Vapor de paletas Fernando el Católico

Clase: Vapor de paletas

Construido por: "Wigram & Sons" de Londres


Nombres: Fernando el Católico

Quilla: 16 de julio de 1850

Botadura: finales de 1850

Alta Oficial: 1851

Baja Oficial: 1856

Características:

Desplazamiento en lastre: ?


Desplazamiento máximo: 2.879 Tm


Eslora máx: 68,7 m.


Eslora entre PP: ?


Manga: 11,3 m.


Puntal: ? m.


Calado máximo: 5,2 m.


Propulsión:2 máquinas de 2 cilindros // 4 calderas // 2 ruedas de paletas laterales.


Jarcia: aparejo de fragata con bauprés y 3 mástiles.


Potencia: 500 Cv


Velocidad: 10 nudos máxima.


Autonomía: ?


Combustible: carbón


Capacidad: ? Tm.


Armamento: 2 cañones de 68 libras (200 mm)


Dotación: 300

Historial

La construcción del Fernando el Católico fue autorizada el 23 de marzo de 1850 junto con la del Isabel la Católica, para ser ambos empleados como correos entre la Península y las Antillas.



El contrato de su construcción se firmó el 25 de mayo con los astilleros "Wigram & Sons" de Londres.



La quilla se puso el 16 de julio de 1850, fue botado a finales de dicho año y entregado en 1851.



Como en principio iba a operar como correo, durante el período de construcción solo se le montaron 2 cañones de los 16 previstos.



Llegó a Cádiz el 7 de agosto de 1851 con el Isabel II.



Al incorporarse a la Armada, el Fernando el Católico, al igual que su gemelo el Isabel la Católica, fue destinado al servicio de correos con Ultramar para el que había sido preparado.



Inició su primer viaje como correo al salir de Cádiz el 16 de agosto de 1851 para transportar correspondencia a Canarias, Puerto Rico y La Habana, y posterior regreso a la Península.



A este viaje le siguieron otros con los mismos destinos, saliendo de Cádiz en las siguientes fechas: 7 de enero, 20 de marzo y 7 de julio de 1852; 12 de noviembre de 1854; 12 de abril de 1855; y 12 de diciembre de 1855 que fue el último.

En este viaje como en los anteriores, navegó rumbo a Canarias, Puerto Rico y La Habana llevando correspondencia y pasajeros.



Pero a la 1 y media de la madrugada del 3 de enero de 1856, cuando navegaba a 11 nudos con buen tiempo por la costa norte de Cuba en demanda del puerto de La Habana, embarrancó en Punta Covarrubias, al este de Nuevitas, y se perdió.



Muchos de los 116 pasajeros que llevaba a bordo decidieron dejar el barco e irse a la playa cercana, donde levantaron chozas.




Pero durante el tiempo que estuvieron en la playa pasaron más penalidades que los que habían decidido quedarse en el barco, ya que la permanencia a bordo no encerraba ningún peligro.




El día 5 apareció por la zona el vapor mercante Pelayo que también se dirigía a la Habana, y al comprobar que no podía hacer nada por el Fernando el Católico, el mismo día 5 recogió a sus pasajeros y la correspondencia, y los llevó a la capital cubana donde entró el día 8.




No se produjo ninguna baja en el vapor correo, y la correspondencia se salvó en su totalidad.




Hasta el mes de abril, los vapores Pizarra y León intentaron reflotarlo echando mano de todos los medios disponibles en la Habana, pero fue imposible y el barco se perdió definitivamente.

Según la prensa de la época, la única explicación para aquel accidente estaba en una posible "gran alteración físico magnética ocasionada por la influencia del mucho hierro que guarnecía esta clase de buques, que influyó en el compás por donde se orientaba el buque haciéndole seguir un rumbo falso".



Al perderse el vapor correo, el viaje de regreso para traer la correspondencia a la Península el mes de enero de 1856 lo hizo la fragata de vela mercante Ana Teresa, que también transportó 24 pasajeros.



Para sustituir al Fernando el Católico se designó al también vapor de ruedas Colón. Y para borrar los nombres de la realeza en los barcos tras la revolución de 1868, su nombre fue dado al vapor Francisco de Asís.




Fuentes:
-Otros 50 barcos españoles del CN Marcelino González.
-Buques de vapor de la Armada Española de Don José Lledó 1834-1885

La foto es bastante famosa. Estaba expuesta en el escaparate de los fotógrafos más señeros de Santander, en la calle San Francisco.

Desconozco la fecha de la foto.

El lugar donde fue tomada es en Santander, en una dársena que posteriormente se ganó a la bahía a base de rellenos de desmontar la colina donde se ubica el Castillo que se ve al fondo. El lugar es ahora, poco más o menos los jardines de Pereda, frente al Banco de España y la central de correos.

Gracias colega, ahora le pongo donde.

Un abrazo