No me refiero a ese ritmo musical moderno, sino al pescado, que tanto ha contribuido a las cocinas españolas y que, durante siglos y junto a las sardinas en salazón, han sido los dos únicos pescados disponibles en la cocina de la España interior.

Creo que este es el lugar del foro adecuado. Si no es así, Sr. Intendente Gral, por favor, recolóquelo.

He encontrado algunas informaciones en Internet muy interesantes, aunque tienen algunos errores históricos, que son los que vuelvo a redactar a continuación, entresacados de https://www.historiacocina.com/historia/ ... acalao.htm, y completado con otros datos dispersos por otras fuentes.

Parece ser que hay datos indirectos de los que puede deducirse que, en el s.XI, los españoles del Norte ya pescaban bacalao en las costas escocesas. Como referencia, hacia 985 Eric el Rojo había llegado a Groenlandia y, hacia 1020, su hijo Leif Ericsson habría llegado a las costas de Terranova, tierra que bautizó como Vinland.

El bacalao sólo se da en aguas frías, pero no excesivamente frías: en el hemisferio Norte, entre las latitudes 40º y 70º (excepcionalmente, se ha encontrado hasta en Cabo Verde). Seguramente, su hábitat en las glaciaciones estaría en latitudes más bajas.

En el siglo XIV, los españoles del Norte llegaban hasya Islandia en la búsqueda de ballenas, y también de bacalao. Asimismo, se cita un tratado de 1354 entre los reyes de Castilla e Inglaterra, permitiendo a los pescadores del Cantábrico la pesca en las costas de Bretaña e Inglaterra.

En el siglo XVI, los pescadores de las actuales Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa pescaban bacalao en un arco que iba desde Terranova, al Oeste, hasta las islas Shetland, pasando por Islandia y las Feröe. Ya en esa época el bacalao era un alimento habitual en la España interior.

La actividad pesquera en esas aguas tan septentrionales se fue reduciendo en la medida en que aumentaba el enfrentamiento entre Inglaterra y España, especialmente a partir de 1585. Desde el tratado de Utrecht, la actividad en esas aguas prácticamente desapareció.

En 1824 se funda el Monopolio del Bacalao. Crece la actividad pesquera y la de las industrias del salazón.

En 1872 se firma el primer tratado de comercio y navegación entre España e Islandia, a través de Dinamarca. En base a dicho tratado, y al haber una demanda importante de bacalao salado en España, al principio del siglo XX empezó Islandia a suministrarlo masivamente, convirtiéndose España en su mercado más importante.

Agradezco enormemente al compañero "Amenofis" esta referencia a esa otra "ruta del bacalao", la auténtica.

Este es un tema que me apasiona (me refiero a la presencia de pesqueros hispanos en las aguas del Lejano Norte). De hecho ya es apasionante que con los recursos navales que tenían las flotas pesqueras medievales hubiera pescadores que se aventuraran por esas latitudes. Personalmente me parece tan heróico como una auténtico batalla naval, en este caso contra los elementos y el clima.

De todas formas, el descubrimiento de aquellas costas que -por no venir al caso- nuestro compañero "Amenofis" menciona de pasada (las exploraciones vikingas) conviene aclarar para otros compañeros menos documentadosque él y para evitar equívocos que, en principio, no tuvo nada que ver con la búsqueda de caladeros de bacalao. Los vikingos (o normandos) de aquella época no eran grandes pescadores y las capturas de cierta altura que solían practicar por entonces por aquellos mares eran más bien cazas de ballenas, más adecuadas a su espíritu guerrero y más fácil de redistribuir en su estructura social, basada en el clan o la tribu.

