta. A la derecha de la imagen, el capitán de corbeta John C. Waldron Estaba convencido de que el enemigo evo¬lucionaría para cerrar distancias entre ambas fuerzas. Cuando despegó en consecuencia puso rumbo hacia donde él creía que iba a encontrar su objetivo. El capitán de corbeta Lindsey conduciendo la escuadrilla de 14 Devastator del Enterprise llegó también a una conclusión similar aunque el rumbo que llevaba se separaba un poco hacia el Sur del de Waldron. El capitán de corbeta Lindsey Sobre ambas escuadrillas de aviones torpederos que volaban bajo a ras de agua, lo hacían a gran altura los 10 Wildcats del Enterprise conducidos por el teniente de navío James S. Gray. Su misión era proteger a la escuadrilla de Lindsey y estaba convenido que Lindsey le llamaría por radio para que descendiesen cuando las aviones torpederos se lanzasen al ataque. A las 09-20 horas Waldron vio su objetivo hacia delante. Sin apoyo y sin protección se dirigió al ataque. Unos kilómetros al Sur de él Lindsey vio al enemigo casi simultáneamente y lo atacaba pocos minutos después. Por alguna razón no llevó a cabo la convenida llamada por radio a Gray, el cual quedó volando en círculos a gran altura mientras que las dos escuadrillas de torpederos se dirigían hacia la catástrofe.
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24 Nov 2010 20:19 |
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Re: Los Portaaviones V
En los portaaviones japoneses, los últimos aviones del ataque sobre Midway acababan de posarse y los barcos de Nagumo habían evolucionado simultáneamente obedeciendo a su señal de gobernar hacia el Nordeste a fin de acortar distancia con el enemigo. Nuevos aviones para la oleada de ataque estaban ya siendo izados a cubierta, siendo los primeros los cazas Cero de protección. Así que cuando a las 09-20 horas aproximadamente se recibieron informes de las unidades avanzadas de que se aproximaba una oleada de aviones enemigos, fueron puestas rápidamente en el aire una docena de Ceros de cada buque. Su fácil presa, la formación de 15 lentos e indefensos Devastator del Hornet, la encontraron en seguida. En cinco minutos fueron todos abatidos sobre la mar y la mayoría de ellos no pudieron ni siquiera dejar caer sus torpedos. No había tiempo para alegrías, sin embargo, porque 14 Devastator de Lindsey se estaban aproximando en vuelo rasante sobre el agua desde dos puntos distintos. Más Ceros picaron sobre ellos haciéndolos zambullir uno tras otro en el agua en medio de surtidores de espuma. Solamente cuatro consiguieron escapar, lanzando rápidamente y a ciegas sus torpedos antes de zafarse del mortal holocausto. Siguieron unos treinta minutos de relativa tranquilidad durante los cuales los Ceros tomaron cubierta para repostar la munición de sus cañones y ametralladoras, e inmediatamente se lanzaron de nuevo a la tormenta de "Banzais". Apenas despegaban cuando se les presentaban nuevos objetivos, 12 Devastator más volando a ras de agua. Tan pronto como regresaron a bordo del Yorktown los aviones de reconocimiento, despegó a las 08-20 horas una fuerza de 10 aviones torpederos conducidos por el capitán de corbeta Lance E. Massey y escoltada por 6 Wildcats, y 17 bombarderos en picado conducidos por el capitán de corbeta Marxal F. Leslie. Capitán de corbeta Lance E. Massey La escuadrilla de Massey era la que iba a atacar primero. Esta vez iba protegida por media docena de Wildcats, los cuales picaban, giraban y ascendían sin parar para dar alguna defensa a la chatarrería torpedera. Eran ampliamente superados en número y en maniobrabilidad por los Ceros y aunque consiguieron derribar algunos pocos cazas japoneses, todo su esfuerzo fue en vano. Uno tras otro los Devastator fueron cazados y derribados. Sólo dos consiguieron escapar. Todos sus torpedos, además, fueron esquivados. Gritos de júbilo salían de los buques japoneses que contemplaban esta espectacular demostración de su invencibilidad. La preparación para el lanzamiento de su propia fuerza de ataque se estaba llevando a cabo con entusiasmo y para las 10-24 horas estaba ya todo listo y los motores calentando, cuando la orden de evolución para poner los portaaviones proa al viento vino enseguida. Los Ceros entre tanto evolucionaban en vuelo rasante en torno al buque esperando para tomar cubierta y repostar. En este preciso momento se empezó a oír el creciente aullido de los bombarderos en picado y el silbido de las bombas metió el temor en los corazones hasta ese mismo momento llenos de entusiasmo. Alrededor del Kaga, Akagi y el Soryu se alzaron altos piques de agua blanca teñida por la explosión de las bombas que se levantaban hacia el cielo. Ataque al Akagi Ataque al Soryu Soryu bombardeado por los B-17 evolucionando con vuelta en redondo para esquivar las bombas En medio de ellos, los buques sacudidos por las explosiones de los impactos directos que perforaban las ligeras cubiertas de vuelo, estallaban en los hangares y más abajo aún, haciendo explotar las bombas y los torpedos, y reventando las tuberías de combustible y empezando a provocar deflagraciones por todas partes. En los que se tarda en guiñar un ojo el triunfo se transformó en desastre.