Erik, el Rojo era un proscrito de su país que se marchó con su gente en busca de una tierra de promisión, que aunque no lo fuera tanto (la áspera "Islandia" -que significa, país de hielo-) le serviría de refugio y para organizar una sociedad alternativa -quizá la primera república norteeuropea- como ahora recuerdan los islandenses épicamente mencionando el "Althing" o parlamento de hombres libres. Su hijo, Leif Eriksson haría otro tanto navegando más hacia poniente en busca de nuevas tierras que evitaran el colapso de los escasos recursos islandeses (agrícolas, fundamentalmente) de ahí que llamase a las tierras recién descubiertas con topónimos de propaganda agraria: "Groenlandia" (país de la verdura) o "Vinlandia" (país de las viñas).

Dicho sea todo esto, con el debido respeto a las interesantes y oportunas aportaciones de nuestro compañero "Amenofis".

Estoy totamente de acuerdo con el compañero Cch sobre lo apasionante de estas aventuras marineras tan lejanas en tiempos tan tempranos, que las hacen equiparables a las de los fenicio-cartagineses por África. Me refiero tanto a las aventuras de nuestros marinos del Cantábrico (en aquella época, normalmente, pescadores, y quizás alguna vez comerciantes), y a la de los marinos noruegos y daneses por esos pagos y por otros más al Sur.

Merecería la pena que aquellos foreros que puedan aportar algo, lo hagan.

Hay un mito que se toma como Excatedra: que el bacalao es típico de los "vascos".

El bacalao y la pesca "seca" siempre ha sido comida de interior, otra cosa es que se haya olvidado en general, aunque como en Zamora se conserve, pulpo incluido. No voy a buscar culpables de ese olvido, pero mucho me temo que, como con otras cosas, se deba a la profunda desorganización social que supuso la Guerra contra Napoleón y al "apoyo" que nos brindaron los ingleses.

Pero volviendo al bacalo (el comestible), en Bilbao se comenzó a comer a partir del Segundo Sitio (el que tan magistralmente nos relata Don Miguel en "Paz en la Guerra"), como consecuencia del desabastecimiento que sufrió la Villa, teniendo que recurrir incluso a las existencias de un almacén en el que había varios miles de sacas de ese "asqueroso pescado que comían en el interior". Y en Bilbao ya se decía entonces lo de "al aldeano y al gorrión, pólvora y perdigón".

Y ahí comenzó la leyenda del bacalo, pescado de interior hasta que de la necesidad algunos hicieron virtud. Y se lo quedaron como otras tantas cosas, Y los demás, asintiendo como pazguatos.

Y es muy de agradecer que nuestros compañeros Amenofis y Cch hayan utilizado un lenguaje muy correcto, y no como suele aparecer por ahí, al referirse a los españoles que pescaban el bacalao.

Se me olvidaba. Yo no le conocí, pero un amigo mío que residía en los años 60 y 70 en el Hotel Carlton de Bilbao conoció al "enviado" islandés para el bacalo que venía todos los años a España y se hospedaba en el Carlton.

Es curioso que fuera precisamente en ese hotel, emblemático para el nacionalismo vasco. Porque allí tuvo su sede el 1º gobierno vasco desde su establecimiento, en Octubre de 1936, hasta el paso de Bilbao a la zona Nacional.
La decisión la tomó el propio José Antonio Aguirre, rey del chocolate (¡ojo!, del clásico; no de la droga actual) antes de ser presidente de ese gobierno, y convertirse en "Napoleonchu".
Hace poco me alojó un cliente allí, y destila nazionalismo "jetzaile" por todos los poros (incluido el periódico que regalan a los huéspedes por la mañana y que, como no podía ser de otra manera, es el "Deia", que yo archivé rápidamente en una papelera).
Lo curioso es que dicho cliente, que había reservado para él y para mí, es hijo de un Vicealmirante de la Armada, y desconocía la historia del hotel. Cuando se la conté, decidió no volver nunca a él.

Amenofis, perdona que corrija tu "lapsus teclae", porque seguro que quisistes poner "jetaile".

Jetzaile o jetzale es como he visto llamar siempre al PNV y a sus partidarios.

Jo Amenofis, no me corrijas en público mi vascuence, que mi emakume me va a sacr los colores ( y no precisamente blanco, rojo y verde).