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24 Nov 2010 22:23 |
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Sotacomitre
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Re: Los Portaaviones V
Las dos formaciones de bombarderos en picado del Enterprise y del Yorktown habían tenido la suerte de llegar justo encima del Akagi, el Kaga y el Soryu casi simultáneamente (en las precipitadas maniobras para evitar los ataques de los torpedos, el Hiryu se había separado algo de los demás). Mac Cluskey, después de su caían a estribor en busca del enemigo había visto únicamente la blanca estela de un solitario y veloz destructor. Juzgando correctamente que navegaba para reunirse con el grueso de su flota, se decidió a seguirlo. El destructor había estado cazando al submarino Nautilus, tras su anterior ataque y ahora involuntariamente estaba sirviendo para conducir a los bombarderos del Enterprise hacia su objetivo. Leslie, siguiendo a Massey, había tomado un rumbo más directo, y así cuando Mac Clueskey llegaba a escena procedente del Sudeste, Leslie llegaba del Este. Ni tan siquiera fueron molestados por la defensa de los Ceros, porque todos ellos estaban volando a baja cota, saboreando su reciente y breve triunfo sobre los aviones torpederos enemigos. Ciertamente la presencia de ninguna de las dos formaciones de bombarderos en picado fue conocida por los japoneses hasta que fue anunciada por la avalancha de los aviones proyectándose desde el cielo al mar. La escuadrilla de Leslie fue la primera en atacar. Escogió el gran blanco del casco del Kaga como objetivo. Cuatro impactos directos lo redujeron en pocos segundos a un pecio en llamas con el puente y cubierta de vuelo destruidos y los torrentes de combustible que salían de las tuberías rotas, alimentando los incendios. MacCluskey dividió su fuerza, que era más grande, entre el Akagi y el Soryu. El buque insignia de Nagumo encajó dos impactos de bomba, ninguno de los cuales fue decisivo por sí mismo, pero la misma reacción en cadena mortal de incendios, estallidos de gasolina y explosiones de gas que habían destruido al Lexington en el mar del Coral, destrozó al gran buque japonés de la misma manera. En pocos minutos estaba claro que el Akagi había quedado sentenciado. Ante la insistencia de su Estado Mayor, el almirante abandonó el buque y trasladó su insignia al crucero ligero Nagara, de su escolta, desde donde continuó dirigiendo el mando de la fuerza. El Soryu había sufrido otros tres impactos directos y corría la misma suerte. Aunque los tres portaaviones ardían furiosamente, aún permanecieron a flote unas cuantas horas, hundiéndose finalmente el Kaga y el Soryu entre las 19-00 y las 19-30 horas, mientras que el Akagi tuvo que ser rematado por el tiro de gracia de los propios torpedos japoneses diez horas más tarde. La Fuerza de Ataque de Nagumo en el transcurso de unos pocos instantes había quedado reducida a un solo buque: el Hiryu . En este buque el impulsivo Yamaguchi, que había presenciado las fatales consecuencias de las primeras vacilaciones de Nagumo no perdió ni un momento en lanzar una oleada de ataque de 18 bombarderos en picado Val y 6 Cero, conducida por el experto, Michio Kobayashi, un veterano de todas las operaciones felices de la fuerza de Nagumo. Capitán de Corbeta Michio Kobayashi Siguiendo la ruta de regreso de los aviones norteamericanos, llegó hasta el Yorktown. El radar había detectado su formación cuando aún estaba casi a 80 kilómetros de distancia y los Wildcats que volaban en patrulla de protección se dirigieron contra él. Uno a uno los Vals fueron derribados en llamas sobre el mar. Sólo ocho sobrevivieron para llegar a efectuar el ataque sobre el portaaviones enemigo, pero lo hicieron con el tradicional valor suicida de los japoneses. Tres fueron derribados por el fuego antiaéreo del Yorktown y su escolta, pero de los únicos que sobrevivieron consiguieron tres impactos directos. Resultado del ataque japones al Yorktown Al regreso al Hiryu, Yamaguchi se sintió satisfecho al ver los partes de los pilotos de que el único portaaviones enemigo hasta entonces localizado había sido puesto fuera de combate de forma efectiva. La odisea del Yorktown podía ahora ser la misma que la de los portaaviones japoneses, porque del mismo modo había sido también sorprendido repostando combustible a sus aviones tras el ataque. Pero las lecciones de la Batalla del Mar del Coral habían sido para entonces muy bien asimiladas. A su debido tiempo el sistema de distribución de combustible había sido variada y llenadas las tuberías con gas CO2, no inflamable. Durante algún tiempo el buque tuvo que parar por averías en las calderas el almirante Fletcher se vio obligado a trasbordar su insignia, a un crucero, pero para las 13-40 horas el buque ya estaba de nuevo en condiciones de hacer avante, con sus cubiertas de vuelo parcheadas y en condiciones de volver a operar con sus aviones.
_________________ Secretario Justicia del Foro. Insignia en el crucero acorazado: Emperador Carlos V R. O. del 21 de febrero de 2015. Nunc Mínerva, postea palas (Primero la sabiduría, después la guerra), Lema del Arma de Ingenieros del ET Español
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24 Nov 2010 22:55 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
La satisfacción de Yamaguchi, en cualquier caso, no iba a ser la última por mucho tiempo. Un avión de reconocimiento lanzado desde el Hiryu, inmediatamente antes de resultar éste alcanzado, comunicaba que acababa de localizar a los tres portaaviones norteamericanos juntos. Como su radio fuese deficientemente recibido, el piloto optó por regresar y tomar cubierta en el Hiryu con la magnífica noticia. Con sólo diez aviones torpederos y seis cazas que quedaban útiles, Yamaguchi decidió, no obstante, realizar un esfuerzo a la desesperada. El audaz Tomonaga, a pesar de tener perforado el tanque de una de sus alas, lo que le hacía quedar sin gasolina suficiente para el regreso, condujo la oleada de ataque que despegó a las 12-45 horas. Como el Yorktown fue el primer buque avistado, fue de nuevo el objetivo preferido. Los cazas de protección derribaron la mitad de la fuerza atacante, pero cinco Kates sobrevivieron y cuatro de ellos forzaron sus ataques hasta el final. El portaaviones, que para entonces ya navegaba a rumbo dando 20 nudos, esquivó dos de los torpedos, pero otros dos le alcanzaron en el costado de babor al no poder evitarlos. Sus explosiones estremecieron al barco de proa a popa, haciéndolo tomar una importante escora a babor. El USS Yorktown, escorado a babor Temiendo que pudiera zozobrar en cualquier momento, su comandante dio la orden de abandono. Los destructores recogieron a la tripulación y el Yorktown fue dejado morir poco a poco. Sin embargo, no lo hizo todavía durante bastante tiempo. Y la venganza contra sus enemigos iba a ejecutarse inmediatamente. En el mismo momento en que el casco del Yorktown estaba siendo desgarrado, por los torpedos de Tomonaga, uno de sus aviones de reconocimiento localizaba y reportaba la presencia del superviviente Hiryu. Spruance, ahora con el mando táctico, ordenó al momento un ataque. Desde el Enterprise despegaban a las 15-30 horas 24 bombarderos en picado, algunos de ellos refugiados del Yorktown, treinta minutos después fueron seguidos por 16 Dauntless más del Hornet. A bordo del Hiryu el último avión de la oleada de Yamaguchi había sido reequipado, repostado y situado en cubierta para hacer un esfuerzo final cuando a las 17-00 horas, inobservado por venir en dirección del sol, el teniente de navio Gallabrer, que hacía su segundo ataque en el día, conducía la escuadrilla del Enterprise y picaba para el ataque. Cuatro blancos directos destruyeron la cubierta de vuelo del Hiryu doblando el ascensor de proa y proyectándolo contra las superestructuras de la isla y poniendo en marcha la fatal cadena de incendios y explosiones que había aniquilado a sus compañeros de escuadra poco antes. IJN Hiryu alcanzado. Para cuando llegaron los aviones del Hornet, ya estaba en llamas de punta a punta y ni tan siquiera era ya un objetivo militar. Las bombas se emplearon contra el acorazado Haruna y dos de los cruceros de escolta, pero no lograron ningún impacto. Acorazado INJ Haruna Al igual que los otros portaaviones alcanzados por bombas en ese día, el Hiryu no se hundió inmediatamente. Los incendios incontrolables se extendieron por los entrepuentes y forzaron a los tripulantes a abandonar el buque a las 04-30 horas de la madrugada del día siguiente 5 de junio. Varios torpedos lanzados desde los propios destructores japoneses aceleraron su fin, que, sin embargo, no se produciría definitivamente hasta las 09-00 horas, momento en que finalmente zozobró y se fue a pique. Así acabó el último de los un día esplendidos portaaviones de escuadra de Nagumo, víctima como sus compañeros del propio erróneo plan de Yamamoto, un plan que despreciaba dos de los principios básicos de la guerra: el mantenimiento del objetivo y la concentración de fuerzas.
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24 Nov 2010 23:35 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Encomendados a Nagumo dos objetivos incompatibles entre sí, le hizo fracasar en ambos. Desperdigando tocia su fuerza útil a través del inmenso océano entre Midway y las Aleutianas, hizo posible el que fuese derrotado en varios encuentros parciales. Si hubiese concentrado su fuerza de portaaviones disponibles añadiendo el Ryttjo, el Junyo y el Zuiho a la flota, manteniendo su tremenda fuerza de acorazados como apo¬yo inmediato, la escuadra norteamericana o hubiese sido totalmente barrida o se hubiera visto forzada a retirarse y abandonar Midway. Pero el grueso de la flota con el Zuiho estaba 350 millas al Nordeste, y sus otros dos porataviones estaban malgastando sus fuerzas en una operación secundaria de diversión en las Aleutianas. INJ Zuiho Aun después del desastre, creyó que podía hacer cambiar la suerte llevando a la flota norteamericana a un combate nocturno contra sus acorazados y ordenó a tal efecto a los distintos grupos de buques pesados un, movimiento de avance. Spruance no tenía la menor intención de caer en la celada de un encuentro, y al anochecer se retiró hacia el Este invirtiendo el rumbo de nuevo antes del alba del día 5, para ponerse en posición para lanzar nuevos ataques aéreos. La confirmación del fallo de sus esperanzas le llegó a Yamamoto durante la noche y con ella la plena aceptación de la derrota. Llamó de nuevo a todas sus unidades para que se reagrupasen, quedó cancelada la invasión de Midway y en medio de profunda humillación puso rumbo al Japón. Su cáliz de amagura aún no estaba colmado. Los cuatro cruceros Kumano, Suzuya, Mikuma y Mogami, a los que se había confiado la misión del bombardeo de Midway, navegaron toda la noche cumpliendo la orden de agrupación de fuerzas y a este rumbo toparon con el submarino norteamericano Tambor, que patrullaba a unas 90 millas al Oeste de Midway. USS Tambor IJN Kumano Desde el buque insignia Kumano se dio por proyector una señal de alarma con orden de giro simultáneo a babor de toda la línea. El último buque, el Mogami, no recibió el mensaje y al no ejecutar la evolución abordó al Mikuma que iba por su proa. Ambos buques quedaron averiados y redujeron su marcha. IJN Mogami IJN Mikuma IJN Suzuya El crucero insignia, deseoso de efectuar el encuentro con su almirante tal como se le había ordenado, dejó por la popa a los dos buques averiados navegando malamente.
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25 Nov 2010 20:53 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Cuando llegó la luz del día 5 de junio todos los barcos grandes de la flota de Yamamoto, menos estos dos cruceros, se habían retirado más allá del alcance de los Catalinas de reconocimiento de Midway. Por esto, todos los esfuerzos norteamericanos en el bombardeo se concentraron sobre ellos. Los bombarderos del Ejército no consiguieron localizarlos; pero 12 bombarderos en picado de la Infantería de Marina supervivientes, los atacaron desde la isla aquella misma mañana. No consiguieron ningún impacto sobre ellos, pero el capitán Richard E. Fleming, alcanzado por el fuego antiaéreo en el momento de soltar la bomba, con un valor sin igual estalló su Vindicator contra la torre de popa del Mikuma, aumentando sus averías y causando incendios. Capitán Richard E. Fleming, (de alférez USMAC) medalla del Congreso Por la tarde, los portaviones de Spruance estaban dentro del radio de acción para poder atacar, pero una fuerza de 58 bombarderos en picado falló en la búsqueda de los dos cruceros. A primera hora del día 6, sin embargo, sus aviones de reconocimiento los localizaron y en seguida se organizó un ataque masivo en su dirección. Ambos buques fueron gravemente alcanzados. El Mikuma se fue a pique, pero el Mogami se mantuvo increíblemente a flote convertido en un pecio chamuscado, y aún consiguió reparar sus máquinas y lentamente llegar hasta la base de la isla japonesa de Truk, en las Carolinas. El IJN Mikuma “herido” de muerte La Batalla de Midway había concluido. Fue una aplastante derrota de la flota japonesa por una fuerza enemiga muy inferior numéricamente, casi increíble a menos que la nueva forma de producirse la guerra naval se aceptase ya sin reservas. Ahora realmente sólo contaban los portaviones, tal y como el almirante Sims había pronosticado diecinueve años antes. Total, como en realidad era la victoria norteamericana, vino a echarla a perder en su perfección un episodio final. El Yorktown, abandonado en la tarde del día 4, escorando mucho, había sobrevivido a flote en la mar llana durante el resto del día y toda la noche siguiente. A la vista de ello, los destructores que permanecían en derredor suyo, sugirieron la posibilidad de salvarlo. Un dragaminas lo tomó a remolque y una parte de su dotación saltó de nuevo a bordo con su comandante. En la tarde del 6 de junio, con el destructor Hamman abarloado para suministrarle agua y energía eléctrica, y con otros dos destructores rodeándolo para formar una barrera antisubmarina, empezó a hacer avante muy lentamente hacia Pearl Harbour. USS Hamman Pero nunca llegaría. El submarino japonés 1-168, lo localizó y colándose hábilmente entre la cortina de destructores le disparó cuatro torpedos, uno de los cuales alcanzó y hundió al Hamman y otros dos explotaron contra el costado de estribor del portaaviones. I-168 USS Hamman explotando al costado del Yorktown Una vez más el Yorktown tuvo que ser abandonado y el agua se precipitó a través de su costado desgarrado. Y todavía el malparado buque se resistió a hundirse con sus muchas heridas durante otras doce horas. Pero el día 7 a primera hora, llegó el final del Yorktown cuando empezó a zozobrar lentamente tumbando a babor y sumergiéndose a continuación. El USS Yorktown antes del abandono FIN de Portaaviones V Fuentes: De Trafalgar a nuestros días Vol IV, Editorial Delta // Navíos & Veleros, Editorial Planeta –Agostini // Portaaviones, editorial San Martin por Donald Macintyre // La flota de alta mar Japonesa, editorial San Martin, por Richard Humble.//Brithis Aircraf 1939/45 Osprey. Chris Henry, Battle of the Coral Sea, Ed. Naval Institute Press// La Guerra Naval en el Pacífico, Luis de la Sierra- Ed. Juventud
Imágenes: fuentes anteriores, Wikipedia, Imperial Japanese Aircraft Carriers 1921-45, Profile Wars Ships, US Navy Aircrft 1923-45, Encyklopedia Okretov, Royal Navy, RAF Museun, Naval History, aircraftinformation, 24 flotilla,La Bancarella Aeronautica, Bundersarchiv, Departament of history naval, Naval historical center, dixiewing.org, archivos personales
_________________ Secretario Justicia del Foro. Insignia en el crucero acorazado: Emperador Carlos V R. O. del 21 de febrero de 2015. Nunc Mínerva, postea palas (Primero la sabiduría, después la guerra), Lema del Arma de Ingenieros del ET Español
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26 Nov 2010 14:39 |
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Beatriz de Palacios
Capitán de Navío Especialista
Registrado: 23 Sep 2010 18:47 Mensajes: 1093 Ubicación: madrid-cadiz-cordoba y otra vez madrid, y otros muchos lugares interesantes
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Re: Los Portaaviones V
Magnifico trabajo, Sotacómitre! Y fácil de leer, nada intenso. Divertido.
_________________ Jefe de máquinas del crucero: Emperador Carlos V R. O. del 16 de noviembre de 2010. «Mas madera, que es la guerra. Más aceite, que esto vuela» (Don José Rodríguez Barba, fogonero maquinista del crucero Canarias, en pleno apresamiento del Mar Cantábrico, Guerra Civil Española 1936-1939)
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27 Nov 2010 21:10 |
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Sotacomitre
Capitán General
Registrado: 14 Nov 2009 16:42 Mensajes: 18086 Ubicación: Al Corso contra el Inglés, el gabacho, el yankee y el berberisco
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Re: Los Portaaviones V
Gracias Jefe Beatriz, me alegro que le gustara de verdad y no sea por "Peloteo" a tu Comandante Saludos
_________________ Secretario Justicia del Foro. Insignia en el crucero acorazado: Emperador Carlos V R. O. del 21 de febrero de 2015. Nunc Mínerva, postea palas (Primero la sabiduría, después la guerra), Lema del Arma de Ingenieros del ET Español
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27 Nov 2010 23:04 |
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Beatriz de Palacios
Capitán de Navío Especialista
Registrado: 23 Sep 2010 18:47 Mensajes: 1093 Ubicación: madrid-cadiz-cordoba y otra vez madrid, y otros muchos lugares interesantes
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Re: Los Portaaviones V
Qué va! Es que es fácil de leer, porque los textos no son densos, hay fotos, y además los capítulos se han repartido a lo largo de varios días. Es un trabajo divertido de leer.
_________________ Jefe de máquinas del crucero: Emperador Carlos V R. O. del 16 de noviembre de 2010. «Mas madera, que es la guerra. Más aceite, que esto vuela» (Don José Rodríguez Barba, fogonero maquinista del crucero Canarias, en pleno apresamiento del Mar Cantábrico, Guerra Civil Española 1936-1939)
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27 Nov 2010 23:19 |
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Rosilly
Teniente de Navío
Registrado: 28 Dic 2006 13:42 Mensajes: 4764
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Re: Los Portaaviones V
_________________ ¡Izad la señal nº5!: "A los que por su actual posición no combate, tomar una que los lleve rápidamente al fuego"
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29 Dic 2010 07:17 |
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Rosilly
Teniente de Navío
Registrado: 28 Dic 2006 13:42 Mensajes: 4764
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Re: Los Portaaviones V
Ya que estamos con el Yorktownm en la primera foto se observa un avion que cuelga sobre el vacio, aunque en la foto sea algo dificil observarlo. En la segunda se ve el elemento, el outrigger, que permite poner la parte trasera del avion en el vacio, solo el tren de aterrizaje principal reposa sobre la cubierta del PA, permitiendo asi ganr espacio.
_________________ ¡Izad la señal nº5!: "A los que por su actual posición no combate, tomar una que los lleve rápidamente al fuego"
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29 Dic 2010 07:30 |
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Rosilly
Teniente de Navío
Registrado: 28 Dic 2006 13:42 Mensajes: 4764
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Re: Los Portaaviones V
En esta del USS Intrepid se ve a un Hellcat en un outrigger.
_________________ ¡Izad la señal nº5!: "A los que por su actual posición no combate, tomar una que los lleve rápidamente al fuego"
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29 Dic 2010 07:49 |
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